Una historia jalonada de resistencias
Las ocupaciones y las revueltas jalonan los diez siglos de existencia de Polonia, un pa¨ªs convulso, sin fronteras naturales. Los nombres de Kosciuzko, Pilsudski y hoy Walesa son nombres que simbolizan, a los ojos de los polacos, esa tradici¨®n de resistencia.Desde la creaci¨®n, en el siglo X, del reino polaco, la religi¨®n cat¨®lica, a la que se convirti¨® el primer soberano, Miesko I, se convierte en s¨ªmbolo de la unidad de la naci¨®n. La Iglesia ha sido el faro de los polacos en los d¨ªas sombr¨ªos de su historia.
Pero los polacos tomaron las armas en varias ocasiones a lo largo de su historia.
En 1793, cuando el pa¨ªs fue desmembrado por Prusia y Rusia, Tadeusz Kosciuzko, oficial que combati¨® en la guerra de independencia de Estados Unidos, fue nombrado comandante en jefe de las tropas rebeldes.
Polonia desapareci¨® del mapa durante todo el siglo XIX. Los polacos no se sometieron. En 1830 desencadenaron la llamada "insurrecci¨®n de noviembre", que ser¨ªa aplastada tras un a?o de lucha.
Una nueva revuelta se desata en 1846, en la regi¨®n de Cracovia, ocupada por los austr¨ªacos. El movimiento de liberaci¨®n culmin¨® en enero de 1863 y fracas¨® dos a?os despu¨¦s.
En 1905, la revoluci¨®n rusa (democr¨¢tica) alcanza Polonia y aparece un primer movimiento obrero. La ca¨ªda del zar, en 1918, permite la creaci¨®n de una rep¨²blica polaca independiente. Jozef Pilsudski, noble lituano, encabeza un golpe de Estado en mayo de 1926. Muy popular por su guerra contra los bolcheviques en 1920-1921, mantendr¨¢ el poder hasta su muerte, en 1935.
El 1 de septiembre de 1939, la Alemania nazi ataca Polonia. El Gobierno de Wladislaw Sikorski emigra a Francia y a Londres. A pesar de una implacable represi¨®n, naci¨® un amplio movimiento de resistencia. La desesperada insurrecci¨®n de Varsovia en 1944 permanece como el s¨ªmbolo de la determinaci¨®n de la poblaci¨®n polaca.
Tres revueltas obreras en 1956, 1970 y 1976 precedieron al "verano de 1980". En cada ocasi¨®n el detonador fue el aumento de los precios de los productos alimenticios. El 28 de junio de 1956, en Poznan, 48 obreros murieron, seg¨²n fuentes oficiales, en enfrentamientos con las fuerzas del orden.
En diciembre de 1970, en Gdansk, la sangre de los obreros polacos vuelve a derramarse, con un balance oficial de 45 muertos y la ca¨ªda de Gomulka.
Seis a?os m¨¢s tarde, en junio de 1976, los obreros de la f¨¢brica de tractores Ursus exigen de las autoridades que derogen la subida de precios.
El 14 de agosto de 1980, los 17.000 obreros del astillero Lenin, en Gdarisk, inician la huelga en protesta por el despido de un responsable que no pertenece al sindicato oficial. La protesta de julio adquiere un car¨¢cter pol¨ªtico. Se forma un comit¨¦ de huelga dirigido por Lech Walesa, que firmar¨¢ los c¨¦lebres "acuerdos de Gdansk", con el reconocimiento de sindicatos libres.
Diecis¨¦is meses despu¨¦s se decreta el estado de sitio en todo el pa¨ªs. Los militares se enfrentan a una nueva resistencia popular.
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