Austria, verdugo de Espa?a en Argentina

La selecci¨®n austriaca fue el verdugo de Espa?a en el Mundial de Argentina. Su inclusi¨®n en un grupo asequible del Mundial espa?ol, como es el segundo, le proporciona en principio posibilidades para igualar, al menos, su buena actuaci¨®n anterior. Todav¨ªa no tiene resuelto el problema de su seleccionador, al no conceder permiso la Federaci¨®n de la Rep¨²blica Federal de Alemania al t¨¦cnico Ernst Happel, que dirige al Hamburgo. Como otros muchos pa¨ªses, Austria precisar¨¢ contar para el Mundial espa?ol con su particular legi¨®n extranjera, como Pezzey, Prohaska, Jara, Schachner o el mismo Welz.

Austria, modesto y sin alharacas, se present¨® en Argentina como equipo comparsa, sin aspiraciones, al haber quedado encuadrado en un grupo con uno de los favoritos del p¨²blico, Espa?a, y con el siempre temible equipo de Brasil. Sin embargo, bati¨® a Espa?a por dos a uno en el primer encuentro -el primer gol lo hizo el extremo Schachner, a quien marcaba De la Cruz, por decisi¨®n de Kubala-, demostrando as¨ª que es fundamental salir victorioso del primer lance.En Espa?a puede superar tambi¨¦n la primera fase. S¨®lo Alemania, a quien bati¨® en Argentina, parece superior en su grupo. Chile, y por supuesto Argelia, son asequibles para los austriacos. Pero ya se mira al equipo de Austria con recelo. Adem¨¢s, no contar¨¢ con tres jugadores fundamentales en su esquema, ya retirados. Se trata del defensa Sara, y de los centrocampistas Kreuz y Hickesberger, aunque ¨¦ste ¨²ltimo sigue jugando en su club. Ninguno de ellos parece tener sustituto en el equipo nacional.

La legi¨®n extranjera

Es imprescindible para Austria contar con los jugadores que act¨²an en equipos del extranjero: Pezzey, Prohaska, Jara, Schachner y Welz. Sobre todo los dos primeros. Bruno Pezzey, que juega en el equipo alem¨¢n del Eintrach Francfort, es uno de los defensas libres m¨¢s prestigiosos del f¨²tbol continental. Ser¨¢, sin duda, la torre en la que se asiente el juego defensivo e incluso el ofensivo.

Alto, fuerte, y con una envidiable colocaci¨®n en el terreno de juego, Bruno Pezzey estaba destinado a jugar fuera de su pa¨ªs. Se lo disputaron varios conjuntos de talla, principalmente italianos, y acab¨® recalando en un f¨²tbol como el alem¨¢n, donde triunfar no es f¨¢cil. Pezzey lo ha logrado. Ha jugado 52. partidos con la selecci¨®n, y pese a su condici¨®n de zaguero ha marcado seis goles, todos ellos de cabeza, aprovechando sus condiciones atl¨¦ticas (1,88 y 80 kilos). En las dos ¨²ltimas temporadas ha sido nominado el mejor en su puesto, lo que ya supone un indudable aval con hombres como Beckenbauer o Foerster en su misma demarcaci¨®n. Comenz¨® su carrera futbol¨ªstica en el Voralberg. Despu¨¦s pas¨® al Wacker Innsbruck, hasta que fue fichado por su actual equipo alem¨¢n.

Prohaska es otro de los emigrantes futbol¨ªsticos austriacos, por motivos de compensaci¨®n econ¨®mica. Se ha convertido en el cerebro del Inter italiano. De pelo rojo y rizado, Herbert Prohaska, a sus veinticicno a?os, ha jugado ya 55 partidos con la selecci¨®n de su pa¨ªs. Es un hombre t¨¦cnico, algo fr¨ªo, que pisa con dificultad la zona de ataque y marca pocos-goles; sin embargo, entre los ocho conseguidos con la selecci¨®n, alguno result¨® decisivo. Por ejemplo, el que marc¨® a Turqu¨ªa, en Izmir, que dio el pasaporte a Austria para viajar a Argentina.

Hijo de una familia acomodada vienesa, comenz¨® a jugar en el equipo de su barrio, donde despunt¨® por la t¨¦cnica con que mov¨ªa el bal¨®n. Tras pasar por un equipo de tercera, fich¨® por el Austria Viena, donde alcanz¨® un campeonato, en un equipo en el que figuraban tambi¨¦n Schachner y el uruguayo Julio Morales. Prohaska, a quien nadie discute su t¨¦cnica y clase, tiene tambi¨¦n sus defectos. Entre ellos, aparte de su frialdad, el miedo a tirar a gol y la tendencia a realizar un regate de m¨¢s.

El defensa Mirnegg juega en el Como, en Italia; el centrocampista Hintermaier act¨²a en el Nuremberg alem¨¢n; etextremo Schachner tambi¨¦n en Italia, en el Cesena; el media punta Kurt Jara en el Grashoppers suizo, y el ariete Kurt Weiz en el Valencia. Este ¨²ltimo no ha logrado convencer en el equipo espa?ol, pero simple es un jugador aprovechable para Austria.

La selecci¨®n no tiene entrenador oficial. La Federaci¨®n Alemana de f¨²tbol no concede permiso a Ernst Happel, que prepara al Hamburgo, equipo del que es gerente el ex madridista Gunther Netzer. Happel, de 56 a?os, hab¨ªa 3ido contratado por la federaci¨®n austriaca para sustituir a Karl Stozt, cesado despu¨¦s de ser el art¨ªfice de la clasificaci¨®n. Fue despedido despu¨¦s de que un psic¨®logo, contratado por la Federaci¨®n, informara que "Stozt est¨¢ alejado psicol¨®gicamente de sus jugadores".

De arreglarse el problema, por el momento insalvable, ser¨ªa la segunda vez que Happel deja un club para incorporarse a una selecci¨®n nacional.

En 1978 Happel entrenaba al equipo belga del Brujas cuando fue requerido por federativos holandeses para hacerse cargo de su selecci¨®n. Holanda se proclam¨® subcampeona del mundo. Ya lleva quince a?os trabajando fuera de su pa¨ªs. Vien¨¦s de nacimiento, es uno de los t¨¦cnicos m¨¢s cotizados de Europa.