La Generalitat subvencionar¨¢ la edici¨®n de libros en catal¨¢n

La Generalitat de Catalu?a subvencionar¨¢ la edici¨®n de libros en lengua catalana. La subvenci¨®n tendr¨¢ car¨¢cter gen¨¦rico y se llevar¨¢ a cabo mediante el compromiso de compra de un determinado n¨²mero de ejemplares de cada t¨ªtulo. Estos ejemplares se distribuir¨¢n sistem¨¢ticamente a la red de bibliotecas de la Generalitat y a otras bibliotecas, incluso a algunas extranjeras.El anuncio de esta modalidad de subvenci¨®n fue hecho ayer p¨²blico en Barcelona por el consejero de Cultura del Gobierno aut¨®nomo catal¨¢n, Max Cahner.

El consejero justific¨® la subvenci¨®n como un elemento necesario para paliar la desventaja en que se encuentra el libro catal¨¢n en relaci¨®n al escrito en castellano. "La ayuda a la edici¨®n en catal¨¢n", manifest¨® Cahner, "es un hecho de justicia, porque las ediciones en catal¨¢n han sido hist¨®ricamente puntas de lanza de la defensa de la cultura catalana. El soporte gen¨¦rico que se otorgar¨¢ es una ayuda al mayor coste que representa editar en catal¨¢n".

Las empresas editoriales que quieran optar a la ayuda deber¨¢n solicitarlo al departamento de Cultura. Una vez que el departamento dictamine que el libro en cuesti¨®n re¨²ne las caracter¨ªsticas para que reciban la ayuda -que no sea una edici¨®n de lujo, o de bibli¨®filo... -la Generalitat se compromete a comprar un n¨²mero determinado de ejemplares. Este pedido ser¨¢ de trescientos ejemplares para las obras de precio de venta al p¨²blico inferior a 2.000 pesetas y de doscientos ejemplares para aquellos con precio de venta entre 2.001 y 6.000 pesetas.

Reducci¨®n de precio

Seg¨²n Max Cahner, el efecto de esta ayuda institucional a la edici¨®n en catal¨¢n ser¨¢ triple. Por un lado, reducir¨¢ el precio de venta al p¨²blico del libro en catal¨¢n, englosar¨¢ el fondo bibliogr¨¢fico de numerosas bibliotecas y estimular¨¢ a los editores en catal¨¢n para que ampl¨ªen la producci¨®n en este idioma.El sistema, salvando las distancias y algunos aspectos concretos, es similar al empleado por las administraciones de Noruega y Suecia para proteger la edici¨®n en las lenguas de estos dos pa¨ªses, amenazada por la masiva presencia y a precios asequibles de libros en ingl¨¦s.