El papel de la Divisi¨®n Acorazada en el golpe

La Divisi¨®n Acorazada Brunete n¨²mero 1, primera unidad de intervenci¨®n inmediata del Ej¨¦rcito espa?ol, estaba destinada a controlar puntos estrat¨¦gicos e instalaciones y servicios de la capital de Espa?a, en cuyos alrededores se encuentran acantonados sus efectivos, compuesto principalmente por m¨¢s de 14.000 hombres y medio millar de veh¨ªculos con cadenas, gran parte de estos ¨²ltimos carros de combate AMX-30. El enlace entre los golpistas y la Divisi¨®n era el comandante de su Estado Mayor, Ricardo Pardo, hombre al que el capit¨¢n general de Valencia, teniente general Milans del Bosch le hab¨ªa puesto en conocimiento de la operaci¨®n, precisamente el d¨ªa anterior al asalto al Congreso.La puesta en marcha de la Acorazada se decidi¨®, camufiada bajo el nombre de una operaci¨®n an¨¢loga a la que se conoce con el nombre de Diana, antes de que Tejero llegara a las Cortes, en el curso de una reuni¨®n de urgencia celebrada en su cuartel general y ante la presencia de su m¨¢ximo responsable, el general Jos¨¦ Juste, a quien precipitadamente hab¨ªa hecho regresar a Madrid su jefe de Estado Mayor, coronel Jos¨¦ Ignacio San Mart¨ªn, cuando se dirig¨ªan por carretera a Zaragoza. El coronel San Mart¨ªn conoc¨ªa, seg¨²n el relato del fiscal, la operaci¨®n, ya que en la madrugada anterior se la hab¨ªa puesto en su conocimiento el propio Pardo.

Juste fue enga?ado por San Mart¨ªn, quien a mitad de viaje, previa comunicaci¨®n telef¨®nica con el cuartel general de la Divisi¨®n, le advirti¨®, sin dar explicaciones, que estaban ocurriendo hechos grav¨ªsimos en la unidad, para lo que era necesario regresar a Madrid. La llamada de tel¨¦fono de San Mart¨ªn a la Divisi¨®n estaba preparada: mediante ella le comunicaron la presencia en el Cuartel General del general Luis Torres Rojas, antecesor de Juste en la Acorazada y en esas fechas gobernador militar de la Coru?a. La pyesencia de ¨¦ste tambi¨¦n estaba prevista en el pl¨¢n Mil¨¢ns-Pardo.

Ya en el Cuartel general, Juste se encuentra a Torres Rojas, quien es invitado, a instancia de San Mart¨ªn, a la reuni¨®n en la que Pardo va a poner en conocimiento de los mandos de la Divisi¨®n todo lo que ya le explicara el d¨ªa anterior Milans del Bosch. Juste pregunta si el capit¨¢n general de Madrid se halla enterado, a lo que se le responde, por parte del coronel San Mart¨ªn y del comandante Pardo, que de ello se ha encargado el propio Milans del Bosch.

Dos llamadas de Juste, una a la Zarzuela y otra al Capit¨¢n general de Madrid, hacen cambiar los planes. Las unidades, con excepci¨®n de una de ellas que se anticipa y ocupa RTVE, son detenidas mediante contraorden y Torres Roja es obligado a regresar a La Coru?a. Sin embargo no se puede detener ni al comandante Pardo ni al capit¨¢n Batista, quienes, conociendo ya la contraorden, actuan por su cuenta, aunque en horas posteriores. El primero acude al Congreso de los diputados y el segundo ocupa la emisora La Voz de Madrid con intenci¨®n de emitir un comunicado.