Guardias m¨¦dicas discriminadas
La labor asistencial en cualquier centro hospitalario lleva impl¨ªcita la realizaci¨®n de guardias m¨¦dicas, que en los hospitales generales cumplen dos funciones: la asistencia de los pacientes que presentan una urgencia m¨¦dica extrahospitalaria, que se denominan guardias de puerta, y la de los enfermos ingresados, que son las guardias de plantas. Es norma generalmente aceptada por todos los centros sanitarios del Insalud que estas guardias sean realizadas por los m¨¦dicos de plantilla, con duraci¨®n de veinticuatro horas y remuneradas.En los hospitales monogr¨¢ficos, dedicados a una ¨²nica patolog¨ªa, como el Instituto Nacional de Oncolog¨ªa, para enfermos tumorales; el hospital Victoria Eugenia y el hospital Cantoblanco, para, pacientes respiratorios, etc¨¦tera, no cubren urgencias extrahospitalarias; pero, por tener un n¨²mero de enfermos ingresados que en algunos de ellos alcanza a doscientas camas, deben contar con facultativos de guardia y que, por el hecho de pertenecer a la Administraci¨®n Institucional de la Sanidad Nacional (Aisna), se rigen por un sistema diferente a los del Insalud, como es, por ejemplo, el sistema de compensaci¨®n horaria, que rompe la continuidad asistencial, dada la escasez de plantilla de los diferentes servicios, y en otros casos utilizando turnos fijos de facultativos de tarde y de noche, lo cual puede acarrear, por la falta de in tegraci¨®n y las posibles anomal¨ªas de los cambios de turno, dificultades en la aplicaci¨®n y seguimiento de tratamientos espec¨ªficos. Concretamente, en el Instituto Nacional de Oncolog¨ªa existe un sistema mixto de estos dos procedimientos que pone en evidencia estas alteraciones. Esta explicaci¨®n previa viene en relaci¨®n, a la nota aparecida en EL PA?S de 8 de enero de 1982, donde se informa que el diputado socialista Ciriaco de Vicente hace una pregunta al Gobiemo sobre la existencia de posibles anomal¨ªas en las guardias del servicio de medicina interna de la residencia sanitaria de la Seguridad Social de Avila, y d¨ªas despues, el ministro de Sanidad, a trav¨¦s del doctor Valenciano, subsecretario de dicho departamento, informa que se ha ordenado investigar los hechos en que se basaba el parlamentario socialista, medidas que aprobamos plenamente.
Nos gustar¨ªa que el mismo celo que se traduce en estas notas por parte del partido de la oposici¨®n y del Gobierno en el cumplimiento de la asistencia de los centros del Insalud fuese semejante para los centros de la Aisna, porque creemos que no debe existir una discriminaci¨®n en la atenci¨®n de los pacientes que acudan a unos o a otros centros y, en definitiva, a lo que ya se ha aludido en muchas otras ocasiones: en que no deben existir hospitales de primera (Insalud) y hospitales de segunda (Ainsa).
Mi intenci¨®n no es otra que ahondar en la lucha que llevamos manteniendo durante varios a?os con la Administraci¨®n, y que hasta la actualidad no ha dado ning¨²n fruto./ Jefe del servicio de oncolog¨ªa m¨¦dica. .
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