Se inaugura en Canc¨²n la reuni¨®n preparatoria de la "cumbre" Norte-Sur

Protegidos por un ej¨¦rcito de polic¨ªas, veintid¨®s ministros de Asuntos Exteriores van a intentar este fin de semana en Canc¨²n (M¨¦xico) reactivar una conferencia Norte-Sur que se inici¨® hace seis a?os en Par¨ªs y se clausur¨® bajo el signo del fracaso, despu¨¦s de veinte meses de un di¨¢logo de sordos.

En esta ocasi¨®n, el objetivo inmediato no es tanto sentar las bases de ning¨²n acuerdo, sino desbrozar la agenda para que los jefes de Estado puedan conversar sobre un temario concreto en. la reuni¨®n cumbre que tendr¨¢ lugar en esta misma ciudad los d¨ªas 25 y 26 de octubre. La gloria o el fracaso se reservan para los primeros espadas.Ocho pa¨ªses llevar¨¢n la voz del Norte: Estados Unidos, Canad¨¢, Jap¨®n, Reino Unido, Francia, Rep¨²blica Federal de Alemania, Suecia y Austria. La representaci¨®n del Sur, mucho m¨¢s heterog¨¦nea, podr¨ªa subdividirse en dos puntos: las naciones en v¨ªas de desarrollo y las que no han superado a¨²n el estadio de la mera subsistencia. En el primer bloque figuran Arabia Saud¨ª, Argelia, Brasil, China, India, M¨¦xico, Nigeria, Venezuela y Yugoslavia. En la zona del hambre est¨¢n Guyana, Costa de Marfil, Banglad¨¦s, Filipinas y Tanzania.

Hasta ayer por la ma?ana s¨®lo tres ministros (Rep¨²blica Federal de, Alemania, China y Filipinas) hab¨ªan llegado hasta esta peque?a pen¨ªnsula del Caribe mexicano convertida en una de las f¨¢bricas de vacaciones m¨¢s caras del mundo.

Las medidas de seguridad son tan rigurosas que las autoridades mexicanas ya han hecho saber al equipo del casi todopoderoso Haig que en el hotel de la conferencia no habr¨¢ salas para conferencias de Prensa. El secretario de Estado trae una declaraci¨®n de buenas intenciones que deber¨¢ realizarla en el aeropuerto, porque a los periodistas les est¨¢ vedado el acceso al hotel de los ministros.

El aparato de seguridad incluye dos dragaminas de la Armada mexicana apostados en la bah¨ªa, 1.600 soldados acuartelados en escuelas, hombres rana en la zona mar¨ªtima que rodea el hotel, cientos de polic¨ªas pegados a los valkie-talkis y una ¨²ltima barrera que cierra por completo a los cancilleres en una campana de aire acondicionado.

Cinco ¨¢reas de debates

Aunque el temario de la reuni¨®n es abierto, se han establecido cinco grandes ¨¢reas de debate: alimentos, materias primas y energ¨¦ticos, cooperaci¨®n industrial y transferencia de tecnolog¨ªa, comercio internacional y relaciones financieras. Los pa¨ªses del Sur, que el pasado mi¨¦rcoles celebraron una reuni¨®n previa en Nueva York, presentar¨¢n un frente unido al menos en un tema: que los alimentos no pueden ser utilizados como un arma estrat¨¦gica, al estilo de lo que supuso el embargo cerealero norteamericano a la URSS o la anulaci¨®n de cr¨¦ditos a Nicaragua para la compra de granos b¨¢sicos.M¨¢s all¨¢ del tema de los alimentos todo est¨¢ en el aire. Incluso la cooperacic¨®n industrial que reclaman del Norte tienen significaci¨®n bien distinta para los pa¨ªses petroleros de! Sur, como Arabia Saud¨ª o M¨¦xico, y para las naciones del hambre. El bloque de naciones en v¨ªa de desarroll¨® tratar¨¢ de obtener para estas ¨²ltimas una. transferencia directa de recursos de los pa¨ªses industrializados, en forma de subvenciones a fondo perdido que alcancen al menos el 0,7%. del producto nacional bruto, objetivo propuesto en negociaciones anteriores.

Queda por ¨²ltimo el cap¨ªtulo del comercio y las relaciones financieras, que desde la constante revalorizaci¨®n del d¨®lar presentan un frente cada d¨ªa m¨¢s desfavorable para un Sur crecientemente endeudado. En este caso la mayor¨ªa de las naciones del Norte tienen intereses comunes con los pa¨ªses no desarrollados y podr¨ªa. crearse un. bloque ¨²nico. frente a Estados Unidos. Lo que. est¨¢ claro es, que de esta reuni¨®n no saldr¨¢ ning¨²n acuerdo concreto.

Como dato final hay que rese?ar al gran ausente, la URSS; que ni siquiera ha contestado formalmente a la invitaci¨®n enviada por el canciller austriaco Bruno Kreisky. Los sovi¨¦ticos mantienen la tesis de que el emprobrecimiento del Sur es culpa del saqueo de los pa¨ªses occidentales y que, por tanto, nada de lo que se trata en Canc¨²n te ata?e directamente.

Cuba ha hecho, por el contrario, todo lo posible para que Fidel Castro pudiera estar aqu¨ª en octubre, pero la convicci¨®n de que en ese caso no vendr¨ªa Reagan le ha restado valedores. Todav¨ªa hace tres d¨ªas su embajador ante las Naciones Unidas, Isidoro Malmierca, consigui¨® entrar en la reuni¨®n previa de los catorce pa¨ªses del Sur, despu¨¦s de amenazar con presentarse en Canc¨²n si no le dejaban explicar su postura.

Espa?a, que estuvo en las reuniones de hace seis a?os en Par¨ªs, tampoco ha sido invitada a Canc¨²n. Oficialmente porque el cupo de pa¨ªses desarrollados era muy limitado y no se le pudo incluir a pesar de los buenos oficios de M¨¦xico.