Estados Unidos se opone al incremento de los recursos del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial
El secretario norteamericano del Tesoro, Donald Regan, sorprendi¨® ayer a la asamblea anual del Fondo Monetario Internacional (FMI) y Banco Mundial al oponerse p¨²blicamente a un incremento sustancial en los recursos de ambos organismos, v¨ªa el aumento de las cuotas que pagan los 146 pa¨ªses miembros. Regan se?al¨® que el incremento estaba "injustificado" y que los problemas de los pa¨ªses con serias necesidades para financiar sus d¨¦ficit deber¨¢n resolverse por otros medios.
Aunque Regan dej¨® abierta la puerta a un compromiso, la firme postura norteamericana contrasta con el acuerdo adoptado dentro del Comit¨¦ Interino del organismo que, tras su reuni¨®n previa a la asamblea anual, hab¨ªa decidido proponer un incremento sustancial de las cuotas con el fin de disponer de recursos para ayudar a los pa¨ªses con graves problemas financieros a resolver moment¨¢neamente sus desequilibrios de balanza de pagos.En una conferencia de Prensa, dos horas antes de que el primer ministro canadiense, Pierre Trudeau, inaugurara formalmente la asamblea anual del FMI y Banco Mundial, Regan se?al¨® que el incremento de las cuotas colocar¨ªa los recursos del fondo por encima de los 100.000 millones de d¨®lares, frente a los 67.000 millones actuales. "Esta cantidad es excesiva para los d¨¦ficit combinados de todos los pa¨ªses miembros. Yo me pregunto qu¨¦ har¨¢ el FMI con todos estos recursos", manifest¨®.
Asimismo, el secretario del Tesoro norteamericano, cuyo pa¨ªs dispone de m¨¢s de un tercio de los votos en ambas instituciones, manifest¨® que su propuesta para crear un fondo especial de asistencia extraordinaria, rechazada impl¨ªcitamente por el Comit¨¦ Interino en su reuni¨®n del pasado s¨¢bado, deber¨ªa ser considerada m¨¢s detenidamente. Estados Unidos desea que este fondo no supere los 10.000 millones de d¨®lares.
Divisi¨®n en la asamblea
La firme posici¨®n norteamericana deja a la asamblea anual del FMI fuertemente dividida y hace suponer que los pa¨ªses que se encuentran esperando remedios urgentes por parte de este organismo no tendr¨¢n soluciones r¨¢pidas ni inmediatas. La lista de estos pa¨ªses comienza en M¨¦xico y llega hasta Argentina, en Am¨¦rica Latina, e incluye a varios pa¨ªses africanos y del bloque socialista. La mayor¨ªa de ellos, como Argentina, Per¨², Sudan o Corea del Sur negocia estos d¨ªas en la propia ciudad canadiense, aprovechando la presencia de toda la banca internacional, su en¨¦sima renegociaci¨®n de deuda exterior.La divisi¨®n en la asamblea general del FMI no s¨®lo se basa en c¨®mo resolver la crisis financiera que atraviesan algunos pa¨ªses, sino tambi¨¦n en determinar una prognosis un¨¢nime. Estados Unidos mantiene impl¨ªcitamente que la crisis no es tan seria y que tiene soluciones f¨¢ciles dentro del actual sistema. Algunos pa¨ªses europeos, con el tercer mundo a su lomo, opinan que el momento es grave y que puede derivar hacia un colapso global del sistema si se repite en cadena el caso mexicano. M¨¦xico admiti¨® hace un mes su incapacidad para pagar sus compromisos externos, y tras varias devaluaciones del peso nacionaliz¨® toda la banca privada. Ahora gestiona un cr¨¦dito extraordinario del propio FMI por un importe que puede rondar los 10.000 millones de d¨®lares.
Seg¨²n la tesis de Regan, el incremento de los recursos del FMI estimular¨ªa la inflaci¨®n mundial y permitir¨ªa a los pa¨ªses que reciben ayuda a trav¨¦s de este organismo seguir ignorando el ¨²nico remedio que tienen: la adopci¨®n de serios programas de austeridad y disciplina econ¨®mica.
Aunque ¨¦ste tambi¨¦n fue el mensaje que los pa¨ªses en bancarrota t¨¦cnica recibieron del Comit¨¦ Interino del FMI (el comit¨¦ interino elabora la pol¨ªtica del organismo), la mayor¨ªa de pa¨ªses piensa que, ante la gravedad de la situaci¨®n, alg¨²n mecanismo extraordinario de asistencia deber¨ªa ser creado y, mientras tanto, el octavo incremento de cuotas previsto para 1983, deber¨ªa adelantarse a la reuni¨®n de primavera del FMI, que se celebrar¨¢ en Washington el pr¨®ximo abril.
Responsabilidad de la banca
Curiosamente, la tesis del Comit¨¦ Interino recibe el apoyo expl¨ªcito de la mayor parte de la banca privada y comercial internacional, cuyos riesgos con los pa¨ªses en desarrollo no petroleros asciende a unos 450.000 millones de d¨®lares. "Si el FMI y Estados Unidos no hacen algo, nos vamos todos a la tumba", declar¨® a este peri¨®dico un banquero familiarizado con las discusiones.Los bancos privados, sin embargo, recibieron ayer un serio tir¨®n de orejas por parte del director gerente del FMI, Jacques de Larosi¨¦re. El m¨¢ximo representante del FMI manifest¨® que la banca privada era responsable en gran parte de la cr¨ªtica situaci¨®n actual de algunos pa¨ªses, al rechazar, en aras de defender sus posiciones financieras, algunas peticiones de asistencia crediticia por parte de los pa¨ªses m¨¢s endeudados.
"Al actuar indiscriminadamente sin tener en cuenta las circunstancias reales de los pa¨ªses, la banca privada est¨¢ precipitando algunas naciones a la bancarrota", declar¨® De Larosi¨¦re en su discurso ante la asamblea del organismo mundial.
Incremento moderado
Dada la fuerte divisi¨®n entre Estados Unidos y el resto de los pa¨ªses, el centro del problema se cifra ahora en determinar cu¨¢l va a ser el incremento porcentual de las cuotas que los pa¨ªses miembros pagan al organismo. La postura de Estados Unidos es que el aumento no deber¨ªa superar los 10.000 millones de d¨®lares, es decir, apenas un 12% de las cuotas actuales. Otros pa¨ªses, con el apoyo del Tercer Mundo en bloque, piden incrementos m¨ªnimos del 50%, incluso algunos llegan a reclamar hasta un 75% y un 100%.
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