Todo a punto para la ceremonia de constituci¨®n del Parlamento andaluz
Una actividad febril se detectaba ayer en la sala de tapices de los Reales Alc¨¢zares de Sevilla, donde los encargados de organizar la ceremonia de la constituci¨®n del Parlamento andaluz le daban vueltas y vueltas al irresoluble problema de acomodar a cuatrocientas personas en un sal¨®n de 38 metros de largo por ocho de ancho. Algo parece seguro: la constituci¨®n del Parlamento, ma?ana lunes, no ser¨¢ una ceremonia c¨®moda para los que asistan a ella.
A los 109 parlamentarios se sumar¨¢n, como asistentes al acto, 170 autoridades invitadas y 120 periodistas acreditados. Acomodar a todas estas personas en un sal¨®n de las dimensiones antedichas y, de forma que el acto presente cierta solemnidad, resulta imposible, y en cualquier caso justifica la agitaci¨®n de la ma?ana de ayer, cuando entre los afanados carpinteros se pod¨ªa descubrir un corro de hombres inquietos, entre los que figuraban personajes tan destacados como el presidente de la Diputaci¨®n, el futuro presidente del Parlamento o el conservador de los Reales Alc¨¢zares, tratando de encontrar soluciones para convertir cada metro cuadrado en dos.Pese a que se decidi¨® reducir la entrada de periodistas a uno por cada medio acreditado (para los restantes se habilitar¨¢ un sal¨®n contiguo de iguales dimensiones con pantalla de televisi¨®n) y a que se conf¨ªa en que alguna parte de los invitados falte a la ceremonia, al final es posible que haya una asistencia superior a la que permiten las dimensiones de la sala, y la ceremonia no ser¨¢ c¨®moda. El agolpamiento de personas en este reducido espacio y la aportaci¨®n de calor¨ªas que har¨¢n los veinticinco mil watios que los t¨¦cnicos de Televisi¨®n necesitan para iluminar la sala, har¨¢n que el calor se convierta en una obsesi¨®n.
En cualquier caso, el marco escogido para esta sesi¨®n constituyente es magn¨ªfico y cargado de historia. Sobre este mismo solar estaba la bas¨ªlica paleocristiana en la que San Isidoro vivi¨®, escribi¨® lo mejor de su obra y muri¨®. Sobre esa bas¨ªlica edificaron los Reyes moros su alc¨¢zar y tras la reconquista aqu¨ª fue coronado (aunque la ceremonia no alcanzara nunca valor efectivo) Alfonso X el Sabio como emperador del sacro imperio romano-germ¨¢nico. M¨¢s tarde, los Reyes Cat¨®licos se instalaron aqu¨ª para dirigir su campa?a contra el Reino de Granada, y aqu¨ª se prepararon con posterioridad la mayor parte de las grandes expediciones a las islas.
El sal¨®n escogido para el acto, contiguo al de la coronaci¨®n de Alfonso X y de construcci¨®n posterior, contiene una magn¨ªfica colecci¨®n de tapices, debida al holandes Van der Goten, y fue inaugurado con un baile en honor a la coronaci¨®n de Carlos IV. Los tapices representan la campa?a de Carlos V en T¨²nez, as¨ª que por un capricho del destino el Parlamento andaluz echar¨¢ a andar entre escenas de cristianos matando moros y presidido por el Montjuic y el Tibidabo, pues Carlos V parti¨® de Barcelona para su campa?a y a esa salida corresponde el dibujo del tapiz colocado en la pared del fondo que ocupar¨¢ la presidencia.
Cecilio Valverde, presidente del Senado, ocupar¨¢ el lugar de m¨¢s distinci¨®n en la zona reservada para los invitados, y el orden de prevalencia del protocolo sigue con Soledad Becerril, que representar¨¢ al Gobierno, los capitanes generales de la II Regi¨®n Militar y la II Regi¨®n A¨¦rea, los presidentes de los parlamentos catal¨¢n, vasco gallego y Foral de Navarra, (aunque el gallego ser¨¢ representado por su vicepresidente) el delegado del Gobierno en Andaluc¨ªa y el gobernador civil de Sevilla.
Los 109 parlamentarios ocupan sillas tra¨ªdas del Palacio de la Merced de C¨®rdoba, sede de la diputaci¨®n de aquella provincia, y son las mismas que Ocup¨® la asamblea de parlamentarios que el 28 de febrero del a?o pasado aprob¨® el Estatuto. Estar¨¢n colocadas en seis hileras, tres a cada lado, y perpendicularmente a la mesa, que presidir¨¢ Manuel Bustos, como parlamentario de m¨¢s edad.
El acto ser¨¢ breve. Se limitar¨¢ a la introducci¨®n de Manuel Bustos, a la votaci¨®n de la mesa y al posterior discurso de Antonio Ojeda, candidato socialista a la presidencia del Parlamento y seguro ganador, habida cuenta de que su partido tiene 66 parlamentarios por 17 AP, 15 UCD, 9 del PCA y 3 el PSA, que a pesar de ¨¦sto tendr¨¢ muy probablemente, grupo parlamentario. Para el PSOE son, adem¨¢s del presidente de la mesa, el vicepresidente primero y el secretario primero. Los puestos de vicepresidente segundo y secretario segundo los quiere AP, pero ayer UCD negociaba la obtenci¨®n del ¨²ltimo de ellos.
El PSA se abstendr¨¢ de votar
El Partido Socialista de Andaluc¨ªa (PSA) se abstendr¨¢ ma?ana en la votaci¨®n para elegir el presidente y la Mesa del Parlamento Aut¨®nomo, seg¨²n anunci¨¦ ayer su secretario general, Luis Uru?uela, informa Jos¨¦ Aguilar. El nuevo l¨ªder nacionalista ha propuesto importantes cambios en el comit¨¦ nacional de su partido, dentro de su actual pol¨ªtica de presentar una nueva imagen de la organizaci¨®n a ra¨ªz del fracaso electoral del 23 de mayo. Los tres diputados del PSA se abstendr¨¢n en la elecci¨®n del socialista Antonio Ojeda como presidente del Parlamento andaluz, por estimar que PSOE, AP y UCD ya se han repartido los cargos de la Mesa del ¨®rgano legislativo, marginando al PCA y al PSA.La misma actitud abstencionista mantendr¨¢ el PSA en la sesi¨®n de investidura de Rafael Escuredo como presidente del Gobierno regional, aceptando, por el contrario, la designaci¨®n de Sevilla como capital pol¨ªtica de la comunidad.
Los nacionalistas se disponen, por otra parte, a continuar su pol¨ªtica de cambio de imagen. El comit¨¦ nacional acept¨® ayer la propuesta de Uru?uela de incorporar cinco nuevos miembros a este ¨®rgano de direcci¨®n.
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