P¨¢nico en la Bolsa de Francfort ante los rumores de quiebra definitiva de la multinacional AEG

Los rumores de una inminente quiebra de AEG quedaron aplacados a ¨²ltima hora de ayer con el anuncio, por parte de la presidencia del consorcio electrot¨¦cnico alem¨¢n, de que la empresa cuenta con fondos suficientes para hacer frente a sus compromisos. En v¨ªsperas de la reuni¨®n de hoy mi¨¦rcoles con los principales directivos de la Banca alemana para negociar la concesi¨®n de un cr¨¦dito de 1,1 mil millones de marcos (unos 50.000 millones de pesetas), la AEG anunci¨® que la mitad de esta cantidad obraba ya en su poder, de forma que su liquidez estaba garantizada. Pocas horas antes, los rumores de quiebra hicieron estragos en la Bolsa de Francfort, donde el ¨ªndice ponderado baj¨® 2,13 puntos en una oleada de ventas provocadas por el p¨¢nico entre los inversores de m¨¢s all¨¢ de las fronteras.

Las ¨®rdenes de ventas de Suiza precipitaron a la baja las cotizaciones alemanas de una forma desconocida aqu¨ª, con recortes en algunos valores de hasta 16 marcos por t¨ªtulo. Ni siquiera el marco se salv¨® ayer de la quema y, a pesar del descenso en los tipos de inter¨¦s norteamericanos, cerr¨® con medio c¨¦ntimo de marco de p¨¦rdida frente a la posici¨®n del lunes.La crisis de AEG ha arrastra do ya en lo que va de semana a varias filiales del consorcio: la f¨¢brica de lavadoras y secadoras de ropa Zanker present¨® ayer ex pediente de quiebra y sus mil empleados se declararon espont¨¢neamente en huelga, a pesar de que ya desde el pasado mes de junio se les hab¨ªa avisado del cierre inminente de la empresa. Tambi¨¦n la f¨¢brica de cocinas Neff la imit¨® pocas horas m¨¢s tarde y, a ¨²ltima hora del d¨ªa, la sigui¨® Dr Becher, productora de mobiliario para cocinas. Pocos d¨ªas antes hab¨ªa hecho otro tanto la empresa de electrodom¨¦sticos Kuepperbunsch.

Liquidaci¨®n constante

Aparte de la sucesi¨®n espectacular de quiebras de empresas filiales, estos cierres de empresas poco a?aden de alarmante a la situaci¨®n: en repetidas ocasiones hab¨ªa declarado AEG su prop¨®sito de ir liquidando o vendiendo las filiales dedicadas a bienes de consumo, especialmente de electrodom¨¦sticos, uno de sus secto res con mayores p¨¦rdidas.Actualmente, de la producci¨® de AEG lo m¨¢s rentable es el sector de bienes de equipo, al que el segundo gigante de la electrot¨¦cnica alemana quiere redu cirse pr¨¢cticamente.

En el curso del pr¨®ximo mes de septiembre, seg¨²n empleados de la firma y diversas fuentes bancarias y gubernamentales, habr¨¢ una decisi¨®n clara en cuanto a la solicitud del acuerdo para reducci¨®n de pagos. Una solicitud que tan solo saldr¨¢ adelante si AEG consigue convencer a los responsables de estudiarlo de que es capaz de convertirse en una empresa rentable: a pesar de los 120.000 puestos de trabajo que se hallan hoy en juego, el Estado alem¨¢n rechaza cualquier participaci¨®n directa en la empresa, como tambi¨¦n se niega a subvencionarla para mantener en vida un consorcio de firmas obligadas a financiarse mediante el contribuyente alem¨¢n.

Otro tanto ocurre con la banca, acreedora ya de 3,5 mil millones de marcos entre 20 instituciones, y cuya concesi¨®n de otros 1,1 mil millones depende del concepto de saneamiento de AEG.

Cerrar las plantas deficitarias

Incluso la pres.idencia de la empresa est¨¢ de acuerdo con banqueros y Gobierno y est¨¢ dis puesta a cerrar sus plantas no rentables. Quienes, naturalmente, no se muestran conformes son los sindicatos, los mismos que han impedido en repetidas ocasiones la particiipaci¨®n de capital extranjero en AEG, por temor de que las multinacionales sacrificasen los intereses de los obreros alemanes en aras de su pol¨ªtica comercial internacional.Los sindicatos han pedido varias veces en los ¨²ltimos d¨ªas que la crisis de AEG no se intente re solver a toda costa por medios exclusivos de econom¨ªa de mercado y han recordado que opondr¨¢n toda su resistencia, y luchar¨¢n con los muchos medios a su alcance, para que los cr¨¦ditos concedidos al saneamiento de AEG no se empleen en reducir plantillas: a fin de cuentas, argumentar¨¢n, lo que se har¨ªa ser¨ªa emplear al contribuyente alem¨¢n para dejarlo sin trabajo.

Hasta hoy mi¨¦rcoles quien tiene una de las palabras m¨¢s importantes es el ex ministro de Econom¨ªa, el liberal Hans Friederichs, quien se mostr¨® esc¨¦ptico el lunes en cuanto a la posibilidad de salvar a AEG con menos de 2.000 millones de marcos... y a?adi¨® que no estaba muy seguro de que se fueran a conseguir. Hans Friederichs es una voz m¨¢s que autorizada pues es hoy el presidente del Dresdner Bank.