Satisfacci¨®n de AP y de sectores centristas por la decisi¨®n
Miembros destacados de Alianza Popular y de significados sectores de UCD no ocultaron ayer su satisfacci¨®n por la decisi¨®n gubernamental de retirai- el proyecto de ley de autonom¨ªa universitaria (LAU) del Congreso de los diputados. La comunicaci¨®n de la medida gubernamental ser¨¢ comunicada de inmediato a las Cortes, seg¨²n fuentes pol¨ªticas.Para el diputado centrista Oscar Alzaga, "la retirada por el Gobierno del maltrecho proyecto de la LAU constituye un acierto pleno, pese a la rabieta de alg¨²n diputado socialista". En declarac¨ªones a Europa Press, Alzaga dijo que "una democracia moderna no se puede regir por el lema medieval de sostenerla y no enmendalla, y esto es a¨²n m¨¢s evidente si se trata de promover una reforma seria de la f¨¢brica naciorial de saberes que debe ser nuestra Universidad."
"El periplo parlamentario de este proyecto de ley", prosigui¨®, "ha acreditado que en los renglones de la LAU faltaba el horizonte de un modelo moderno de universidad al que tender, y que sobraban soluciones reglamentistas chapuceras." Asimismo se?al¨® que una reforma de este g¨¦nero tiene que estar presidida por "el imperio del inter¨¦s social, y no por mil y una hipotecas contraidas con las m¨¢s extravagantes pretensiones gremialistas."
Jorge Verstrynge, secretario general de Alianza Popular, indic¨® por su parte que las deficiencias de la LAU aconsejaban su retirada. En un tema tan importante como ¨¦ste se estaba tramitando la LAU con un acuerdo entre el PSOE y UCD que discrepaba del texto salido de la segunda ponencia. "Tambi¨¦n supon¨ªa el proyecto un abierto atentado a la libertad de ense?anza, garantizada por la Constituci¨®n, al proponerse el concepto de 'servicio p¨²blico' e¨®n la correspondiente carga ideol¨®gica, incompatible con la libertad de creaci¨®n de centros docentes establecida por la Constituci¨®n."
Para AP, esas y otras deficiencias hac¨ªan aconsejable la retirada de una ley que no contemplaba los aut¨¦nticos problemas de la universidad y de la sociedad espa?olas, "y en consecuencia, una nueva redacci¨®n para satisfacer estas necesidades reales que, por encima de pactos o consensos, ofreciese soluciones adecuadas a los problemas."
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