Polonia supuso la total paralizaci¨®n de la negociaci¨®n de la CSCE el pasado diciembre
En un ambiente distendido, solamente enturbiado por una discusi¨®n sobre cuestiones ornitol¨®gicas entre Jos¨¦ Pedro P¨¦rez-Llorca y el diputado del Grupo Mixto Fernando Sagaseta, el jefe de la diplomacia espa?ola compareci¨® ayer ante la Comisi¨®n de Asuntos Exteriores del Congreso de los Diputados, para explicar la marcha de los trabajos de la Conferencia sobre la Seguridad y la Cooperaci¨®n en Europa (CSCE) y la aportaci¨®n a los mismos de la delegaci¨®n espa?ola.Durante noventa minutos, P¨¦rez-Llorca explic¨® todo el proceso de la CSCE, desde su inicio en los a?os sesenta, como consecuencia de una propuesta polaca, hasta la firma del acta final de HeIsinki, en de 1975.
La exposici¨®n del titular de Exteriores fue seguida con atenci¨®n por la escasa concurrencia, y la distensi¨®n que reinaba en la sala s¨®lo fue rota brevemente por un agrio intercambio entre P¨¦rez-Llorca y el diputado de la Uni¨®n del Pueblo Canario, Fernando Sagaseta, quien en su intervenci¨®n acus¨® al Gobierno de alinearse con el grupo de los halcones y no con el de las palomas, reiterando su conocida tesis de que todos los males provienen de la carrera armamentista propiciada por el actual Gobierno de Estados Unidos.
P¨¦rez-Llorca recurri¨® a un s¨ªmil ornitol¨®gico para contestar al diputado canario. No s¨®lo hay halcones y palomas, dijo, sino otra clase de aves extra?as en la ornitolog¨ªa, y si tuvi¨¦ramos que escoger un ave para definir nuestra pol¨ªtica en la Conferencia, yo me inclinar¨ªa por la l¨ªnea recta del tordo. Puso de manifiesto el ministro que la carrera armamentista no era s¨®lo una causa, sino una consecuencia de la situaci¨®n internacional.
En cuanto a la neutralidad de Canarias pedida por Sagaseta, P¨¦rez-Llorca esgrimi¨® el argumento de que el archipi¨¦lago constituye una parte integrante del territorio nacional y puso especial hincapi¨¦ en que la defensa y la seguridad de Canarias est¨¢ s¨®lo encomendada, y seguir¨¢ encomendada cuando Espa?a entre en la Alianza Atl¨¢ntica, a fuerzas espa?olas.
Desarrollo de la CSCE
En su intervenci¨®n, el ministro realiz¨® un detallado informe de todas las vicisitudes por las que ha atravesado la reuni¨®n de Madrid de la CSCE desde su inauguraci¨®n, en noviembre de 1980, y reconoci¨® el hecho de que, a pesar de que pr¨¢cticamente a finales del pasado a?o se hab¨ªa llegado a un acuerdo de principio sobre el 80% de las cuestiones a debate en la Conferencia, Ia negociaci¨®n se vi¨® totalmente paralizada en funci¨®n de los acontecimientos de Polonia en diciembre del pasado a?o", y que, a partir de ese momento, "no se hab¨ªa avanzado un ¨¢pice en la redacci¨®n del documento final".
A partir de la adopci¨®n del estado de guerra en Polonia, los sovi¨¦ticos limitan su acci¨®n a pretender dar una sensaci¨®n de desarrollo normal de la conferencia, como si nada hubiera ocurrido
Ante la disparidad de criterios entre los bloques, se decide lo m¨¢s conveniente para todos: imponer un per¨ªodo de reflexi¨®n, un aplazamiento de las sesiones hasta el 9 de noviembre del a?o en curso, con el fin de que para entonces se pueda encontrar una situaci¨®n internacional m¨¢s distendida que haga posible un acuerdo de principio sobre la redacci¨®n del documento final.
Por tanto, la Conferencia se reanudar¨¢ en noviembre pr¨®ximo con un proyecto de documento a discutir, el propiciado por Suiza, conocido por el RM-39.
En el turno de preguntas, y adem¨¢s del intercambio dial¨¦ctico entre Sagaseta y P¨¦rez-Llorca, el portavoz de Coalici¨®n Democr¨¢tica y presidente de Alianza Popular, Manuel Fraga Iribarne, pregunta al ministro, despu¨¦s de afirmar que el proceso de Helsinki s¨®lo favorece a la Uni¨®n Sovi¨¦tica, que con el acta final consigui¨® una consolidaci¨®n de las fronteras europeas para tener las manos libres en otras partes del mundo, cu¨¢l es el futuro de la Conferencia y su utilidad para Espa?a.
P¨¦rez-Llorca contesta al l¨ªder aliancista que comparte su escepticismo sobre este tipo de conferencias y sobre otros tipos de organizaciones internacionales, pero a?ade que cree que la interrupci¨®n del proceso de distensi¨®n ser¨ªa un dato negativo en la actual situaci¨®n internacional. "Creo que el mantenimiento del proceso producir¨¢ mejores resultados que su extinci¨®n", a?ade.
Tras unas intervenciones de los representantes del PNV, Monforte, y del PCE, Antonio Palomares, hizo uso de la palabra el diputado del PSOE, Jos¨¦ Miguel Bueno, quien puso de manifiesto que, a juicio de su grupo parlamentario, Espa?a no hab¨ªa cumplido su papel de pa¨ªs anfitri¨®n, sino que hab¨ªa adoptado "un papel de pa¨ªs alineado con m¨¢s profundidad que otros pa¨ªses tradicionalmente m¨¢s alineados con el atlantismo que Espa?a". En otras palabras, Bueno quiso decir que la delegaci¨®n espa?ola hab¨ªa sido en muchos momentos m¨¢s papista que el Papa.
Termin¨® pidiendo que, para las sesiones del pr¨®ximo oto?o, Espa?a "se desal¨ªnie y que juegue un papel m¨¢s europeo y menos atlantista".
Dialectica gaditana
Con dial¨¦ctica puramente gaditana, humildad franciscana y precisi¨®n jesu¨ªtica, P¨¦rez-Llorca admiti¨® que hab¨ªa una total divergencia pol¨ªtica entre las posiciones del diputado socialista y las que ¨¦l y su partido defend¨ªan en torno al significado del "t¨¦rmino anfitri¨®n de la Conferencia". "El dar hospedaje a una conferencia no implica la asunci¨®n de compromisos pol¨ªticos sustantivos que afecten a la pol¨ªtica exterior de un pa¨ªs". Y, para terminar, puso el ejemplo de pa¨ªses como Estados Unidos, que alberga la sede de la ONU y de Bruselas y Bucarest, que se disputan la pr¨®xima reuni¨®n de la CSCE como capitales cuyos Gobiernos no est¨¢n dispuestos a renunciar a la defensa de lo que consideran principios sustantivos de su pol¨ªtica exterior.
La sesi¨®n termin¨® con la intervenci¨®n en nombre de UCD del jefe de la delegaci¨®n espa?ola en la CSCE, Javier Rup¨¦rez, quien record¨® la frase del ministro suizo de Asuntos Exteriores en el plenario de la Conferencia: "La neutralidad nunca implica silencio cuando la verdad y la libertad est¨¢n en juego".
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