Arco'82: balance cr¨ªtico de un ¨¦xito
La feria de arte contempor¨¢neo (Arco'82), que por primera vez ha reunido en Madrid una selecci¨®n de galer¨ªas de arte espa?olas y extranjeras para exponer las obras m¨¢s representativas del arte actual, se clausura hoy, a las nueve de la noche, en el palacio de exposiciones de lfema (Castellana, 257, Madrid), tras cumplir sus objetivos de unir el comercio y la cultura en una manifestaci¨®n art¨ªstica. El ¨¦xito de visitantes y las ventas realizadas, sobre todo en las galer¨ªas espa?olas, provoc¨® la petici¨®n de algunos galeristas de ampliar las fechas de la feria, aunque se ha preferido cubrir los d¨ªas previstos y preparar, desde ma?ana, la pr¨®xima edici¨®n de Arco'83. La direcci¨®n de la Instituci¨®n Ferial de Madrid ha destacado la aceptaci¨®n de la muestra y por parte de las cien galer¨ªas expositoras se resalta el intercambio de informaci¨®n entre galeristas y artistas.
Una feria de arte contempor¨¢neo, en cuya primera edici¨®n se juntan 117 firmas expositoras, entre las que noventa son de galer¨ªas, constituye un acontecimiento. Por otra parte, el haber dotado a la actividad propiamente ferial de una animaci¨®n cultural, que inclu¨ªa conferencias, coloquios, conciertos y proyecciones, ha contribuido a dar altura e inter¨¦s a la iniciativa, que ha contado adem¨¢s con un dise?o de imagen muy aceptable.En realidad, casi nadie se esperaba el ¨¦xito alcanzado, cuya sorpresa ha llevado a muchos de los participantes a desear que se prolongara su duraci¨®n al menos hasta el pr¨®ximo fin de semana. Dado el progresivo aluvi¨®n de espectadores, no hay que extra?arse de esta pretensi¨®n, pues si la feria se clausura, como est¨¢ anunciado, hoy mismo, una considerable cantidad de p¨²blico quedar¨¢ sin poder asistir a la exhibici¨®n. Ya s¨¦ que no es usual que este tipo de ferias dure m¨¢s de una semana, pero hay que tener en cuenta no s¨®lo el ya citado factor sorpresa, sino la escasa propaganda previa, defecto ¨¦ste que habr¨¢ que corregir en sucesivas ediciones.
Provecho de la experiencia
Como el futuro de Arco parece garantizado, hay que saber sacar provecho de la experiencia vivida. En este sentido, reitero lo que ya apunt¨¦ en mi primera cr¨®nica: son necesarios acuerdos t¨¢cticos con la otra feria de arte internacional -Arteder de Bilbao-, con la que ser¨ªa absurdo competir en vez de colaborar; hay que incrementar la propaganda e informaci¨®n previos; hay que desarrollar m¨¢s y mejor las actividades culturales, organizando, por ejemplo, una muestra de alg¨²n aspecto del arte, cuyo tratamiento sea m¨¢s dif¨ªcil de asumir por las galer¨ªas, y, en fin, hay que cuidar mejor un sinfin de peque?os detalles, entre los que el excesivo calor, inmsoportable para un lugar en el que se est¨¢ Varias horas, la mala se?alizaci¨®n dentro del recinto o el absurdo hilo musical, cuyo ronroneo de horteras arreglos, de m¨²sica barroca o rom¨¢ntica, era una contradicci¨®n hiriente con lo que se estaba viendo en las paredes, que exig¨ªan l¨®gicamente m¨²sica contempor¨¢nea.?Cual ha sido, en todo caso, la clave del ¨¦xito? Seguramente no es correcta ninguna respuesta tajante, que simplifique de manera odiosa una suma de esfuerzos. Haciendo, pues, esta salvedad, quiero, no obstante, destacar el esfuerzo inaudito de las galer¨ªas de nuestro pa¨ªs, que se han lanzado con entusiasmo a una aventura muy costosa y en un momento de gran incertidumbre comercial. En l¨ªneas generales, nuestras galer¨ªas han aportado obras de inter¨¦s, sin pensar an la f¨¢cil rentabilidad inmediata y, adem¨¢s, soy testigo de su generoso esfuerzo por canalizar compradores a sus colegas extranjeros, que l¨®gicamente este primer a?o ten¨ªan m¨¢s dificultades comerciales, dado nuestro tradicional aislamiento del mercado internacional. Por ello, quiero rendir desde aqu¨ª un homenaje global a esta actitud, que, si se mantiene, convertir¨¢ Arco en un lugar de cita obligado, como lo son ya otras ferias europeas.
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