Portugal exige que su ingreso en la CEE no est¨¦ vinculado al de Espa?a

La exigencia de que la adhesi¨®n de Portugal a la Comunidad Econ¨®mica Europea (CEE) no sea vinculada a la adhesi¨®n de Espa?a y la explicaci¨®n de las particulares relaciones entre Lisboa y sus dos principales ex colonias, Angola y Mozambique, han constituido la base de las entrevistas mantenidas ayer en Bruselas por el presidente de la Rep¨²blica portuguesa, general Antonio Ramalho Eanes, de visita oficial en B¨¦lgica.

Eanes realiza esta visita a la capital europea tres meses escasos despu¨¦s de que lo hiciera su primer ministro, Francisco Pinto Balsemao, con quien mantiene relaciones tirantes, y cuando las relaciones entre Portugal y la Comisi¨®n Europea -encargada de preparar la adhesi¨®n- atraviesan un mal momento. La comisi¨®n, presidida por el luxemburgu¨¦s Gaston Thorn, defiende que la ampliaci¨®n de la CEE no debe hacerse en dos etapas, sino guardar un cierto paralelismo, a lo que se opone rotundamente Lisboa, sabedora de que ello supone retrasar su propia adhesi¨®n hasta que se produzca la de Espa?a, es decir en 1985, seg¨²n los observadores.Las relaciones entre Thorn y el Gobierno portugu¨¦s se deterioraron a¨²n m¨¢s a ra¨ªz de la reciente visita que efectu¨® a Lisboa el presidente de la Comisi¨®n. Gaston Thorn insinu¨® entonces que la negociaci¨®n no era objeto de la suficiente atenci¨®n por parte de Portugal, y que la Administraci¨®n portuguesa deb¨ªa preparar mejor sus posiciones negociadoras. Seg¨²n expertos de la Comisi¨®n, la adhesi¨®n de Portugal. no sufrir¨¢ ning¨²n retraso artificial, pero seguir¨¢ siendo paralela a la de Espa?a porque el retraso ser¨¢ debido a la falta de preparaci¨®n de los informes presentados por Lisboa.

La posici¨®n de la Comisi¨®n no ser¨¢, sin embargo, decisiva, porque son los diez Estados miembros los que deciden finalmente el ritmo de la negociaci¨®n. Hasta ahora Francia se ha constituido en padrino de la petici¨®n portuguesa. Seg¨²n la frase de un experto ?le la Comisi¨®n, "los representantes franceses pisan el acelerador cuando se habla de Portugal se rascan la cabeza cuando se habla de Espa?a". Las prisas francesas no encuentran eco por el momento en el pa¨ªs clave de la CEE, la Rep¨²blica Federal de Alemania, deseosa de mantener, en lo posible, una negociaci¨®n paralela.

Para algunos medios pr¨®ximos a la Comisi¨®n, la adhesi¨®n de Portugal no puede ser previa a la de Espa?a -al menos que fuera un adelanto simb¨®lico- porque se corre el riesgo de que la Asamblea portuguesa, llamada a ratificar el tratado de adhesi¨®n de Espa?a, considere incorrecto un tratado en el que, l¨®gicamente, no ha participado. Al margen de los problemas planteados por el paralelismo o no de ambas adhesiones, Portugal ha tropezado hasta el momento con una actitud dura de los diez en los escasos temas en los que los intereses portugueses est¨¢n en juego.