Cuenca recupera y estrena obras de Julio G¨®mez y Jos¨¦ Luis Turina, en los Encuentros de Opera

Los Encuentros Internacionales de Opera de C¨¢mara, que se est¨¢ celebrando en Cuenca, han programado el pasado fin de semana una interesante sesi¨®n, en la que se recuperaba la ¨®pera en un acto de Los Dengues, de Julio G¨®mez, con libreto de Cipriano Rivas, y se estrenaba con car¨¢cter absoluto Ligaz¨®n, ¨®pera en un acto y cinco escenas, original de Jos¨¦ Luis Turina, sobre texto del Retablo de la avaricia, la lujuria y la muerte, de Valle Incl¨¢n. El pr¨®ximo viernes, la Pittsburgh Chamber Opera ofrecer¨¢ un drama de Monteverdi y una ¨®pera jocosa de Pergolessi.Los Dengues o La medicina a palos, de Julio G¨®mez, sin obviar la herencia pr¨®xima y remota de la zarzuela y la tonadilla, se alinea m¨¢s decididamente en la tradici¨®n de la ¨®pera bufa, y lo hace con la donosura y personalidad representativas del reconocido buen oficio del compositor. Seg¨²n nos informa G¨®mez Amat en los comentarios al programa, la obra se estren¨® en Valladolid en 1927, y se dio en Madrid tras la guerra civil: sin duda, constitu¨ªa una completa novedad para los espectadores del pasado fin de semana, en la antigua iglesia de San Pablo, de Cuenca, como lo ser¨¢ en estos d¨ªas en Valencia, donde se representa id¨¦ntico programa.

Con escenograf¨ªa de Tom¨¢s Adri¨¢n, que asume con sencillez toda la carga tradicional de la pieza, actuaron la soprano Ana de Guanarteme, el tenor Santiago Jerico y el bar¨ªtono Francisco Matilla. Pascual Ortega dirigi¨® con decoro a un solvente grupo de profesores de la Orquesta de RTVE.

La Galicia de Valle Incl¨¢n

La misma orquesta y director trabajaron con eficacia y evidente cari?o hacia la partitura en el estreno de Ligaz¨®n. Ya es un suceso que un joven compositor, reci¨¦n llegado a la treintena, componga y estrene una ¨®pera. Sin embargo, el valor positivo de la experiencia no debe extra?ar a quienes seguimos los firmes pasos musicales del nieto de don Joaqu¨ªn, que es, sin duda, uno de los compositores m¨¢s dotados de la generaci¨®n en ascenso. La mist¨¦rica y tremenda Galicia que pinta Valle Incl¨¢n ha servido a Jos¨¦ Luis Turina para practicar un teatro musical que, siendo espa?ol y de hoy, muestra concatenaciones cordiales con el expresionista de la Escuela de Viena.No debo ocultar que me interes¨® bastante m¨¢s la parte orquestal -llena de toques personales y de sugestivas alusiones musicales que ambientan y matizan el acontecer esc¨¦nico-, que la escritura vocal.

Asumiendo la modestia de los medios del Encuentro de Opera de C¨¢mara conquense, se ha de imponer el trabajo imaginativo y apoyado en buenas dosis de entusiasmo. As¨ª fue el de Luis Iturri, director de escena, muy aplaudido, junto al autor y los int¨¦rpretes de Ligaz¨®n; las partes cantadas estuvieron bien defendidas por Charo de la Guardia (soprano), Alfredo Heilbron (tenor) y Carmen Sinovas (mezzo).