Ed¨¦n Pastora, el "comandante Cero" sandinista, pretende luchar con la guerrilla de Guatemala
Ed¨¦n Pastora abandon¨® su cargo de viceministro de Defensa en el Gobierno nicarag¨¹ense con el prop¨®sito de incorporarse a la guerrilla guatemalteca, formando parte de un plan al que no ser¨ªa ajeno el general Torrijos, cuya muerte habr¨ªa dejado sin cobertura pol¨ªtica y econ¨®mica al comandante Cero. Esta es la versi¨®n que manejan personas muy pr¨®ximas al desaparecido l¨ªder paname?o.
Torrijos hab¨ªa patrocinado durante el ¨²ltimo a?o un plan global para Centroam¨¦rica (v¨¦ase EL PA?S de 9 de agosto de 1981), que exclu¨ªa s¨®lo a Guatemala de las soluciones pol¨ªticas. En su opini¨®n, el r¨¦gimen guatemalteco no pod¨ªa ser transformado sino por la fuerza de las armas. Torrijos siempre fue partidario de reg¨ªmenes moderadamente progresistas, y de ah¨ª su inter¨¦s por crear en Guatemala un grupo armado fuerte de ideolog¨ªa socialdem¨®crata, que sirviera de contrapeso a la guerrilla actual, de obediencia marxista.En este proyecto deber¨ªa jugar un papel carism¨¢tico Ed¨¦n Pastora, junto al ex ministro paname?o Hugo Spadafora, que ya comand¨® las brigadas internacionales en la guerra de Nicaragua y que meses atr¨¢s anunci¨® su prop¨®sito de crear una fuerza multinacional para ayudar a los movimientos insurgentes de Centroam¨¦rica.
Dada la amistad que un¨ªa a Torrijos con los dirigentes sandinistas, los colaboradores del general han insistido en todo momento que ¨¦ste nada tuvo que ver con la salida de Ed¨¦n Pastora y que incluso le recrimin¨® la inoportunidad de su gesti¨®n. Es probable que Torrijos no interviniera esta vez directamente cerca del comandante Cero, pero parece fuera de toda duda la participaci¨®n de Spadafora, un hombre que dif¨ªcilmente hubiera tomado una iniciativa de este tipo sin contar con Torrijos.
El gesto del comandante Cero de abandonar Nicaragua para irse a luchar a otra parte preocup¨® a los dirigentes sandinistas por el momento en que se produjo, en v¨ªsperas del segundo aniversario del triunfo de la revoluci¨®n, y por el temor de que pudiera ser seguido por otros muchos soldados y milicianos que siguen postulados internacionalistas. Esto pudiera ser interpretado, adem¨¢s, por Estados Unidos como un intento de exportar la revoluci¨®n nicarag¨¹ense a otras naciones centroamericanas.
Encuentro Torrijos-Pastora
Fuentes de toda solvencia aseguran que unos d¨ªas antes del accidente a¨¦reo en el que falleci¨® el l¨ªder paname?o ¨¦ste celebr¨® una reuni¨®n con Pastora y Spadafora, en la que se habr¨ªa trazado el futuro inmediato del comandante Cero. La casa en la que tuvo lugar este encuentro estuvo cerrada a cal y canto incluso a personas vinculadas a Torrijos.La s¨²bita muerte del ex presidente paname?o puede frustrar estos planes, principalmente porque la operaci¨®n Guatemala habr¨ªa quedado desprovista de recursos econ¨®micos y los actuales dirigentes de Panam¨¢ parecen poco propensos a entrar en aventuras centroamericanas.
Estos datos sobre el plan de Torrijos han permitido sustentar a algunos periodistas mexicanos la teor¨ªa de que la CIA ten¨ªa poderosas razones para eliminarlo.
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