El seguro mejora su estructura y rentabilidad
Los ingresos del seguro por primas ascendieron el a?o pasado a 312.860 millones de pesetas, excluidos los accidentes de trabajo, que durante el ejercicio anterior rondaron los 80.000 millones. A juzgar por estas cifras, procedentes de la patronal del sector -UNESPA-, se ha registrado un incremento del 16,6%, inferior al de a?os inmediatos en t¨¦rminos nominales y reales. M¨¢s novedosa parece ser, sin embargo, la t¨¦nue mejora de estructura, que puede haber permitido un balance superior en rentabilidad al de 1980.
El ramo de asistencia sanitaria ha pasado a ser el segundo en importancia, con 37.860 millones de pesetas y un crecimiento del 37%. Desplaza as¨ª al de vida, aunque todav¨ªa est¨¢ lejos del de autom¨®viles. La mayor o menor presencia de este ¨²ltimo en las carteras de las compa?¨ªas y m¨²tuas ha sido ¨²ltimamente un indicador de la menor o mayor salud de la empresa y ha perjudicado mucho, seg¨²n diversos observadores, a la imagen del conjunto del sector.El descenso a tercer puesto del ramo de vida, por el contrario, contrasta con los objetivos del sector. Su aumento del 12% le sit¨²a en un crecimiento real negativo. Mantiene as¨ª la p¨¦rdida de representaci¨®n en el total de las carteras, que era del 12,59% en 1977%, seg¨²n datos de la Direcci¨®n General de Seguros, y ahora puede estar en el 11 %.
No obstante, seg¨²n medios del sector, el an¨¢lisis de la estructura de los ramos est¨¢ distorsionado por la evoluci¨®n de los precios. Por ejemplo, el obligatorio de autom¨®viles creci¨® en 1980 algo m¨¢s del 70% y ahora el 32,41 %. Pero ello se atribuye exclusivamente a la fuerte subida de precios de mediados de 1980 como consecuencia de la elevaci¨®n de coberturas, cuya repercusi¨®n ha continu¨® a principios de 1981.
Sin este hinchamiento, es probable, seg¨²n los medios consultados, que la estructura se haya ajustado algo a los objetivos de rentabilidad. De acuerdo con los ¨²ltimos datos elaborados por la Direcci¨®n General de Seguros (su avance 1980), este ejercicio fue el primero en aflorar beneficios significativos, despu¨¦s de anteriores balances globales con p¨¦rdidas o equilibrio. Se recuerda que la crisis burs¨¢til e inmobiliaria, donde el seguro invert¨ªa principalmente sus recursos, acentu¨® los problemas del sector, procedentes de la elevaci¨®n de costes y de la amplia proporci¨®n de los gastos de gesti¨®n.
P¨¦rdidas y beneficios
Los beneficios ascendieron el a?o pasado a 7.200 millones de pesetas (la suma de capitales suscritos era 24.484 millones) y las p¨¦rdidas a 2.000 millones. Al compensar unos con otras, las 467 s,ociedades an¨®nimas existentes tuvieron un saldo positivo de 3.200 millones de pesetas, en tanto que las 136 mutualidades arrojaron 2.500 millones de pesetas, y las 38 delegaciones extranjeras retinieron un resultado negativo de casi 600 millones de pesetas. El sector lo integran otras 12 reaseguradoras.Ahora se espera que 1981 haya sido en general algo mejor, aunque como resultado de mayores beneficios en buena parte de las enipresas grandes y p¨¦rdidas superiores en las peque?as. Los rendimientos financieros han sido superiores y las tarifas, con algunas excepciones, se han ce?ido mejor a los costes.
De todas formas, las eventuales mejoras son consideradas insuficientes por los dict¨¢menes t¨¦cnicos. El ¨²ltimo conocido corresponde a Jes¨²s Serra Santanians, presidente de Investigaci¨®n Cooperativa entre Entidades Aseguradoras (ICEA), quien ha recordado que poco o nada se ha avanzado en la superaci¨®n de los problemas detectados a mediados de los setenta en el Plan Estrat¨¦gico del Seguro Espa?ol: minifundismo, seguro del autom¨®vil, costes elevados, baja productividad y escaso desarrollo del seguro de vida.
Mientras el proyecto de Ley para el Fomento del Seguro Privado lleva ya un a?o casi aparca o en el Congreso de los Diputados, los varios cientos de compa?¨ªas que se sienten condenadas a rnuerte por los capitales y garant¨ªas m¨ªnimas que exige el texto se resisten a desaparecer.
Por otra parte , la situaci¨®n del seguro del autom¨®vil ha hecho de perro de hortelano. Seg¨²n Serra, al tener que cubrir sus p¨¦rdidas, los dem¨¢s ramos no han podido dedicar excedentes a su propia expansi¨®n.
En cuanto a los gastos generales, durante los ¨²ltimos a?os han subido, en vez de bajar, de acuerdo con el citado dict¨¢men. La explicaci¨®n radica en que la prima media por p¨®liza es mucho m¨¢s baja en Espa?a que en otros pa¨ªses ( en 1979 Espa?a ocup¨® el puesto 13 por volumen de primas, el 24 en primas por habitante), y el trabajo lo dan las p¨®lizas.
Seg¨²n la Direcci¨®n General de Seguros, los gastos de gesti¨®n interna de las aseguradoras se Ilevan el 22% de la recaudaci¨®n y los gastos de gesti¨®n externa el 18%, cifras muy superiores a las europeas.
Por ¨²ltimo, el seguro de vida espa?ol est¨¢ subdesarrollado con respecto a otros pa¨ªses occidentales. Cuatro son las causas apuntadas por el presidente de ICEA: la Seguridad Social sigue acaparando zonas reservadas en otras naciones a la competencia del seguro privado, el desarrollo econ¨®mico no ha sido paralelo al cultural, los aumentos salariales se han destinado m¨¢s al consumo que al ahorro y la mayor parte de las entidades no ha podido costear sus planes de expansi¨®n.
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