Las relaciones con EEUU y las bajas en Beirut preocupan a Israel

La opini¨®n p¨²blica israel¨ª est¨¢ preocupada por el progresivo deterioro de las relaciones entre Tel Aviv y Washington, plasmado el jueves en el rechazo, por parte del Gobierno de Men¨¢jem Beguin, de la urgente petici¨®n del presidente norteamericano Ronald Reagan de que las fuerzas israel¨ªes regresasen a las posiciones que ocupaban en torno a Beirut el 1 de agosto.Otro tema de preocupaci¨®n e inquietud para los israel¨ªes son las p¨¦rdidas sufridas por sus tropas en los ¨²ltimos combates y la hemorragia que espera al Ej¨¦rcito si el Gabinete decide continuar la invasi¨®n gradual de Beirut previa al asalto final.

La reuni¨®n del Consejo de Ministros dur¨® cinco horas y fue especialmente tormentosa. Por lo menos tres ministros -el del Interior, Yosef Burg; el de Comunicaciones, general retirado Mordejai Tzipori, y el de Energ¨ªa, Itzhak Berman- criticaron duramente el funcionamiento del Gobierno, que no fue consultado antes de la adopci¨®n de graves decisiones como la de acentuar la presi¨®n militar contra Beirut.

"El Gobierno no puede decir am¨¦n a todas las decisiones que adopta soberanamente el ministro de Defensa, Ariel Sharon", dijo en la reuni¨®n Tzipori.

Con relaci¨®n al deterioro de las relaciones entre Washington y Tel Aviv, existen dos tesis encontradas. Los pesimistas consideran que Estados Unidos ha llegado al l¨ªmite de su paciencia y que Israel puede pagar cara su arrogancia ante las reiteradas peticiones de Reagan. Especialmente porque el bloque proisrael¨ª del Congreso, que en las Administraciones de Ford y Carter frenaba cualquier iniciativa contraria a Tel Aviv, ha perdido terreno y es Reagan quien tiene que calmar ahora al Senado norteamericano, que presiona al presidente para que adopte una posici¨®n m¨¢s dura contra Israel.

Para los optimistas la situaci¨®n no es tan grave, y creen que no hay que hacer demasiado caso del malhumor norteamericano, porque los intereses estrat¨¦gicos de Estados Unidos e Israel son los mismos: conseguir un L¨ªbano limpio de influencias sirias y cerrar el camino a la penetraci¨®n de la URSS en la zona.

"Mientras esto siga siendo as¨ª, Israel no debe inquietarse demasiado por las declaraciones p¨²blicas de los dirigentes norteamericanos", ha declarado a este peri¨®dico un alto funcionario israel¨ª.

Los partidarios de esta tesis recuerdan que los presidentes Eisenhower y Nixon, en su momento, no dudaron en poner a Israel contra la pared cuando vieron en peligro sus proyectos estrat¨¦gicos para Oriente Pr¨®ximo. Creen que actualmente, con Reagan, no se ha llegado a ese punto.

En la opini¨®n israel¨ª parece haber mayor unanimidad en lo que se refiere a la preocupaci¨®n por la brusca elevaci¨®n de sus bajas. En una sola jornada, el mi¨¦rcoles, el Ej¨¦rcito de Israel tuvo diecinueve muertos y 84 heridos, cuando durante todo un mes de combates las p¨¦rdidas s¨®lo ascendieron a trece muertos y diecisiete heridos.

El comunicado que dio el balance de bajas del mi¨¦rcoles tuvo el efecto de un rayo en la opini¨®n israel¨ª. La conmoci¨®n fue a¨²n mayor porque durante los d¨ªas precedentes los informes oficiales militares omitieron el n¨²mero de muertos. Es m¨¢s, los portavoces castrenses s¨®lo hablaron de heridos, y calificaron de mentirosos a los medios de comunicaci¨®n libaneses que afirmaron que en los combates del mencionado d¨ªa los israelies hab¨ªan tenido numeros muertos y heridos.

Estas p¨¦rdidas han hecho encenderse la se?al de alarma entre la opini¨®n israel¨ª. Repentinamente se ha dado cuenta de que la toma de Beirut no va a ser, precisamente, un paseo militar. A medida que las fuerzas israel¨ªes penetran en Beirut, los combates en las calles excluyen el apoyo de la aviaci¨®n.

Lo mismo ocurre con la artiller¨ªa. De esta manera, la enorme superioridad en armamentos con que cuentan los israel¨ªes pierde mucha de su eficacia. Los enfrentamientos, las luchas cuerpo a cuerpo en callejuelas y en medio de ruinas pasar¨¢n a dominar en los choques armados, lo que har¨¢ aumentar el n¨²mero de p¨¦rdidas de unos y otros.

Para el Ej¨¦rcito de Israel, la reducci¨®n al rn¨ªnimo de las bajas en la lucha es uno de los puntos claves de su doctrina militar. En la retaguardia, la p¨¦rdida de un familiar constituye una tragedia individual que acaba tomando las dimensiones de un drama.