Portugal teme que Indonesia consume su ocupaci¨®n de Timor Oriental

Transcurridos casi siete a?os desde la ocupaci¨®n militar por Indonesia de la antigua colonia portuguesa de Timor Oriental, Lisboa trata de evitar que la pr¨®xima Asamblea General de las Naciones Unidas consagre la victoria de las tesis de Yakarta.La revisi¨®n de la Constituci¨®n portuguesa de 1976, en v¨ªas de promulgaci¨®n, no altera las disposiciones que definen Timor Oriental como territorio administrado por Portugal, y atribuyen a la jefatura del Estado y al Gobierno, conjuntamente, competencia para resolver el problema creado por la invasi¨®n indonesia, condenada desde 1976 por las Naciones Unidas.

La falta de colaboraci¨®n, en ¨¦ste como en otros muchos dominios, entre el presidente Ramalho Eanes y la coalici¨®n gubernamental de centro-derecha ha pesado de modo negativo sobre las iniciativas diplom¨¢ticas portuguesas relativas a Timor. Existen ahora serias razones para temerque, en octubre, la Asamblea General de las Naciones Unidas no vuelva a tomar el partido de Portugal contra Indonesia, aceptando la anexi¨®n de la antigua colonia portuguesa como un hecho consumado.

Durante un reciente viaje a Nueva York, donde fue hasta hace poco jefe de la representaci¨®n portuguesa ante las Naciones Unidas, el actual ministro luso de Exteriores, Vasco Fustcher Pereira, contact¨® con diversas delegaciones para intentar convencerlas de que mantengan su apoyo a la posici¨®n de Lisboa.

El Gobierno luso dispone de informaciones recientes y dignas de cr¨¦dito que le permiten poner en duda las afirmaciones de Yakarta acerca de la total pacificaci¨®n del territorio y de la aceptaci¨®n por parte de la poblaci¨®n de su integraci¨®n en la Rep¨²blica Isl¨¢mica de Indonesia.

Varias organizaciones humanitarias, que prestaron en estos a?os ayudas alimenticias y m¨¦dicas a las poblaciones de Timor Oriental, alertan de nuevo a la opini¨®n internacional por las graves carencias que les afligen. Aunque las cifras referentes a las personas a¨²n internadas en campos de concentraci¨®n sean muy dispares, todas las fuentes denuncian la elevada mortalidad registrada entre los internados, y m¨¢s particularmente entre las familias que fueron deportadas para la peque?a isla de Atauro, frente a la costa de Dili, y que carecen de cualquier medio de subsistencia en esos p¨¢ramos.

Las organizaciones internacionales, y entre ellas la Cruz Roja, advierten que muchos millares de personas perecer¨¢n de hambre y v¨ªctimas de enfermedades contagiosas en Timor Oriental en los pr¨®ximos meses si no se reanudan urgentemente los programas de ayuda, que las autoridades de Yakarta rechazan por considerarlos totalmente innecesarios.