_
_
_
_
Reportaje:

Retrato de un ecologista

Manuel Vicent

Comenc¨¦ a interesarme por la naturaleza vegetal aquel d¨ªa en que mi amigo se tir¨® por la ventana de un sexto piso llev¨¢ndose por delante las sucesivas coladas de la vecindad hasta caer, sano y salvo, de nalgas contra una carbonera del patio interior. Algunas horas despu¨¦s el suicida frustrado, mientras pon¨ªa un tobillo a remojo en un lebrillo, me cont¨® una bella historia. Dijo que en el trayecto de bajada, a la altura de la tercera planta, hab¨ªa tenido un calambre luminoso en la nuca, en cuyo seno hab¨ªa divisado, durante una micra de viaje, el ej¨¦rcito de Atila acampado bajo unos olmos, comiendo habas secas, germen de trigo y pasas de moscatel al pie de los caballos, a las puertas de Roma. Fue un rel¨¢mpago.-Los vi felices, desnudos, con la dentadura resplandeciente, en una extensi¨®n de flores.

-?Era Atila de verdad?

-A tres segundos de la muerte uno no se equivoca. De ni?o le¨ª que los soldados de Atila eran vegetarianos.

La visi¨®n de un suicida en el aire puede ser m¨¢s cient¨ªfica que la de un erudito. Resulta que Atila era un ecologista y bajo sus pies la hierba se convert¨ªa en pienso compuesto para la caballer¨ªa. Ante aquella imagen de guerreros nudistas en un prado de dalias mi amigo sinti¨® un vah¨ªdo de est¨¦tica y entonces cay¨® sentado en la carbonera envuelto en cuerdas de tendedero. Hoy este

sujeto est¨¢ de predicador al frente de un herbolario, piensa montar una granja biol¨®gica, aunque de momento vende galletas de r¨¦gimen, pan alem¨¢n y cualquier clase de hierba salvaje, como cardo santo, corazoncillo, centauro mayor, yemas de pino, tr¨¦bol de agua, ajedrea y valeriana. Tiene un rernedio para cada caso. El c¨¢ncer se va con un choque de cebolla, el infarto se disuelve con zumo de ajo, y as¨ª todo seguido hasta el insomnio, el reuma, el estre?imiento y las quebraduras. Pero su especialidad es la dieta. de Atila: habas secas, germen de trigo y pasas de moscatel en cucuruchos de papel de estraza que regala con un pliego de consejos a cuantos sienten la tentaci¨®n de saltar la tapia desde el sexto piso.

Bigote de remero del Volga, panfleto en el forro...

A este herbolario acuden ahora j¨®venes muy espirituales que hacen tertulia acerca del caldo de amapolas, de las propiedades de la fr¨¢ngula para el ri?¨®n o del inter¨¦s del salvado en el intestino grueso. Son charlas religiosas en las que la m¨ªstica se mezcla con la fisiolog¨ªa, Dios y la funci¨®n del h¨ªgado, el amor y la grasa, la belleza en s¨ª misma y el m¨¦todo para defecar que usan los bramanes de la India. El herbolario del ex suicida es como una sacrist¨ªa con olor a forraje, donde se expende una santidad huertana en bolsas, a precios casi prohibitivos. Este amigo no ha sido siempre as¨ª.

Lo conoc¨ª hacia la mitad de los a?os sesenta, cuando gastaba un bigote de remero del Volga que era sobradamente familiar para la Brigada Social, y entonces siempre andaba con un panfleto en el forro de la chaqueta, una pastoral censurada, un manifiesto de los metal¨²rgicos o un mazo de octavillas con el anuncio de la huelga. En la universidad era de los que arrojaban tazas de retrete desde el aula de Qu¨ªmica Org¨¢nica contra los cascos de la polic¨ªa. En aquel tiempo los turistas comenzaban a mear dentro del Mediterr¨¢neo, vert¨ªan ya los posos de sangr¨ªa en la arena y los excrementos del neocapitalismo estaban diezmando playas, r¨ªos, vaguadas y suaves alcores. Pero ¨¦l no reparaba en eso. M¨¢s bien viv¨ªa pendiente de la hora exacta en que se iba a producir el salto en la calle, el encierro en una iglesia o la sentada en clase. Te llamaba por tel¨¦fono para darte la consigna siempre en el instante preciso.

-Esta tarde, a las siete en punto, a la salida del metro de Noviciado.

-Vale.

-No te fies de los barbudos que llevan Triunfo debajo del brazo. Son polic¨ªas.

Conservo todav¨ªa su imagen iluminada por los gases lacrim¨®genos. El tipo se bat¨ªa bien, ten¨ªa reflejos y en el ¨²ltimo momento lograba escabullirse del fregado de vergas cuando la caballer¨ªa rusticana cargaba contra la manifestaci¨®n. Pero un d¨ªa fue cazado en la alcantarilla junto con diecinueve conspiradores m¨¢s y se vio con los huesos en los s¨®tanos de la Direcci¨®n General de Seguridad, donde permaneci¨® tres d¨ªas sin cantar, aunque le ense?¨® a silbar La Internacional en la celda a un proxeneta. Eso era exactamente entonces: un proselitista del partido, que presum¨ªa de que su hijo de veinte meses ya sab¨ªa levantar el pu?ito sonrosado.

-Cuchi, cuchi, ?y t¨² qu¨¦ ser¨¢s de mayor?

-A fu fa, ba ba.

-?Lo hab¨¦is o¨ªdo? Ha dicho rojo. Ha dicho rojo.

Mientras tanto, las ballenas eran pescadas a ca?onazos, a las focas se las degollaba con garfios, los pol¨ªticos del sistema abat¨ªan ciervos junto al pesebre, y en las cacer¨ªas de negocios se disparaba por igual contra todo lo que se moviera: perdices, conejos y ampliaciones de capital. El Mediterr¨¢neo comenzaba a dar se?ales de ser un mar muerto. Pieles de pl¨¢stico flotaban en el caldo f¨²nebre y una luz de harina lo pon¨ªa todo en evidencia: envases con residuos de pollo, peces con la tripa llena de petr¨®leo, espumosos orines que fueron refrescos multinacionales, preservativos inflados como globos de cumplea?os, diarreas de veraneante endurecidas por el salitre; todo partido por el rugido de las canoas.

La silla de enea, la rueca de bisabuela

Mi amigo com¨ªa jam¨®n, salchichas con coca-cola y le¨ªa Mundo Obrero amenizado con copazos de cazalla de noventa grados. Odiaba m¨¢s que nada a los hippies. Sencillamente, no era l¨ªcito que los obreros se jugaran la piel luchando contra la dictadura de Franco al tiempo que unos se?oritos llenos de piojos se dedicaban a tocar el caramillo bajo las higueras, vestidos de apache, con barbita de Coraz¨®n de Jes¨²s y cola de caballo. Si un d¨ªa llegara la revoluci¨®n, esa chusma tambi¨¦n ir¨ªa al caldero.

Cuando la vida de Franco a¨²n no hab¨ªa entrado en agujas, la moda de los intelectuales m¨¢s finos consist¨ªa en sentarse en sillas de enea y en, adornar el recibidor con una rueca de bisabuela, con una plancha de carb¨®n llena de cardos secos y con un molinillo de caf¨¦. Esos eran entonces los detalles ecol¨®gicos, que los audaces llevaban al extremo de alquilar una casa de pueblo a cien kil¨®metros de la Puerta del Sol para poner el fondo de Seix Barral en el establo del pollino. All¨ª hac¨ªan intimidad con un viejo sentencioso que ten¨ªa la espalda contra una solana rom¨¢nica y fumaba calique?o bajo la boina. La pared encalada comenzaba a llevarse mucho y los intelectuales del tiempo le encargaban a un alba?il represaliado por el sindicato vertical una biblioteca de mamposter¨ªa donde se pod¨ªa ver el Anti-D¨¹hring, de Engels, y la Est¨¦tica, de Luk¨¢cs, separados por un porr¨®n de vidrio.

-?Quieres un whisky?

-Gracias.

-S¨ªrvete t¨² mismo. La botella est¨¢ en el sagrario. Tira del angelito.

-Es curioso.

-Este sagrario se lo compr¨¦ a un anticuario de Ar¨¦valo. Quince mil pesetas. Es del siglo XVII. El hielo lo tienes ah¨ª.

-?D¨®nde?

-En ese yelmo de tercio de Flandes. Es del siglo XVI.

El no era as¨ª. Mi amigo trabajaba de qu¨ªmico en unos laboratorios y los domingos regalaba medicinas en aquel hotelito de la sierra donde acud¨ªa a pasar el fin de semana una pandilla de progresistas dentro de las normas de consumo peque?o burgu¨¦s, en los estertores del franquismo. Era el reinado del Simca. Y los papeles de crocanti, las pieles de pl¨¢tano y los huesos de chuleta

Pasa a la p¨¢gina 12

Retrato de un ecologista

Viene de la p¨¢gina 11

a¨²n se pod¨ªan dejar sobre la hierba despu¨¦s del almuerzo campestre sin que nadie te recordara la consigna de televisi¨®n, esa bobada de que el campo es de todos.

Aquellos progresistas de pantal¨®n de pana los domingos de Miraflores no recog¨ªan los desperdicios de la sobremesa, pero lavaban el Simca a conciencia con agua pur¨ªsima de monta?a. El coche era el t¨®tem. All¨ª se hablaba mucho de cilindros y de obreros torturados, de platinos, delcos, carburadores y de registros polic¨ªacos a domicilio. Y de paso se iniciaba t¨ªmidamente el intercambio de parejas. En el grupo hab¨ªa socialistas de v¨ªa chilerta, trotskistas er¨®ticos, eurocomunistas salidos, socialdem¨®cratas ligones, estalinistas mis¨®ginos y otros que cre¨ªan que la reconciliaci¨®n nacional consist¨ªa en meter mano. Pero mi amigo era un rojo puro, no color campari con quisquillas, sino de una tonalidad sangre de toro. Se molestaba mucho cuando ve¨ªa a un camarada d¨¢ndose el pico con la legitima de otro al comp¨¢s de una cosa de Adamo.

Escenas de celo ib¨¦rico

Aquel intercambio de parejas no era nada ecologista. Era m¨¢s bien una moda industrial, importada de o¨ªdas desde California, algo que sal¨ªa en las revistas serias en ingl¨¦s con una connotaci¨®n sociol¨®gica. Pero aqu¨ª suced¨ªa que entre ellos se enamoriscaban, se sent¨ªan modernos y a la vez desarrollaban escenas de celo ib¨¦rico, y al final la fea y el t¨ªo plasta se quedaban sin catar nada, como siempre.

-Oye, no se¨¢is as¨ª. Dadle al menos un beso a la dentona.

-Qu¨¦ horror.

-La chica est¨¢ liberada. No escurr¨¢is e bulto.

-A ¨¦sa, que se la beneficie un pez.

En aquellas sesiones er¨®ticas se ve¨ªa en un rinc¨®n a un marido desahuciado, muy manazas para el amor, leyendo un libro sobre las cruzadas, ya la casada dentona bostezando en otro sof¨¢, mientras los dem¨¢s coqueteaban con la mujer de otro y los m¨¢s rudos comet¨ªan medio adulterio detr¨¢s de una cortina. Entonces llegaba mi amigo con el panfleto caliente, recompon¨ªa aquella frivolidad californiana y se empe?aba en hablar de la realidad objetiva.

-Ma?ana hay encierro en San Gin¨¦s.

-?De qu¨¦ se trata ahora?

-De los represaliados de la Perkins.

-?Hay que llevar merienda?

-Nada. C¨®ctel molotov y misal.

All¨ª mismo el camarada comenzaba a pedir limosna para los presos pol¨ªticos. El objetivo era llevarle una ensaimada a Marceli no Camacho a la c¨¢rcel de Carabanchel unos turrones a S¨¢nchez Montero y sobrasadas para la tropa. As¨ª estaban las cosas. Cuando el general Franco hizo la primera flebitis y mi amigo escond¨ªa a clandestinos del exilio franc¨¦s en las buhardillas, una nueva juventud se hab¨ªa instalado en las plazoletas. Aparecieron los primeros pasotas, los primeros profetas orientales, se estrenaban otras vibraciones, llegaban las tribus adolecentes con la onda ecologista Ven¨ªan con macutos de ap¨¢trida, con chalecos de vaquero, tocando una flauta de indio peruano. Ellas tra¨ªan polvo de estrellas en los p¨®mulos, batas de seda transparente y medias de lana con franjas de colorines. Compraban virutas de incienso en el Rastro, se perfumaban con pachul¨ª y cantaban baladas acerca de la bondad universal. Las f¨¢bricas vert¨ªan residuos venenosos en r¨ªos trucheros, las centrales at¨®micas elevaban los mazacotes sobre el paisaje con una sombra de cemento, donde la ovejita Lucera del t¨ªo Felipe com¨ªa tomillo radiactivo. Pero los obreros estaban m¨¢s contaminados a¨²n por el cabreo y a la revoluci¨®n se la ve¨ªa asomada a una ventana de Vallecas. Ma?ana hab¨ªa jornada de lucha. Mi amigo se pon¨ªa una zamarra acolchada y acud¨ªa a la obra.

As¨ª fue c¨®mo muri¨® Franco. En el coraz¨®n de la nueva juventud hab¨ªa valles h¨²medos, r¨ªos navegables, llanuras de esmeralda donde pastaban vacas rubias de ojos verdes. La espiritualidad m¨¢s avanzada consist¨ªa en sentir la animaci¨®n de los insectos, ensimismarse con las lagartijas, contemplar las mariposas destelladas de lumbre, las moscas hermanas volando, oler el espliego abrasado por el primer sol. Pero en Atocha hab¨ªa refriega con la polic¨ªa. Era el ensayo general con todo. Y mi amigo estaba all¨ª, bajo los botes de humo. La punta de la est¨¦tica se alimentaba con miel de romero. Por las calles de la ciudad se ve¨ªan ya los primeros gimnastas con ch¨¢ndal, que corr¨ªan, cosa extra?a, sin que les persiguiera nadie; los artistas cotizados se hab¨ªan refugiado en un molino y los evangelistas m¨¢s pobres com¨ªan higos chumbos en taparrabos, trepaban como ardillas hasta la ¨²ltima almendra del almendro y dorm¨ªan en chozos de pastor o en alquer¨ªas derruidas con aljibe, le¨ªan a Krisnamurti a la luz de un carburo que abrasaba pesta?as y mosquitos.

Y as¨ª pas¨® lo que pas¨®. El rinoceronte del franquismo, malherido, emprendi¨® la huida hacia adelante y se refugi¨® en la espesura de la democracia. Mi amigo qued¨® desmarcado. No as¨ª sus camaradas de c¨¦lula ni los componentes de aquella feliz camada progresista de Miraflores. Unos han sido concejales comunistas, otros han salido diputados socialistas, unos son directores generales centristas, otros est¨¢n de catedr¨¢ticos en la universidad, o ejercen la medicina con ¨¦xito, o rigen un bufete famoso, o se sientan en el despacho principal de una empresa. En cambio, a aquel luchador rojo un expediente de crisis lo dej¨® sulfatado a la puerta del laboratorio farmac¨¦utico. De pronto, se vio en la calle, y desde la acera asisti¨® a las primeras festividades de la libertad, con un gozo ¨ªntimo, pero con la mosca en la oreja. Y llegado el momento vot¨®.

La felicidad estaba abajo

Un d¨ªa de democracia lo encontr¨¦ en una esquina, pr¨¢cticamente ya sin culo, arrastrando los mocasines, con un malet¨ªn de muestras en la mano. El tipo era corredor de productos farmac¨¦uticos y su gracia consist¨ªa en visitar cada jornada cuatro sanatorios y veinte consultas de una tacada, para ofrecer p¨ªldoras, grageas, polvos, jarabes, a comisi¨®n sobre pedido. Me habl¨® del desencanto, del consenso, de una jaqueca, de que no ve¨ªa a ninguno de los viejos camaradas A¨²n tuvo humor para burlarse de un sujeto que pas¨® por delante, en calzones, jadeando, uno de esos atletas de asfalto. Luego desapareci¨® con el muestrario, hasta que, una tarde, son¨® el tel¨¦fono:

-Que Anto?ito se ha tirado desde un sexto piso.

-?Se ha matado?

-No del todo.

Fui a casa a verle. Me lo encontr¨¦ sentado en una mecedora con un tobillo a remojo dentro de un lebrillo con agua salada. Y en seguida me hizo part¨ªcipe de su conversi¨®n. Se hab¨ªa asomado a la ventana y, de pronto, el patio interior le pareci¨® sumamente atractivo. Una especie de voz aqu¨ª, en el cogote, le dijo que la felicidad estaba abajo. No lo pens¨® m¨¢s. Dej¨® el cigarrillo a medias en el alf¨¦izar y se arroj¨® en plancha. Saulo tuvo que caerse del caballo. El necesit¨® la altura de una sexta planta. Y en el trayecto de bajada tuvo la visi¨®n.

-Te juro que vi a Atila desnudo.

-?C¨®mo era?

-Rubio. Estaba comiendo habas secas, germen de trigo y pasas de moscatel en un prado de flores. Me sonri¨® con una dentadura muy blanca.

-Has tenido suerte.

-Me han salvado las cuerdas del tendedero. A mitad de camino estaba arrepentido. Pens¨¦ que, si me libraba de la muerte, me har¨ªa vegetariano, ecologista, como Atila.

Nuevo apostolado

Anto?ito cumpli¨® la promesa, y despu¨¦s de cuarenta d¨ªas de meditaci¨®n ventral con el tobillo azul, se dedic¨® al nuevo apostolado. Se compr¨® un ch¨¢ndal y comenz¨® a correr entre la cementera de Azca a la hora m¨¢s procaz del d¨ªa. Dej¨® de fumar, alquil¨® una bicicleta y sigui¨® una novena de purificaci¨®n en el parque del Retiro. La qu¨ªmica, la medicina cient¨ªfica, la carne y la pol¨ªtica le. arquean el diafragma. Cogi¨® el traspaso de un herbolario y all¨ª ha instaurado la nueva religi¨®n. Ya no sabe qui¨¦n es Carrillo.

Se levanta a las nueve de la ma?ana, y antes que nada, despierta el alma con una sesi¨®n de yoga t¨¢ntrico. Se pone cara a la ventana de su antiguo suicidio y aspira con un m¨¦todo del Tibet el prana matinal que Dios le env¨ªa por el aire del patio interior. Despu¨¦s toma una infusi¨®n de hierbas salvajes, bardana, hiedra trepadora, zarzaparrilla y salvia. Se pone el ch¨¢ndal y sale despepitado, dando cuatro kil¨®metros de zancadas hasta la tienda. All¨ª come galletas de trigo duro con granos de an¨ªs y predica la armon¨ªa pante¨ªsta a los clientes. Ense?a a defecar en cuclilIas, seg¨²n las reglas de los bramanes; da consejos de semillas, recomienda que la gente se emparede con arcilla ante cualquier dolor y ¨¦l mismo se ofrece de cobayo para cualquier nuevo potingue. La espiritualidad le ha dejado la cara de bambi feliz a los cuarenta a?os. Por la tarde pasea en bicicleta por el parque, y a cada hora de reloj se detiene, abre el zurr¨®n, pega un boca do de frutos secos y respira profundamente, despu¨¦s de masticar cincuenta veces justas. Ni una m¨¢s ni una menos.

Pero ¨¦l sue?a con montar una granja biol¨®gica, donde todo sea natural o hecho a mano, para compartir con Atila una silla de enea, el zumbido solar de las moscas, el perfume silvestre que te lija el fondo de la nariz y una buena sopa de amapolas. Habr¨¢ que ver a Atila, recostado contra el horizonte, comiendo un filete de espinacas.

Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo

?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?

Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.

?Por qu¨¦ est¨¢s viendo esto?

Flecha

Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.

?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.

En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.

Sobre la firma

Manuel Vicent
Escritor y periodista. Ganador, entre otros, de los premios de novela Alfaguara y Nadal. Como periodista empez¨® en el diario 'Madrid' y las revistas 'Hermano Lobo' y 'Triunfo'. Se incorpor¨® a EL PA?S como cronista parlamentario. Desde entonces ha publicado art¨ªculos, cr¨®nicas de viajes, reportajes y daguerrotipos de diferentes personalidades.

Archivado En

Recomendaciones EL PA?S
Recomendaciones EL PA?S
Recomendaciones EL PA?S
_
_
universo-virtual.com
buytrendz.net
thisforall.net
benchpressgains.com
qthzb.com
mindhunter9.com
dwjqp1.com
secure-signup.net
ahaayy.com
soxtry.com
tressesindia.com
puresybian.com
krpano-chs.com
cre8workshop.com
hdkino.org
peixun021.com
qz786.com
utahperformingartscenter.org
maw-pr.com
zaaksen.com
ypxsptbfd7.com
worldqrmconference.com
shangyuwh.com
eejssdfsdfdfjsd.com
playminecraftfreeonline.com
trekvietnamtour.com
your-business-articles.com
essaywritingservice10.com
hindusamaaj.com
joggingvideo.com
wandercoups.com
onlinenewsofindia.com
worldgraphic-team.com
bnsrz.com
wormblaster.net
tongchengchuyange0004.com
internetknowing.com
breachurch.com
peachesnginburlesque.com
dataarchitectoo.com
clientfunnelformula.com
30pps.com
cherylroll.com
ks2252.com
webmanicura.com
osostore.com
softsmob.com
sofietsshotel.com
facetorch.com
nylawyerreview.com
apapromotions.com
shareparelli.com
goeaglepointe.com
thegreenmanpubphuket.com
karotorossian.com
publicsensor.com
taiwandefence.com
epcsur.com
odskc.com
inzziln.info
leaiiln.info
cq-oa.com
dqtianshun.com
southstills.com
tvtv98.com
thewellington-hotel.com
bccaipiao.com
colectoresindustrialesgs.com
shenanddcg.com
capriartfilmfestival.com
replicabreitlingsale.com
thaiamarinnewtoncorner.com
gkmcww.com
mbnkbj.com
andrewbrennandesign.com
cod54.com
luobinzhang.com
bartoysdirect.com
taquerialoscompadresdc.com
aaoodln.info
amcckln.info
drvrnln.info
dwabmln.info
fcsjoln.info
hlonxln.info
kcmeiln.info
kplrrln.info
fatcatoons.com
91guoys.com
signupforfreehosting.com
faithfirst.net
zjyc28.com
tongchengjinyeyouyue0004.com
nhuan6.com
oldgardensflowers.com
lightupthefloor.com
bahamamamas-stjohns.com
ly2818.com
905onthebay.com
fonemenu.com
notanothermovie.com
ukrainehighclassescort.com
meincmagazine.com
av-5858.com
yallerdawg.com
donkeythemovie.com
corporatehospitalitygroup.com
boboyy88.com
miteinander-lernen.com
dannayconsulting.com
officialtomsshoesoutletstore.com
forsale-amoxil-amoxicillin.net
generictadalafil-canada.net
guitarlessonseastlondon.com
lesliesrestaurants.com
mattyno9.com
nri-homeloans.com
rtgvisas-qatar.com
salbutamolventolinonline.net
sportsinjuries.info
topsedu.xyz
xmxm7.com
x332.xyz
sportstrainingblog.com
autopartspares.com
readguy.net
soniasegreto.com
bobbygdavis.com
wedsna.com
rgkntk.com
bkkmarketplace.com
zxqcwx.com
breakupprogram.com
boxcardc.com
unblockyoutubeindonesia.com
fabulousbookmark.com
beat-the.com
guatemala-sailfishing-vacations-charters.com
magie-marketing.com
kingstonliteracy.com
guitaraffinity.com
eurelookinggoodapparel.com
howtolosecheekfat.net
marioncma.org
oliviadavismusic.com
shantelcampbellrealestate.com
shopleborn13.com
topindiafree.com
v-visitors.net
qazwsxedcokmijn.com
parabis.net
terriesandelin.com
luxuryhomme.com
studyexpanse.com
ronoom.com
djjky.com
053hh.com
originbluei.com
baucishotel.com
33kkn.com
intrinsiqresearch.com
mariaescort-kiev.com
mymaguk.com
sponsored4u.com
crimsonclass.com
bataillenavale.com
searchtile.com
ze-stribrnych-struh.com
zenithalhype.com
modalpkv.com
bouisset-lafforgue.com
useupload.com
37r.net
autoankauf-muenster.com
bantinbongda.net
bilgius.com
brabustermagazine.com
indigrow.org
miicrosofts.net
mysmiletravel.com
selinasims.com
spellcubesapp.com
usa-faction.com
snn01.com
hope-kelley.com
bancodeprofissionais.com
zjccp99.com
liturgycreator.com
weedsmj.com
majorelenco.com
colcollect.com
androidnews-jp.com
hypoallergenicdogsnames.com
dailyupdatez.com
foodphotographyreviews.com
cricutcom-setup.com
chprowebdesign.com
katyrealty-kanepa.com
tasramar.com
bilgipinari.org
four-am.com
indiarepublicday.com
inquick-enbooks.com
iracmpi.com
kakaschoenen.com
lsm99flash.com
nana1255.com
ngen-niagara.com
technwzs.com
virtualonlinecasino1345.com
wallpapertop.net
nova-click.com
abeautifulcrazylife.com
diggmobile.com
denochemexicana.com
eventhalfkg.com
medcon-taiwan.com
life-himawari.com
myriamshomes.com
nightmarevue.com
allstarsru.com
bestofthebuckeyestate.com
bestofthefirststate.com
bestwireless7.com
declarationintermittent.com
findhereall.com
jingyou888.com
lsm99deal.com
lsm99galaxy.com
moozatech.com
nuagh.com
patliyo.com
philomenamagikz.net
rckouba.net
saturnunipessoallda.com
tallahasseefrolics.com
thematurehardcore.net
totalenvironment-inthatquietearth.com
velislavakaymakanova.com
vermontenergetic.com
sizam-design.com
kakakpintar.com
begorgeouslady.com
1800birks4u.com
2wheelstogo.com
6strip4you.com
bigdata-world.net
emailandco.net
gacapal.com
jharpost.com
krishnaastro.com
lsm99credit.com
mascalzonicampani.com
sitemapxml.org
thecityslums.net
topagh.com
flairnetwebdesign.com
bangkaeair.com
beneventocoupon.com
noternet.org
oqtive.com
smilebrightrx.com
decollage-etiquette.com
1millionbestdownloads.com
7658.info
bidbass.com
devlopworldtech.com
digitalmarketingrajkot.com
fluginfo.net
naqlafshk.com
passion-decouverte.com
playsirius.com
spacceleratorintl.com
stikyballs.com
top10way.com
yokidsyogurt.com
zszyhl.com
16firthcrescent.com
abogadolaboralistamd.com
apk2wap.com
aromacremeria.com
banparacard.com
bosmanraws.com
businessproviderblog.com
caltonosa.com
calvaryrevivalchurch.org
chastenedsoulwithabrokenheart.com
cheminotsgardcevennes.com
cooksspot.com
cqxzpt.com
deesywig.com
deltacartoonmaps.com
despixelsetdeshommes.com
duocoracaobrasileiro.com
fareshopbd.com
goodpainspills.com
kobisitecdn.com
makaigoods.com
mgs1454.com
piccadillyresidences.com
radiolaondafresca.com
rubendorf.com
searchengineimprov.com
sellmyhrvahome.com
shugahouseessentials.com
sonihullquad.com
subtractkilos.com
valeriekelmansky.com
vipasdigitalmarketing.com
voolivrerj.com
zeelonggroup.com
1015southrockhill.com
10x10b.com
111-online-casinos.com
191cb.com
3665arpentunitd.com
aitesonics.com
bag-shokunin.com
brightotech.com
communication-digitale-services.com
covoakland.org
dariaprimapack.com
freefortniteaccountss.com
gatebizglobal.com
global1entertainmentnews.com
greatytene.com
hiroshiwakita.com
iktodaypk.com
jahatsakong.com
meadowbrookgolfgroup.com
newsbharati.net
platinumstudiosdesign.com
slotxogamesplay.com
strikestaruk.com
trucosdefortnite.com
ufabetrune.com
weddedtowhitmore.com
12940brycecanyonunitb.com
1311dietrichoaks.com
2monarchtraceunit303.com
601legendhill.com
850elaine.com
adieusolasomade.com
andora-ke.com
bestslotxogames.com
cannagomcallen.com
endlesslyhot.com
iestpjva.com
ouqprint.com
pwmaplefest.com
qtylmr.com
rb88betting.com
buscadogues.com
1007macfm.com
born-wild.com
growthinvests.com
promocode-casino.com
proyectogalgoargentina.com
wbthompson-art.com
whitemountainwheels.com
7thavehvl.com
developmethis.com
funkydogbowties.com
travelodgegrandjunction.com
gao-town.com
globalmarketsuite.com
blogshippo.com
hdbka.com
proboards67.com
outletonline-michaelkors.com
kalkis-research.com
thuthuatit.net
buckcash.com
hollistercanada.com
docterror.com
asadart.com
vmayke.org
erwincomputers.com
dirimart.org
okkii.com
loteriasdecehegin.com
mountanalog.com
healingtaobritain.com
ttxmonitor.com
bamthemes.com
nwordpress.com
11bolabonanza.com
avgo.top