Conmoci¨®n en Granada ante el supuesto llanto ensangrentado de la Virgen de la L¨¢grima
El sorprendente hallazgo de sendos surcos rojos en las mejillas de la imagen de la Virgen de la L¨¢grima, en la iglesia granadina de San Juan de Dios, ha revolucionado la ciudad de Granada. En la calle donde se encuentra el mencionado templo, que lleva el mismo nombre que ¨¦ste, se agolpaba en la tarde de ayer una multitud, formando cola, para contemplar lo que muchos consideran un milagro. La fecha coincide con el aniversario de las apariciones de F¨¢tima y con el del atentado el pasado a?o contra el Papa en Roma.
En la ma?ana de ayer, cuando el padre Fernando, sacrist¨¢n de la iglesia, entr¨® en el templo, hacia las ocho menos cuarto de la ma?ana, advirti¨® unas manchas en el rostro de la imagen de la Virgen de la L¨¢grima, una talla de madera del siglo XVIII atribu¨ªda al escultor Mora, de aproximadamente un metro de altura y que se encuentra dentro de una urna. La imagen est¨¢ colocada en este templo desde hace unos ocho a?os, procedente de una donaci¨®n particular. No hay en su pasado ninguna acci¨®n milagrosa reconocida.El padre Fernando se acerc¨® a la imagen y comprob¨® que las manchas en el rostro parec¨ªan ser l¨¢grimas de color rojo, como si la imagen estuviera llorando y sus l¨¢grimas fueran de sangre. La noticia corri¨® esta ma?ana como la p¨®lvora por la ciudad, y a primeras horas de la tarde la Polic¨ªa Municipal se hab¨ªa visto obligada a cortar el tr¨¢fico a la entrada de la calle San Juan de Dios, por la plaza del Triunfo.
Una multitud se agolpaba a la entrada del templo, y cost¨® trabajo ordenar a todos los fieles que aspiraban a contemplar el milagro en una fila que se extend¨ªa a media tarde de ayer, a lo largo de unos cuatrocientos metros desde la puerta del templo. Es dificil calcular el n¨²mero de personas dispuestas a esperar el tiempo necesario para contemplar el supuesto milagro, pero a la hora de cerrar esta edici¨®n se puede decir que hab¨ªan pasado no menos de 10.000 devotos o curiosos por el interior del templo, mientras un n¨²mero superior esperaba turno para hacer otro tanto. El padre Ernesto, el director del templo de los hermanos de San Juan de Dios se mostr¨®, sin embargo, muy cauto al hablar del asunto. Afirmaba que no pod¨ªa creer que se tratara de un milagro, pero al propio tiempo se?al¨® su perplejidad de que, caso de tratarse de una supercher¨ªa, alguien hubiera abierto la urna donde se encuentra la imagen, dado que la ¨²nica llave que existe de la misma, se encuentra en su poder. El arzobispado a¨²n no se ha pronunciado al respecto. Por el momento, se han tomado muestras de las manchas del rostro de la imagen para ser estudiadas en el departamento de Microbiolog¨ªa de la Facultad de Farmacia, en el hospital cl¨ªnico y en el de San Juan de Dios. Muchos fieles que sal¨ªan de la iglesia despu¨¦s de contemplar el presunto milagro, en su mayor¨ªa mujeres de cierta edad, lo hac¨ªan con visibles muestras de emoci¨®n en el rostro. En alg¨²n caso les costaba trabajo hablar.
En cualquier caso, en la contemplaci¨®n directa de la imagen lo ¨²nico que se puede ver son dos trazos de color rojo terminados en un peque?o abultamiento. La apariencia es de l¨¢grima, pero la mancha no avanza, al menos a una velocidad que sea perceptible y lo que se ve no tiene apariencia de l¨ªquido, sino de algo completamente seco.
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