El sacrist¨¢n, un oficio a extinguir que a¨²n es ¨²til en los templos
El Bolet¨ªn Oficial del Arzobispado de Madrid informa en su ¨²ltimo n¨²mero que los sacristanes de la di¨®cesis pasar¨¢n a cobrar desde el pr¨®ximo mes de enero 32.311 pesetas de sueldo base, 3.200 m¨¢s que ahora. M¨¢s que los curas p¨¢rrocos. Sin embargo, los 62 sacristanes de la capital reivindican otras mejoras sociales, aunque, seg¨²n el titular de la parroquia de San Miguel, "gozan de un tremendo poder y son capaces de derrumbar o elevar a un cura con sus informes y su colaboraci¨®n.
Aquellos personajes de sotana generalmente lamparosa y roquete de puntillas, capaces de sermonear en susurros tres paternosters por minuto, mitad fray Papilla, mitad fray Tal¨¢n, se han convertido, en la etapa posconciliar, en especialistas lit¨²rgicos. El p¨¢rroco de la iglesia de San Miguel, en Chamart¨ªn, Benito P¨¦rez, que durante a?os ha cooperado en la mejora de imagen y de situaci¨®n econ¨®mica de los sacristanes de Madrid, dice que incluso sacristanes hay que dan cursos prematrimoniales.El mester de sacrist¨ªa se ha diversificado en otro sentido distrito al tradicional: apenas hay ya novenas y triduos, los bautizos son colectivos y sin boato, en las bodas apenas se interpreta en nuestros d¨ªas la marcha nupcial, los responsos se han simplificado, las campanas han enmudecido y hasta Quasimodo hubiera tenido que recurrir hoy a la reventa de billetes de metro. Incluso las celebraciones han dejado de figurar en la bolsa de valores estipendiarios contantes y sonantes, y las ofrendas de los fieles, las m¨¢s generosas, van por transferencia bancaria. Don Ben¨ªto dice que se ha buscado, sobre todo, dignificar no s¨®lo la imagen del sacrist¨¢n, sino tambi¨¦n su interior. Por ello se ha luchado contra la propina, como expresi¨®n servil.
El gran poder de los sacristanes
Entre los sacristanes existe una especie de emulaci¨®n, "y hasta se observan entre ellos para conseguir que se erradique definitivamente la costumbre de la propina.El p¨¢rroco de San Miguel considera "tremendo el poder de los sacristanes": "Pueden derrumbar o elevar a un cura con sus informes y su colaboraci¨®n." Los p¨¢rrocos pasan, el sacrist¨¢n queda. De ah¨ª que este auxiliar del p¨¢rroco sea, todav¨ªa hoy, un personaje clave en las relaciones del cura con su feligres¨ªa. El sacrist¨¢n tiene perspectiva de juicio, porque adem¨¢s, por su edad, suele haber conocido a uno o varios predecesores del p¨¢rroco actual y puede establecer comparaciones que a veces trascienden a los fieles. Quien tiene un buen sacrist¨¢n, tiene un tesoro, en fin. Gracias a la dignificaci¨®n de la profesi¨®n, el sacrist¨¢n ha dejado de ser una especie de celestino o de amo de llaves para convertirse en eficaz consejero del sacerdote en materias administrativas.
Cobran m¨¢s que los curas
A partir del pr¨®ximo 1 de enero, los sacristanes cobrar¨¢n en la di¨®cesis de Madrid 32.311 pesetas de sueldo base, cantidad a la que hay que a?adir 2.000 pesetas por la esposa, 1.000 por cada hijo y otras 1.000 por trienio en la profesi¨®n. Si se tiene en cuenta que la edad media de los sacristanes madrile?os es de 55 a?os y que muchos desempe?an este oficio "desde toda la vida", la conclusi¨®n es que la situaci¨®n de estos empleados parroquiales es aceptable. Con todo, Jes¨²s Santos, presidente de la Hermandad de Sacristanes de Madrid, considera insuficiente la nueva subida de sueldos. Se quiere conseguir un reconocimiento pleno de la antig¨¹edad, que s¨®lo se tiene en cuenta con efectos de los ¨²ltimos nueve a?os, a ra¨ªz de la incorporaci¨®n de los sacristanes a la Seguridad Social.Los curas, por su parte, reciben del Estado 15.400 pesetas, que, unidas a otros ingresos complementarlos aportados por la di¨®cesis, totalizan 32.000 pesetas.
Hace unos a?os el gremio se encontraba en situaci¨®n realmente deprimida desde el punto de vista econ¨®mico. En Madrid hab¨ªa unos cien sacristanes -ahora s¨®lo hay 62- y no estaban agrupados. El p¨¢rroco de San Miguel, Benito P¨¦rez Calvo y Jes¨²s Santos lograron crear una Hermandad. Una parte de ellos pretend¨ªa que se les asimilase al escalaf¨®n eclesi¨¢stico a efectos econ¨®micos. Pero, seg¨²n el p¨¢rroco, cuando vieron que los sueldos de los curas quedaban congelados optaron por asociarse e ingresaron mayoritariamente en el Sindicato de Actividades Diversas. Actualmente la situaci¨®n de estos profesionales est¨¢ regulada por el vicario de econom¨ªa de la di¨®cesis. En caso de conflicto, interviene la Comisi¨®n Diocesana. Si hay que despedir a alg¨²n sacrist¨¢n o admitirlo al puesto, la misma Comisi¨®n establece las indemnizaciones o ratifica el nombramiento. Seg¨²n el p¨¢rroco de San Miguel, "las indemnizaciones son generosas y generalmente se les da lo que piden". Por lo dem¨¢s, Benito P¨¦rez consigui¨® con sus gestiones que se les diese el d¨ªa libre a los sacristanes madrile?os, en base a que "la Iglesia deb¨ªa llevar a esta situaci¨®n su reivindicaci¨®n de la justicia social. A pesar de estas garant¨ªas, el padre Benito P¨¦rez considera que el oficio de sacrist¨¢n es un "oficio a extinguir", porque debe ser el pueblo de Dios el que se responsabilice del servicio al templo. En las parroquias nuevas, el conserje, una figura m¨¢s funcional, ha desplazado al sacrist¨¢n.
La di¨®cesis se preocupa de resolver los problemas residuales de los ¨²ltimos del m¨¦ster de sacrist¨ªa, y as¨ª esta misma semana van a entregarse en los terrenos de la parroquia de San Juan Bautista, en la Ciudad Lineal, los pisos construidos para los doce o trece sacristanes sin domicilio adecuado que a¨²n no hab¨ªan resuelto este problema. No ser¨ªa aventurado imaginar que esta sea la primera "colonia de sacristanes" que exista en el mundo.
Una soluci¨®n viable para los sacristanes en trance de extinci¨®n ser¨ªa la de abrirles paso al diaconado. Pero, seg¨²n aventura el padre Benito P¨¦rez, en Madrid no habr¨ªa ni un solo sacrist¨¢n que estuviese dispuesto. Y es que los sacristanes son muy suyos y saben que su funci¨®n es otra.
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