Abierta en Madrid la exposici¨®n colectiva de los 5 premios nacionales de artistas pl¨¢sticas

Los cinco artistas que merecieron los ¨²ltimos Premios Nacionales de Artes Pl¨¢sticas, Manuel Angeles Ortiz, Joan Hern¨¢ndez Pijuan, Andreu Alfaro, Jos¨¦ Hern¨¢ndez y Luis Gordillo, inauguraron ayer la exposici¨®n conjunta de una selecci¨®n de su obra, organizada por la Direcci¨®n General de Bellas Artes en el Museo de Arte Contempor¨¢neo. El subdirector general del mencionado departamento les hizo entrega de sendas medallas conmemorativas del premio, en un acto breve con el que se abr¨ªa al p¨²blico la exposici¨®n.

"Ahora en Espa?a se respira tanta libertad como en cualquier sitio". El veterano de la exposici¨®n inaugurada ayer, Manuel Angeles Ortiz, presume de tener 88 a?os y seguir pintando. Aguanta a pie firme la espera de todo el mundo en el patio del museo, bajo el viento estepario, esperando un cuadro que falta. Al fin llega. Y mientras se realiza el brev¨ªsimo acto oficial de inauguraci¨®n, se oyen los martillazos que colocan en su sitio una escena de Jos¨¦ Hern¨¢ndez.La pintura de Manuel Angeles Ort¨ªz es 'Tresca y l¨ªrica", seg¨²n Luis Gordillo, que cierra el paseo circular por los cuatro pintores: en una lectura as¨ª, por el orden que la propia orientaci¨®n f¨ªsica de la exposici¨®n colectiva va imponiendo parecer¨ªa falso que las vanguar dias han muerto, porque, oscura mente, lo que empieza con la obra reciente de un hombre de las vanguardias hist¨®ricas -"yo pinto de verdad desde los ocho a?os", dice Manuel Angeles Ortiz, "y me fui de Espa?a para poder hacer van guardia"- termina en Gordillo que est¨¢ resultando -"y es lo que m¨¢s me apasiona del trabajo art¨ªstico"- el cabeza de fila de un grupo de pintores j¨®venes, que se considera a s¨ª mismo "muy vanguardista". Despu¨¦s se ve el ¨²nico escultor, Andreu Alfaro: "La escultura es la cenicienta de las artes pl¨¢sticas", dice. Alfaro asegura que "otros ven en mi eso que no recomiendo a nadie, la originalidad".

En medio de este acto social, Manuel Angeles Ortiz aparece cansado pero optimista. "Estoy contento porque mi trabajo de los ¨²ltimos a?os sigue pegando. Esas impresiones de muchos cuadros dentro de un solo cuadro... Y me gusta esta exposici¨®n: tiene algo de fresco, de estar limpio, que antes no se ve¨ªa en Espa?a". "Yo me fui de Granada porque me asfixiaba. Llegu¨¦ a Par¨ªs y ah¨ª estaba el surrealismo... entonces empec¨¦ yo. Ahora los pintores espa?oles no tienen que irse por obligaci¨®n, como nosotros". Nosotros son los hombres y mujeres de la llamada Escuela de Par¨ªs.

Inmediatamente cuelgan los cuadros fundamentalmente azules de Hern¨¢ndez Pijuan que, refiri¨¦ndose a su vecino de espacio dice: "Ellos son los que empezaron en nuestro pa¨ªs la batalla de la modernidad. Son el pedestal en que nos apoyamos nosotros, m¨¢s j¨®venes pero tampoco tanto, aunque ya los problemas de la vanguardia nos interesen menos". Define su propia oferta,est¨¦tica como "algo muy simple, muy visual, en que el tiempo de visi¨®n cuente: si el tiempo de realizaci¨®n es lento, como en mi caso, el de lectura tambi¨¦n". Considera que su pintura es "muy sensual, aunque no se puede separar la sensualidad del proceso intelectual en que de la primera impresi¨®n visual se va construyendo el cuadro", y se siente c¨®modo "en la cultura mediterr¨¢nea".

Jos¨¦ Hern¨¢ndez es, de alguna manera, la gran diferencia, y cuando se le hace notar se congratula de que "sea tan notable la diversidad de los estilos aqu¨ª presentes: eso significa que es verdad que los criterios empiezan a ser amplios". La pintura de Jos¨¦ Hernandez, tan cargada de contenidos, pertenece a la modernidad, como todo lo que hay en esta sala, y ¨¦l lo explica: "La modernidad no son las formas, son las ideas. Lo dem¨¢s es una cuesti¨®n de t¨¦cnica". Y sobre los contenidos dice: "Me asociaron la cr¨ªtica del franquismo en descomposici¨®n, pero a lo mejor me estoy refiriendo, y entonces tambi¨¦n, a algo m¨¢s general".