Se acentuaron los procesos bajistas
La acentuaci¨®n de las bajas y la retirada -con m¨¢s apresuramiento que medida- de las ¨²ltimas partidas compiradoras han definido el clima en el que se han desenvuelto las primeras sesiones burs¨¢tiles de la presente semana en los mercados de valores nacionales.La oferta, pr¨¢cticamente indiscriminada, comenz¨® a hacer acto de presencia en los parqu¨¦s, incluso antes de iniciarse la negociaci¨®n. Evidentemente, a la conclusi¨®n que alcanzaron el pasado lunes los comit¨¦s de inversiones de las instituciones m¨¢s importantes, era que, dada la imposibilidad de la bolsa por iniciar procesos alcistas, las bajas podr¨ªan surgir en cualquier momento, y lo mejor que se pod¨ªa hacer ante esta eventualidad era adelantarse y comenzar a vender con menos miramientos de los que se hab¨ªan empleado hasta entonces.
Si a esto le a?adimos la atenci¨®n con que algunos especialistas est¨¢n mirando los valores de renta rija en los mercados extranjeros, y la rigurosa abstinencia, propia del per¨ªodo de cuaresma en que nos encontramos, y que han asumido los compradores for¨¢neos, es f¨¢cil entender c¨®mo la bolsa descompuso el gesto, y las estrellas del mercado, es decir, los siete grandes bancos llegaron a sumar unos saldos vendedores que se aproximaban al medio mill¨®n de acciones viejas.
Las importantes bajas que experimentaron en el mercado madrile?o Banesto, Popular y Santander, de ocho puntos el primero, nueve los dos ¨²ltimos, se correspondieron con la presencia de unos importantes vol¨²menes de acciones puestos a la venta. Probablemente estas ¨®rdenes vendedoras estuviesen artificial in ente abultadas, pero tambi¨¦n es cierto que el Santander prefiri¨® no indagar esta posibilidad y acept¨® la baja cubriendo un 20% de la oferta.
En este mismo caso se vieron Popular y Banesto, quienes, y en especial este ¨²ltimo tras su reciente pol¨ªtica burs¨¢til, aceptaron con una mansedumbre sorprendente la necesidad de bajar sus cambios, despreciando la posibilidad de que haber tomado el total de la oferta, con lo que hoy mismo hubiese comenzado a invert¨ªrseles el signo de la tendencia, como consecuencia de las recompras que deb¨ªan haberse producido por parte de los supuestos vendedores en descubierto. S¨®lo el Bilbao discrep¨® de la tendencia general, repitiendo en Madrid, y permiti¨¦ndose subir cinco puntos en el mercado bilba¨ªno.
Por su parte, los valores el¨¦ctricos mantuvieron un persistente goteo a la baja, perdiendo algunos valores cotas que se planteaban como irrenunciables.
Los valores de construcci¨®n y los industriales fueron otros de los grandes afectados por las rebajas de marzo, pero el dudoso honor de encabezar la lista de p¨¦rdidas le correspondi¨® al grupo de inversoras, cuyo ¨ªndice particular perdi¨® 3,04 puntos en Madrid.
Este c¨²mulo de circunstancias, en especial la baja de las sociedades de inversi¨®n, y la mansedumbre de los bancos para aceptar los reajustes a la baja, han hecho fruncir el ce?o a m¨¢s de un inversor que ya empieza a situar la posibilidad de que el mercado reaccione, en el mejor de los casos, en los ¨²ltimos d¨ªas de la presente semana. Y eso siempre y cuando se mantenga un fuerte ritmo de bajas similar al actual.
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