Las cajas de ahorro prestan dinero barato a la banca extranjera
Las cajas de ahorro, por su propia estructura que les obliga a tener un elevado porcentaje de sus fondos en tesorer¨ªa, y la banca extranjera, que no tiene posibilidad de captar pasivo para sus operaciones a largo plazo en otro mercado que el interbancario, lo que les encarece notablemente su coste, est¨¢n empezando a formalizar acuerdos operativos que presentan ventajas para las dos partes. Las cajas prestan su dinero a las instituciones extranjeras y ¨¦stas, a su vez, lo ponen en circulaci¨®n participando en las operaciones a largo plazo que necesitan las empresas espa?olas. Los tipos de inter¨¦s que se fijan en estas operaciones est¨¢n por debajo de los del mercado.Hasta ahora las cajas de ahorro ten¨ªan que conformarse con colocar sus fondos de tesorer¨ªa bien en otras instituciones crediticias, que les reportaban escasas remuneraciones para los vol¨²menes de que disponen, bien en el mercado interbancario, corriendo el peligro de que la evoluci¨®n de los tipos de inter¨¦s en este ¨²ltimo hiciera poco rentables estas operaciones; la tercera posibilidad consiste en seguir prestando dinero al Estado, a trav¨¦s de la suscripci¨®n de certificados de regulaci¨®n monetaria o de la compra de pagar¨¦s del Tesoro o de t¨ªtulos de deuda p¨²blica a medio plazo. En todos estos casos la rentabilidad vendr¨ªa de la mano de los tipos fijados por las autoridades econ¨®micas, que en principio son siempre m¨¢s bajos que los que fija el mercado.
El aumento del d¨¦ficit del sector p¨²blico y los altos tipos de inter¨¦s practicados en los mercados internacionales hizo que el precio del dinero se pusiera en el mercado nacional a unos niveles pr¨¢cticamente prohibitivos para todos. La banca extranjera, que tiene que prestar a un tipo por encima del interbancario para justificar su negocio, vio c¨®mo en mayo descend¨ªa de forma clara su inversi¨®n en Espa?a al no ampliar sus clientes y porque algunos otros prefer¨ªan buscar financiaci¨®n privilegiada en sus banqueros tradicionales para anular p¨®lizas de cr¨¦ditos concertadas con la banca extranjera. Resultaba m¨¢s barato hacerlo as¨ª y eligieron ese camino. Con la pausa introducida a nivel internacional y la rebaja en los tipos de inter¨¦s del ¨¢rea del d¨®lar, las expectativas de mayor inversi¨®n han vuelto a brotar, aunque la banca extranjera intenta buscar nuevos caminos para no depender tanto en su pasivo del propio mercado interbancario.
A por el dinero de las cajas
Dentro de estos intentos parece natural que la banca extranjera se haya fijado en los fondos que tienen las cajas de ahorro. Por un lado, estas instituciones se ven obligadas a mantener unos niveles de tesorer¨ªa m¨¢s altos que los de los bancos comerciales normales. Adem¨¢s, tienen que fijarse mucho m¨¢s en la seguridad de sus inversiones que los bancos, ya que no tienen una obligaci¨®n tan perentoria de obtener ejercicios muy brillantes. Basta con asegurar la cuenta de resultados y mantener un nivel alto de sanidad en sus activos. La banca extranjera parece bastante s¨®lida y sin problemas de solvencia.Las f¨®rmulas que se manejan en la actualidad, y que ya han cristalizado en algunas operaciones, son varias; algunas cajas de ahorro quieren empezar a participar en el negocio internacional. La normativa de expansi¨®n de estas instituciones no les permite abrir sucursales en los principales centros financieros internacionales y, por tanto, no tienen posibilidades ni de captar dinero directamente ni de que los bancos extranjeros se lo presten en condiciones que hagan rentables posteriores operaciones. Operaciones que suelen tener como destinatarios finales a empresas o instituciones espa?olas que salen al exterior en busca de divisas con las que financiar parte de sus inversiones.
La referencia de los pagar¨¦s
En este caso un banco, extranjero y una caja de ahorro llegan a acuerdos mediante los cuales la caja consigue l¨ªneas de financiaci¨®n en divisas a cambio de que presten a su vez en pesetas a los bancos extranjeros cuando ¨¦stos lo necesiten. Las comisiones de no disponibilidad de estas l¨ªneas de cr¨¦dito y los tipos de inter¨¦s fijados para el momento en el que la banca extranjera utilice esos fondos, representa una buena rentabilidad para los fondos de tesorer¨ªa de las cajas. Todo ello sin contar con las puertas que se le abren a las cajas al tener l¨ªneas de divisas que pueden utilizar en cr¨¦ditos a empresas espa?olas.En otros casos, el acuerdo al que se llega es m¨¢s simple: la caja de ahorros abre una l¨ªnea de cr¨¦dito a un banco extranjero -hace pocas semanas se ha llegado a un acuerdo de este tipo por valor de 5.000 millones de pesetas entre una caja catalana y un banco estadounidense- a largo plazo (en torno a cinco a?os de amortizaci¨®n) y a un tipo de inter¨¦s que est¨¢ por debajo del precio del dinero en el mercado interbancario. El tema que se discute en todas estas operaciones es el precio que las cajas ponen a los bancos extranjeros, ya que en estas transacciones la banca exterior tiene que satisfacer el correspondiente impuesto sobre el tr¨¢fico de empresas (ITE). Si el precio que las cajas les ponen es el del interbancario en cada momento, la banca extranjera no podr¨ªa operar, ya que los diferenciales que ellos aplican cuando prestan su dinero se acercan mucho al ITE que tienen que pagar.
Esta l¨ªnea de cr¨¦dito supone para las cajas un seguro de colocaci¨®n de sus excedentes de tesorer¨ªa con una retribuci¨®n, que consideran suficiente, para los tiempos en que no se utilice ese dinero. Las modalidades que se est¨¢n aplicando son varias: el tipo de inter¨¦s puede ser fijo o variable; el marco de referencia, en lugar de ser el precio del dinero en el mercado interbancario, empieza a ser el de las emisiones p¨²blicas: certificados de regulaci¨®n monetaria, o los distintos tipos de deuda.
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