Supuesto fraude mediante recetas de la Seguridad Social para 'medias descanso'
La Inspecci¨®n de Servicios Sanitarios del Instituto Nacional de la Salud (Insalud) ha detectado un supuesto fraude en la expedici¨®n farmac¨¦utica de medias descanso con recetas de la Seguridad Social y ha emprendido una investigaci¨®n para esclarecer el hecho, seg¨²n han confirmado fuentes de dicho instituto, que prepara, por otra parte, una nota de recomendaci¨®n a las farmacias. Durante 1981, la Seguridad Social espa?ola gast¨® unos 3.000 millones de pesetas en este tipo de medias y en otros productos farmac¨¦uticos de rehabilitaci¨®n, informa Europa Press.
Diversas farmacias de Bilbao, Madrid, Oviedo, Palencia, Sevilla, Segovia y Valladolid han sido expedientadas por el Insalud, a causa de anomal¨ªas en la distribuci¨®n al p¨²blico de medias terap¨¦uticas. Al parecer, presentaban un n¨²mero de cupones-precinto (de los que el farmac¨¦utico adosa a la receta una vez adquirido el producto por el cliente) que no correspond¨ªa con la cifra real de beneficiarios de la Seguridad Social que solicitaban esas medias.En un establecimiento c¨¦ntrico de Madrid fueron localizados cupones precinto, todos ellos pertenecientes a una conocida firma multinacional, por un valor de setenta millones de pesetas. En otra farmacia de Oviedo se requisaron dos cajas con cupones, de la misma marca que los descubiertos en Madrid, con recetas firmadas por la misma persona, que result¨® ser el ayudante del titular del establecimiento. El sistema de fraude utilizado en los dos casos fue la adquisici¨®n de productos y su posterior uni¨®n a recetas de la Seguridad Social, no siempre presentadas por beneficiarios de la misma, y se supone que ha sido obra de una red extendida por toda Espa?a, puesto que todas las etiquetas requisadas son de la misma marca.
La Subdirecci¨®n General de Inspecci¨®n de Servicios Sanitarios, que ha emprendido una investigaci¨®n sobre el hecho, ya difundi¨® el pasado a?o por las farmacias espa?olas una circular en la que daba instrucciones acerca de la distribuci¨®n de medias descanso. La circular, publicada el 14 de septiembre de 1981, se?alaba que desde el 1 de diciembre de ese a?o solamente se dispensar¨ªan esas medias incluyendo en las recetas un cup¨®n resguardo. De esta forma quedaban equiparadas a otros efectos y accesorios dispensados con cargo a la Seguridad Social, y se obligaba a un cambio en la presentaci¨®n de su envasado.
En esta nota del Insalud, que ser¨¢ renovada en breve, se hac¨ªa una clasificaci¨®n de las medias terap¨¦uticas, fijando los precios desde 780 pesetas (las cortas, de compresi¨®n ligera) a 4.000 pesetas (las medias largas, de compresi¨®n fuerte). Asimismo, se dec¨ªa que s¨®lo pod¨ªan firmar la receta oficial recomendando medias descanso los m¨¦dicos cirujanos, los traumat¨®logos, los ginec¨®logos, los nefr¨®logos, los rehabilitadores y los angi¨®logos. "S¨®lo en casos excepcionales", dec¨ªa la nota, "los facultativos de medicina general podr¨¢n extender estas recetas, debiendo comunicar el hecho a la Inspecci¨®n de Servicios Sanitarios".
En la introducci¨®n de la circular, el Insalud manifestaba su intenci¨®n de normalizar una situaci¨®n de pol¨¦mica y de conflictos en tomo a la distribuci¨®n de este tipo de medias, objeto de una prescripci¨®n m¨¦dica indiscriminada. Al parecer, la nueva nota del Insalud insiste en estos t¨¦rminos y tiene por objeto frenar la facilidad. en la obtenci¨®n de un producto considerado superfluo, pero este organismo no ha confirmado el contenido del texto que prepara, ni los datos obtenidos en su investigaci¨®n.
El tema de las medias el¨¢sticas terap¨¦uticas fue incluido, en abril del presente a?o, en la pregunta que present¨® al Gobierno el grupo parlamentario socialista a prop¨®sito de la detecci¨®n de supuestas anomal¨ªas en la prescripci¨®n facultativa y posterior distribuci¨®n farmac¨¦utica de aparatos ortop¨¦dicos y accesorios para enfermos beneficiarios de la Seguridad Social.
La Seguridad Social espa?ola gast¨® a lo largo de 1981 unos 3.000 millones de pesetas en las llamadas medias descanso, as¨ª como en otros efectos farmac¨¦uticos. Sin embargo, los datos disponibles no hacen referencia a la distribuci¨®n por productos de dichos gasto s.
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