La banca privada y la compa?¨ªa Telef¨®nica controlan la comisi¨®n redactora del Plan Electr¨®nico Nacional

La gran banca y la Compa?¨ªa Telef¨®nica Nacional de Espa?a parecen haber ganado la batalla por el control de la Comisi¨®n del Plan Electr¨®nico Nacional, que hoy ser¨¢ presentada oficialmente al presidente del Gobierno, Leopoldo Calvo Sotelo. La administraci¨®n, el sector industrial y el mundo acad¨¦mico han quedado relegados a un papel secundario y de acompa?amiento. Hombres vinculados a los bancos de Bilbao e Hispanoamericano, y representantes de Telef¨®nica, han copado seis de los doce puestos que integran la comisi¨®n. Una de las mayores batallas empresariales que han tenido lugar en nuestro pa¨ªs, y que se ha desarrollado en las ¨²ltimas semanas, de espaldas a la opini¨®n p¨²blica, puede haberse decantado.

Al menos dos ministerios, Industria y Energ¨ªa y Transportes y Comunicaciones, la Compa?¨ªa Telef¨®nica Nacional de Espa?a (que sin ser ministerio tiene bastante m¨¢s poder y presupuesto que muchos departamentos), varias multinacionales, la banca y el sector industrial, tanto p¨²blico (INI) como privado, pugnaron en los ¨²ltimos d¨ªas por controlar el mayor n¨²mero posible de puestos en la comisi¨®n redactora del Plan Electr¨®nico Nacional y por desplazar del mismo a sus oponentes. La banca y la Telef¨®nica, cuyos consejos de administraci¨®n se entrecruzan en algunos nombres, pueden haber logrado -a la vista de los datos que se conocen hasta el momento- una considerable ventaja sobre sus competidores.La electr¨®nica, aceptada por casi todos los pol¨ªticos, empresarios y economistas como un sector clave para el futuro industrial de nuestro pa¨ªs, cuenta en la actualidad con un mercado de 350.000 millones de pesetas anuales en Espa?a. Mercado que se encuentra cautivo de tres grandes consumidores (Compa?¨ªa Telef¨®nica, Ministerio de Defensa e Instituto Nacional de la Salud), que absorben compras por unos 200.000 millones.

Una pugna que viene de lejos

La importancia de la electr¨®nica ha llevado a muchos Gobiernos, en los distintos pa¨ªses industriales, a elaborar planes espec¨ªficos para desarrollo de este sector desde hace varias d¨¦cadas. Junto al fuerte valor a?adido que suponen estas producciones sofisticadas, el factor geoestrat¨¦gico de independencia tecnol¨®gica ha pesado en el ¨¢nimo de muchos Gobiernos (el ejemplo m¨¢s notorio fu¨¦ el plan franc¨¦s auspiciado por Charles de Gaulle). En Espa?a, pese a las continuas alusiones gubernamentales a la importancia de la electr¨®nica y de la inform¨¢tica, se han puestos en marcha distintos proyectos y comisiones en los ¨²ltimos a?os, que han quedado siempre colapsados por las pugnas de intereses y que no han llegado a fructificar (Plan Nacional de Inform¨¢tica, Libro Blanco de las Telecomunicaciones, etc¨¦tera).La creaci¨®n de una Direcci¨®n General de Electr¨®nica e Inform¨¢tica en el Ministerio de Industria y Energ¨ªa y la aprobaci¨®n por el Consejo de Ministros del pasado 30 de octubre de la constituci¨®n de una comisi¨®n que se encargara de elaborar un Plan Nacional de la Industria Electr¨®nica hizo pensar a los distintos implicados que esta vez el proyecto s¨ª pod¨ªa ir en serio, y en consecuencia se desat¨® una guerra de intereses e influencias para estar presente en la misma.

No obstante, hasta el ¨²ltimo momento se trat¨® de contraponer a la futura comisi¨®n el viejo proyecto, congelado y nonato, del Libro Blanco. Un borrador del libro, elaborado fundamentalmente por Antonio Barrera de Irimo y personas pr¨®ximas a Telef¨®nica, fue filtrado intencionadamente, los d¨ªas 4 y 5 de diciembre -es decir, tr¨¢s la remodelaci¨®n gubernamental que desplaz¨® a Jos¨¦ Luis ?lvarez del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (del que depende Telef¨®nica) y llev¨® al mismo a Luis Gamir-.

El papel de Antonio Barrera de Irimo, hombre vinculado a la banca y a la Telef¨®nica, es considerado como "muy relevante" en todo este proceso por medios del sector electr¨®nico. Antonio-Barrera en su ¨¦poca de presidente de Telef¨®nica, en los a?os 70 y 71, procedi¨® a la creaci¨®n del holding industrial de la compa?¨ªa: Telettra, Intelsa y Cables y Comunicaciones. Las distintas multinacionales del sector instaladas en Espa?a observan con cierto recelo la posible materializaci¨®n ("se llame de una forma u otra") de un segundo "plan Barrera".

S¨¢nchez Asia¨ªn, presidente de la Comisi¨®n

La Comisi¨®n redactora del Plan Nacional de la Industria Electr¨®nica, que ser¨¢ presentada formalmente hoy al presidente del Gobierno, Leopoldo Calvo Sotelo, y a la opini¨®n p¨²blica, ha variado constantemente los nombres y filiaciones de sus componentes. Personas como Crisanto Plaza, asesor del Ministerio de Econom¨ªa y Comercio, han desaparecido de la lista en las ¨²ltimas semanas, mientras se ha incorporado a la misma incluso a un fil¨®sofo, Juli¨¢n Mar¨ªas, vinculado a Antonio Barrera de Irimo a trav¨¦s de la fundaci¨®n Fundes.La citada comisi¨®n ha quedado integrada por las siguientes personas: Jos¨¦ Angel S¨¢nchez Asia¨ªn, presidente del Banco de Bilbao; Enrique Mas¨®, empresario electr¨®nico y consejero del Banco de Bilbao; Antonio Barrera de Irimo, consejero de Telef¨®nica, del Banco Hispano Americano y de Edica; Diego Mart¨ªnez Boudes, consejero delegado y director general de Telef¨®nica; Miguel Angel Eced, director general de Correos y Telecomunicaciones; Jos¨¦ Vicente Cebri¨¢n, director general de Electr¨®nica e Inform¨¢tica del Ministerio de Industria y Energ¨ªa; Gabriel Ferrat¨¦, rector de la Universidad Polit¨¦cnica de Barcelona; Antonio Rodriguez, director de la di visi¨®n de electr¨®nica del INI; Pedro Higuera, director general de Aniel (la patronal del sector); Vicente Ortega Castro, director de la Escuela de Ingenieros de Telecomunicaciones de Madrid; Alejandro Nieto, presidente del Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas, y el citado Juli¨¢n Mar¨ªas. Es decir, que de forma directa o indirecta Telef¨®nica y la banca controlan un 50% de la comisi¨®n.

En el consejo de administra ci¨®n de la Compa?¨ªa Telef¨®nica Nacional de Espa?a figuran, por otra parte, tres representantes de la gran banca en las tres vicepresidencias de la empresa (Jos¨¦ Mar¨ªa Concejo ?lvarez, secretario del Banco de Bilbao: Pablo Garnica y Mansi, presidente del Banco de Desarrollo Econ¨®mico Espa?ol (del grupo de Banesto); y Luis Usera y L¨®pez Gonzalez, presidente del Banco Hispano Americano y consejero del Banco Urquijo). Y entre los vocales de su consejo de administraci¨®n figuran tambi¨¦n dos consejeros del Banco Hispano Americano (Antonio Barrera de Irimo y Jaime Carvajal y Urquijo); y un hombre ligado a la Confederaci¨®n Espa?ola de Cajas de Ahorro, Manuel Lagares Calvo. En dicho consejo destaca la m¨ªnima presencia de representantes del Ministerio de Industria.

En las ¨²ltimas semanas, al margen de los integrantes rese?ados de la comisi¨®n redactora del Plan El¨¦ctr¨®nico Nacional, se ha venido reuniendo una minicomisi¨®n o permanente que ha proyectado la creaci¨®n de cinco subcomisiones de trabajo: influencia de la electr¨®nica en la sociedad; influencia de la electr¨®nica en la econom¨ªa; tecnolog¨ªa, innovaci¨®n, desarrollo y multinacionales; Administraci¨®n y sector p¨²blico; y sector industrial.

La citada minicomisi¨®n, seg¨²n ha trascendido, ha estado integrada por Ignacio Bay¨®n, ministro de Industria y Energ¨ªa; Enrique Aldama, subsecretario del citado ministerio; Juan Luengo, director general de Tecnolog¨ªa; Jos¨¦ ?ngel S¨¢nchez Asia¨ªn; Antonio Barrera y Gabriel Ferrat¨¦. Esta minicomisi¨®n ha estado barajando ya distintos nombres para las futuras subcomisiones de trabajo.

Fuentes del INI, que albergaban esperanzas de que la electr¨®nica fuera una de las palancas principales de su pol¨ªtica industrial, se han mostrado esc¨¦pticas por el futuro del plan electr¨®nico tr¨¢s conocer la composici¨®n de la comisi¨®n redactora, a menos que sirviera para definir la pol¨ªtica de compras a medio plazo de la Administraci¨®n. M¨¢xime cuando la demanda del sector est¨¢ mayoritariamente en manos del Estado. Fuentes industriales del sector privado, cuya inhibici¨®n ha propiciado en buena medida la actual situaci¨®n, critican sin embargo el papel contradictorio del sector p¨²blico. En este sentido, tr¨¢s lamentar el escaso n¨²mero de puestos otorgado al INI en la comisi¨®n, recuerdan que el Estado -directamente o v¨ªa Patriomonio- percibi¨® en 1981 cerca de 50.000 millones de pesetas de Telef¨®nica.

La ausencia de representantes del Ministerio de Defensa y del Ministerio de Sanidad en la composici¨®n de la comisi¨®n redactora pone en tela de juicio, para las citadas fuentes, la viabilidad y eficacia del Plan Electr¨®nico Nacional. Para los socialistas, en palabras de Luis Solana, la Telef¨®nica una vez m¨¢s se resiste a perder su prepotencia en el sector.