El Fondo Monetario Internacional estudia un mecanismo de ayuda para los pa¨ªses en situaci¨®n econ¨®mica cr¨ªtica

La cr¨ªtica situaci¨®n financiera de algunos pa¨ªses, como M¨¦xico, Polonia, Argentina, Per¨², Corea del Sur y Chile, y los efectos que su eventual colapso pueden tener en la comunidad bancaria internacional se ha convertido en el tema central de discusi¨®n de las reuniones anuales del Fondo Monetario Internacional (FMI) y Banco Mundial, que comienzan ma?ana, lunes, de manera formal, en la ciudad canadiense de Toronto. El grupo de los diez pa¨ªses m¨¢s desarrollados estudi¨® el viernes en su reuni¨®n preparatoria una propuesta del secretario del Tesoro norteamericano, Donald Regan, la constituci¨®n de un fondo especial de 10.000 millones de d¨®lares para ayudar a los pa¨ªses en desarrollo a equilibrar sus econom¨ªas.

El incremento de los recursos del FMI, pese a una inicial oposici¨®n de la Administraci¨®n Reagan, ser¨¢ quiz¨¢ la decisi¨®n m¨¢s importante de las sesiones, a juzgar por los resultados iniciales de los comit¨¦s de trabajo que deben finalizar hoy.Pocas veces, en la reciente historia, las reuniones anuales del Fondo y Banco Mundial han provocado tanta expectaci¨®n y atra¨ªdo a tantos delegados de los 146 pa¨ªses miembros de las dos organizaciones. Pero sobre todo destaca la presencia de los representantes de los bancos privados internacionales, cuyos riesgos crediticios con los llamados pa¨ªses en bancarrota t¨¦cnica amenazan su propia supervivencia. Por parte espa?ola est¨¢ prevista la asistencia del vicepresidente segundo del Gobierno, Juan Antonio Garc¨ªa D¨ªez, y del gobernador del Banco de Espa?a, Jos¨¦ Ram¨®n Alvarez Rendueles. Como invitados o visitantes han acudido por lo menos dos presidentes de los siete grandes y varios consejeros delegados y directores de los departamentos internacionales.

La dif¨ªcil situaci¨®n de algunos pa¨ªses miembros, que, como M¨¦xico, ni siquiera pueden pagar los servicios de sus elevadas deudas externas, ha dejado en un segundo plano la situaci¨®n econ¨®mica mundial, que sigue caracterizada por una profunda y cr¨®nica recesi¨®n. La reciente ca¨ªda de los tipos de inter¨¦s en Estados Unidos e, inicialmente, en Europa, apenas ha conseguido amortiguar la atm¨®sfera de pesimismo y resignaci¨®n con la que han empezado las reuniones informales de Toronto.

Ligera recuperaci¨®n econ¨®mica

No obstante, la mayor parte de los observadores aqu¨ª presentes coincide en resaltar el ligero giro que, incluso en los precavidos informes anuales previos de las dos organizaciones, ha tomado la econom¨ªa mundial en los ¨²ltimos meses. Las expectativas apuntan el inicio de una cierta recuperaci¨®n en los pa¨ªses desarrollados que, eventualmente, arrastrar¨ªa al resto v¨ªa un importante crecimiento del comercio mundial.Con m¨¢s de treinta millones de parados en los pa¨ªses del ¨¢rea de la OCDE (los desarrollados), esta t¨ªmida recuperaci¨®n que se prev¨¦ resultar¨¢ insuficiente para eliminar las tensiones sociales, que se acrecientan a medida que se confirma que el modesto aumento previsto en la actividad econ¨®mica ser¨¢ insuficiente para crear nuevos puestos de trabajo. Este panorama es mucho m¨¢s alarmante en los pa¨ªses en desarrollo, cada vez m¨¢s sumergidos en sus irresolubles problemas de industrializaci¨®n, y a los que el propio presidente del Banco Mundial, el norteamericano A. W. Clausen, ha advertido que sus perspectivas econ¨®micas a corto plazo son a¨²n peores que las de los industrializados.

Esta situaci¨®n es particularmente cr¨ªtica en un limitado grupo de pa¨ªses que, a mitad de camino entre el subdesarrollo y la industrializaci¨®n, hab¨ªan recurrido a un fuerte endeudamiento externo para acabar con la espiral de su creciente empobrecimiento.

El ejemplo mexicano

La explosi¨®n del caso mexicano, donde se ha tenido que recurrir a la nacionalizaci¨®n de los bancos privados para evitar su colapso, ha servido de espoleta de una cadena que, en el curso de esta semana ¨²ltima, ha lanzado el precio del oro por la vieja y casi olvidada senda alcista. La notable subida del precio del metal es s¨®lo un indicio de la necesidad de los inversores de protegerse frente a las p¨¦rdidas que supondr¨ªa para ellos la repetici¨®n en otros pa¨ªses del caso azteca.Fuentes bancarias solventes estiman que la lista de pa¨ªses que se encuentran en parecida situaci¨®n a la de M¨¦xico alcanza la decena. Argentina, Per¨², Zaire son, entre los miembros del FMI, los pa¨ªses con problemas m¨¢s serios. Argentina, por ejemplo, se encuentra renegociando su deuda exterior, que supera, en la actualidad, los 25.000 millones de d¨®lares. Per¨² acaba de ultimar las conversaciones para su segunda renegociaci¨®n en menos de dos a?os. Zaire tiene agotada su capacidad de endeudamiento. Mucho m¨¢s graves son los problemas de los pa¨ªses del Este, como Polonia, que aunque no son miembros del Fondo Monetario, su insolvencia dejar¨ªa en dif¨ªcil situaci¨®n a varios bancos privados de alcance mundial.

En menor escala, aunque sus deudas son en algunos casos astron¨®micas, se encuentran pa¨ªses como Brasil, Venezuela, Chile, Corea del Sur, Filipinas o Costa Rica, por citar algunos ejemplos.

Ante esta situaci¨®n, las acciones que las agencias financiera y bancaria de los representantes de los pa¨ªses presentes en Toronto podr¨ªan adoptar, a corto plazo, se limitan a un ligero incremento de las cuotas que los 146 miembros aportan a las dos instituciones. No parece probable, en este sentido, que la idea apuntada por alg¨²n miembro del staff del FMI para crear un fondo especial de 25.000 millones de d¨®lares para ayudar a la docena de pa¨ªses con serios problemas como los citados vaya a salir adelante. Por el momento.

El incremento de cuotas de los pa¨ªses miembros ha sido, desde hace a?os, una de las aspiraciones m¨¢s importantes de los pa¨ªses en desarrollo o de aqu¨¦llos que ven en este aumento una oportunidad para modificar su peso espec¨ªfico dentro de las dos agencias. Tal es el caso de Espa?a y los pa¨ªses latinoamericanos y, desde la presencia socialista en el Gobierno, de Francia. El presidente Mitterrand ha llegado a proponer, incluso, y as¨ª lo repetir¨¢ su ministro de Econom¨ªa en esta reuni¨®n de Toronto, que simplemente se doblen las cuotas, que actualmente totalizan unos 65.000 millones de d¨®lares. Esta ha sido una reclamaci¨®n hist¨®rica de los pa¨ªses del Tercer Mundo. Con estos recursos adicionales, el FMI estar¨ªa en disposici¨®n para resolver, en sustituci¨®n de los bancos privados, los problemas financieros de los pa¨ªses m¨¢s endeudados. Cada pa¨ªs puede obtener del FMI hasta tres veces el importe de su cuota, en casos extremos.

Pero Estados Unidos, junto al Reino Unido y la Rep¨²blica Federal de Alemania, se ha negado hasta muy recientemente a modificar las cuotas por la v¨ªa de su incremento.

La creaci¨®n, as¨ª, de un fondo especial extraordinario, en la l¨ªnea del que en 1962 permiti¨® al Reino Unido salir de las repetidas crisis de la libra esterlina, se presenta como uno de los problemas a dilucidar en esta reuni¨®n. Su alcance, para ser efectivo, estar¨ªa en torno, seg¨²n algunas fuentes, a los 25.000 millones de d¨®lares, aunque su creaci¨®n efectiva, de acordarse en esta asamblea general, no se materializar¨ªa hasta bien entrado el pr¨®ximo a?o, quiz¨¢ en la pr¨®xima reuni¨®n anual de Washington, a finales de septiembre de 1983.

Posibilidad de colapso

El grupo de los diez paises m¨¢s desarrollados dentro del FMI analiz¨® el viernes, en su reuni¨®n preparatoria, la posibilidad de un colapso del sistema financiero mundial como consecuencia del fuerte endeudamiento de algunos pa¨ªses. Un delegado asistente a la reuni¨®n confes¨® a la Prensa que el grupo hab¨ªa contemplado, por primera vez en su historia, la eventualidad de que se produzca una "cat¨¢strofe" en el funcionamiento del sistema bancario si no se establece alguna asistencia a los pa¨ªses m¨¢s endeudados.Por otro lado, el secretario del Tesoro norteamericano, Donald Reagan, manifest¨® que su pa¨ªs propondr¨¢ la creaci¨®n de un fondo especial por importe de unos 10.000 millones de d¨®lares, sujetos a ampliaci¨®n en caso necesario, para ayudar a los pa¨ªses en desarrollo a equilibrar sus econom¨ªas. La materializaci¨®n de este fondo fue analizada por los diez, que, seg¨²n declaraciones posteriores, apoy¨® la idea.

Sin embargo, la propuesta fue contestada por el grupo de los veinticuatro, que engloba a los pa¨ªses en desarrollo, cuyo primer inter¨¦s es que el FMI acuerde un fuerte incremento -el doble, por lo menos- de las cuotas que los miembros pagan al organismo. Este incremento de cuotas servir¨ªa, seg¨²n el comunicado final del grupo, para asistir a los pa¨ªses m¨¢s endeudados y para evitar lo que el propio comunicado describe como "un seguro colapso del sistema comercial y financiero del mundo".