Los comunistas vascos enfrentamiento al juzgado de guardia
Una treintena de militantes del Partido Comunista de Euskadi (PCE-EPK), pertenecientes al sector Ormaz¨¢bal, opuesto a la l¨ªnea de convergencia con EIA, que la v¨ªspera hab¨ªa recibido el espaldarazo directo de Santiago Carrillo en un mitin celebrado en Sestao ocuparon a primera hora de la ma?ana de ayer la sede central del partido en Bilbao, expulsando de la misma a los miembros del sector rival, que encabeza Roberto Lertxundi. La autoridad judicial deber¨¢ decidir sobre la disputa.
, El propio Lertxundi, cuyos seguidores, amparados en la mayor¨ªa en el comit¨¦ central vasco obtenida en el ¨²ltimo congreso, ven¨ªa utilizando con normalidad los locales del partido, pese a su reciente desautorizaci¨®n por la direcci¨®n central del Partido Comunista de Espa?a, present¨® en la comisar¨ªa de polic¨ªa una denuncia que tambi¨¦n firm¨® el parlamentario y administrador general del partido, Juan Infante. Hacia las 12.30 horas, la sede fue desalojada, quedando en su interior ¨²nicamente un representante de cada uno de los dos sectores enfrentados, junto con un polic¨ªa nacional. El asunto ha quedado en manos del juzgado de guardia. 1El incidente se produc¨ªa veinticuatro horas despu¨¦s de que Santiago Carrillo, que se desplaz¨® a Bilbao acompa?ado por los dos vicesecretarios generales de su partido, Nicol¨¢s Sartorius y Jaime Ballesteros, suscitase el entusiasmo de las cerca de 2.000 personas que participaron en el mitin -convocado bajo el r¨®tulo de ?Asamblea informativa?- celebrado el domingo en un cine de Sestao para proclamar el ?pleno apoyo del PCE al comit¨¦ central provisional?, es decir, al sector que encabeza Ram¨®n Ormaz¨¢bal y que contaba hasta la escisi¨®n con diecinueve de los 64 miembros de la direcci¨®n del partido en Euskadi.
El entusiasmo provocado por Carrillo y los dem¨¢s oradores en la concurrencia -entre la que era evidente la presencia de una mayor¨ªa de trabajadores de edad madura- fue especialmente arrebatado cada vez que desde la mesa se alud¨ªa al pasado del partido, a su ?papel como instrumento imprescindible?, a sus ?setas de identidad?, o, por otra parte, a la figura de Roberto Lertxundi, en quien concretaban su irritaci¨®n buena parte de los asistentes.
Las menciones de Tom¨¢s Tueros, secretario general de CC OO de Euskadi, a la ?separaci¨®n entre base y direcci¨®n? introducida, seg¨²n ¨¦l, por Lertxundi, o la de Carrillo a la necesidad de una direcci¨®n ?ligada a las masas y que no se limite a las brillanteces de algunos hombres, haciendo grandes construcciones estrat¨¦gicas en sus despachos?, suscitaron una euforia no menor a la producida por Mikel Camio al relacionar a Lertxundi con Tamames, para ilustrar su idea de lo que es ?hacer anticomunismo barato?.
Las condiciones
Respecto al fondo de la argumentaci¨®n desarrollada por los oradores, todos ellos coincidieron en subrayar su apoyo a la idea de la unidad de la izquierda en general, e incluso a la convergencia con EIA en particular, si bien precisando las condiciones que a su juicio la har¨ªan deseable, entre las que figuran la aceptaci¨®n de la estrategia eurocomunista, el apoyo sindical a CC OO y el mantenimiento de las relaciones con el PCE.
A estas condiciones generales, Mikel Camio a?adir¨ªa una referencia al ?rechazo expl¨ªcito del indepentismo, por una parte, y del terrorismo, por otra?.
En una conferencia de Prensa celebrada el mismo domingo por la tarde, Carrillo incidir¨ªa en el tema de la unidad entre fuerzas comunistas y nacionalistas de izquierda, recordando que ya en 1968 -?antes incluso de que Lertxundi ingresara en nuestras filas?- la direcci¨®n del PCE lanz¨® la idea de ?un partido revolucionario que fuera el producto de la fusi¨®n entre los comunistas y los sectores de ETA que romp¨ªan con el terrorismo?. (Carrillo se refer¨ªa, sin duda, a las negociaciones entabladas en 1970 entre el PCE y algunos sectores de ETA, tras la VI Asamblea de esta ¨²ltima, de las que el principal impulsor fue precisamente Manuel Escobedo, miembro entonces del ejecutivo y dirigente destacado hoy del sector Lertxundi).
El camino de la unidad
Carrillo anunci¨® la voluntad de su partido de ?seguir por ese camino de unidad??, y vaticin¨® que los propios dirigentes de Euskadiko Ezkerra ten4j¨¢n que replantear la cuesti¨®n en otros t¨¦rminos ?cuando se den cuenta de que el acuerdo con Lertxundi no es sino un aborto que debilita a la izquierda y dificulta el proceso general hacia la unidad?. Para responder a la acusaci¨®n de haber efectuado ?una cacicada? al disolver el Comit¨¦ Central del EPK, el secretario general del PCE dio su propia versi¨®n del pleito suscitado entre las direcciones de ambos partidos.
En unas declaraciones difundidas ayer, Lertxurldi calific¨® de ?calumniosas? tales palabras, y sos tuvo que ya en junio; hab¨ªa informado de los planes del EPK a la direcci¨®n del PCE, precisando que ?desde el primer momento Carrillo se pronunci¨® en contra, haciendo expl¨ªcito su apoyo al sector minoritario que se opon¨ªa al proyecto?.
Fue Ignacio Latierro, el dirigente guipuzcoano que en el IV Congreso de EPK encabez¨® la oposici¨®n a los planteamientos de Lertxundi, y que tras el X Congreso del PCE se incorpor¨® al secretariado permanente del partido en Madrid, quien anunci¨® p¨²blicamente en el mitin de Sestao la convocatoria del congreso extraordinario que ven¨ªa reclamando el sector al que pertenece. Se celebrar¨¢ el 22 de este mes, y su orden del d¨ªa incluye, junto a la elecci¨®n de la nueva direcci¨®n, la ?confirmaci¨®n de las resoluciones del IV Congreso del EPK y del X Congreso del PCE? y la reforma de los estatutos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.