El capit¨¢n Astiz, trasladado a Londres

El capit¨¢n Alfredo Astiz, que estaba al mando de la guarnici¨®n argentina en las islas Georgias del Sur, llegar¨¢ pr¨®ximamente a Londres desde la isla de la Ascensi¨®n como prisionero de guerra. Los Gobiernos sueco y franc¨¦s quieren interrogarle sobre la desaparici¨®n de tres de sus ciudadanos. Astiz, apoyado por el Gobierno argentino y acogi¨¦ndose a la Convenci¨®n de Ginebra, se niega a declarar sobre este tema. Par¨ªs y Estocolmo sospechan que Astiz es el responsable de la desaparici¨®n y muerte de una joven sueca de diecisiete a?os y de dos monjas francesas, en Argentina, en 1977. Con reputaci¨®n de torturador, Astiz lleva el apodo de El ¨¢ngel rubio. Fue hecho prisionero de guerra el 25 de abril, cuando la reconquista brit¨¢nica de las Georgias del Sur. Trasladado a la isla de la Ascensi¨®n, no fue liberado con los otros prisioneros. Ahora, seg¨²n han indicado fuentes oficiosas, est¨¢ siendo trasladado al Reino Unido, donde se dispone de mejores condiciones para su encarcelamiento. Astiz, se?al¨® ayer el Foreign Office, se ha negado, con el apoyo de su Gobierno, a ser interrogado sobre sus supuestos cr¨ªmenes. La Convenci¨®n de Ginebra se?ala que los prisioneros de guerra s¨®lo est¨¢n obligados a decir su nombre, graduaci¨®n y n¨²mero, sin tener que declarar sobre otros temas. El Foreign Office estuvo ayer en contacto con los Gobiernos franc¨¦s y sueco. La Convenci¨®n de Ginebra permite retener a los prisioneros de guerra hasta el final de las hostilidades.