Los Presupuestos Generales del Estado para 1983 ser¨¢n casi una pr¨®rroga de los actuales
El Gobierno aprob¨® ayer en Consejo de Ministros las instrucciones para elaborar los Presupuestos Generales del Estado para 1983. El trabajo estar¨¢ dominado por las incertidumbres de la situaci¨®n econ¨®mica y la perspectiva del eventual anticipo de elecciones generales. Lo m¨¢s novedoso es que cada ministerio presentar¨¢ su previsi¨®n de gastos en pesetas de 1982, mediante la absorci¨®n de obligaciones contra¨ªdas, revisable tras el verano. As¨ª, las cuentas del Estado ser¨¢n una prolongaci¨®n de las actuales, a¨²n en el caso de que la disoluci¨®n anticipada de las Cortes no obligue a la simple pr¨®rroga de los Presupuestos 1982.
Seg¨²n noticias de toda solvencia, el Gobierno ha aceptado todas las propuestas de instrucciones que prepar¨® Hacienda, excepto dos. Por la primera, el instrumento ser¨¢ una comunicaci¨®n del ministro, Jaime Garc¨ªa A?overos, complementaria de la comunicaci¨®n de marzo pasado y de la orden posterior de 9 de junio sobre normas t¨¦cnicas de elaboraci¨®n. La segunda ha consistido en rechazar la propuesta para reducir en un 25% las subvenciones a los gas¨®leos agr¨ªcola y pesquero. Tal reducci¨®n estaba prevista dentro de un plan escalonado para eliminar las subvenciones, porque en su d¨ªa se concibi¨® la medida como transitoria. Su demora costar¨¢ en 1983 unos 6.000 millones de pesetas.El Ministerio de Hacienda hizo p¨²blica ayer una nota en la que se sintetizaban dichas directrices generales que consisten esencialmente en una reducci¨®n generalizada de subvenciones, salvo en los casos de la aportaci¨®n del Estado a la Seguridad Social y prestaciones al desempleo; limitaci¨®n de ampliaci¨®n de plantillas se?alando que durante el ejercicio de 1983 no se tramitar¨¢n expedientes de ampliaci¨®n de plantillas si el incremento del gasto p¨²blico derivado no queda compensado mediante la reducci¨®n de otros gastos o por la obtenci¨®n de ingresos adicionales directamente relacionados con dichas ampliaciones. Por ¨²ltimo se establece, seg¨²n la nota oficial del Ministerio de Hacienda, que los organismos aut¨®nomos aplicar¨¢n en sus presupuestos los criterios y normas establecidos, enmarc¨¢ndolos en un plan de reforma de la gesti¨®n, para racionalizar la toma de decisiones, disminuci¨®n de gastos y aumento de los recursos generados por la propia actuaci¨®n.
La absorci¨®n de obligaciones pendientes y su cuantificaci¨®n en pesetas de 1982 supondr¨¢ por s¨ª sola incrementar los gastos del Estado en m¨¢s de 400.000 millones de pesetas, sobre los 3,5 billones presupuestados para el presente ejercicio. A estos aumentos se a?adir¨¢ despu¨¦s del verano, autom¨¢ticamente, los que aconsejen las estimaciones oficiales de inflaci¨®n y crecimiento econ¨®mico para 1983. Aunque oficiosamente se barajaban incrementos del 9% al 11% en precios y del 2% al 3% en la producci¨®n de bienes y servicios, el Gobierno ha preferido precisar la estimaci¨®n de estas magnitudes cuando disponga de m¨¢s datos sobre la coyuntura internacional y nacional.
Los primeros 400.000 millones de pesetas adicionales proceder¨¢n de consolidar o aflorar obligaciones contra¨ªdas. He aqu¨ª algunos de ellos:
- Inversi¨®n p¨²blica. Los 50.000 millones de pesetas aprobados hace varios meses para sumar a los 825.000 de los Presupuestros de 1982. Con las posteriores correcciones autom¨¢ticas, se espera que el total para 1983 supere el bill¨®n de pesetas, lo que supondr¨ªa un crecimiento real del 3%.
- Coste de la deuda interior y exterior. Los intereses pasar¨¢n de 83.000 millones de pesetas previstos para 1982 a 180.000 millones. Las devoluciones, de 58.000 a 121.000 millones.
- Cobertura de la Seguridad Social y desempleo. Por el programa de racionalizaci¨®n de la Seguridad Social, la aportaci¨®n del Estado al sistema aumentar¨¢ de 350.000 millones de pesetas a unos 440.000; es decir, del actual 15% al 17% (el objetivo es 20% en 1984), aunque para ello hay todav¨ªa varias hip¨®tesis. Asimismo, la aportaci¨®n al desempleo (40% a cargo del Estado y 60% del sistema) crecer¨¢ de 174.000 a unos 200.000 ¨® 224.000 millones. Esta ¨²ltima alternativa depender¨¢ de si el empleo comunitario, en lugar de ser financiado todo por el Estado, pasa al sistema general del 40%-60%.
- Aumentos de plantillas. Como resultado de recientes disposiciones, el incremento de plantillas costar¨¢ unos 8.000 millones y proceder¨¢ casi todo de Educaci¨®n y Universidades y Administraci¨®n de Justicia. Naturalmente, esto es independiente del traslado de pesetas 1982 a pesetas de 1983 por los incrementos salariales. Hasta ahora las hip¨®tesis han ido del 9% al 11%, pero arrastrar¨¢n mayor volumen por su incidencia en Seguridad Social y pensiones.
- Reconocimiento de derechos. Aqu¨ª hay dos partidas fundamentales. Una, de 15.000 a 20.000 millones de pesetas, por el primer pago de trienios, reconocido y luego dejado en suspenso por decreto ley el a?o pasado. La otra, 13.000 millones de pesetas, por el reciente decreto de homologaci¨®n de trato del personal docente con el civil.
En compensaci¨®n, aunque la incidencia de esta medida no ser¨¢ grande, el crecimiento de los gastos corrientes (muebles, ¨²tiles de trabajo, etc¨¦tera) tratar¨¢ de colocarse alg¨²n punto por debajo del aumento de la producci¨®n a precios de mercado.
Cifras definitivas
Para fijar las cifras definitivas por cada ministerio, de cara a lo cual se han celebrado numerosas reuniones en los ¨²ltimos meses, la instrucciones aprobadas ayer preven que, antes del pr¨®ximo 30 de junio, los respectivos departamentos elevar¨¢n sus propuestas. En un apartado deber¨¢n especificar las cr¨¦ditos necesarios en pesetas 1982 una vez absorbidas las obligaciones contra¨ªdas. En otro, las nuevas propuestas de gasto. Todo ello ser¨¢ analizado y ajustado individualmente.
En consecuencia, todav¨ªa no hay estimaciones concretas de d¨¦ficit presupuestado para 1983. En gran medida, depender¨¢n de la evoluci¨®n de los ingresos, que a su vez est¨¢ relacionada con el pulso de la econom¨ªa. Para mediados de julio Hacienda espera estar en mejores condiciones, una vez conocidas las entradas por Renta. No obstante, las primeras cifras aventuradas apuntan a que los ingresos pasen de 2,8 a 3,2 billones de pesetas, con aumento algo superior al medio punto en la presi¨®n fiscal (porcentaje de impuestos sobre el Producto Interior Bruto (PIB), avance similar al de los ¨²ltimos a?os. As¨ª, el d¨¦ficit presupuestado, que parti¨® inicialmente para 1982 de 700.000 millones de pesetas, podr¨ªa pasar los 800.000 millones, sin llegar a exceder 3,5 puntos del PIB (para 1982 era 3,4). De todas formas, para medios solventes de Hacienda est¨¢ claro que el margen de maniobra para la programaci¨®n de 1983 es muy peque?o. No obstante, se ha esbozado el criterio de seguir fomentando la inversi¨®n p¨²blica en t¨¦rminos reales.
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