Final gris de la XXXIV Feria internacional del Libro de Francfort
El 'Vaticano autoriza la reproducci¨®n en facs¨ªmil de cien c¨®dices in¨¦ditos
La Feria del Libro de Franctort, que este a?o se dirigi¨® esencialmente al libro de religi¨®n, tuvo un final gris, animado por la noticia de que el Vaticano autoriza la reproducci¨®n en facs¨ªmil de cien c¨®dices in¨¦ditos que se guardan en sus bibliotecas y que tienen un incalculable valor. La distribuci¨®n de estos c¨®dices est¨¢ garantizada en Espa?a. Por otra parte, la propia feria ha sido una caja de resonancia excepcional de los numerosos problemas que tiene el mundo editorial.
Con el firme convencimiento de que los dorados a?os setenta han pasado definitivamente a, la historia del negocio editorial, ha concluido en Francfort la XXXIV Feria Internacional del Libro. El discreto optimismo que los organizadores quer¨ªan transmitir se debe m¨¢s a la manifiesta voluntad de adaptarse al cambio que a los resultados contantes y sonantes de estos d¨ªas. El libro de bolsillo y una mejora cualitativa de la oferta editorial, son los caminos que permitir¨¢n sobrevivir a las casas editoriales.Lo que tambi¨¦n resulta evidente es que ser¨¢n muchas las editoriales que no podr¨¢n operar el cambio. Por ejemplo, las que han montado su reciente triunfo en pocos y fortuitos t¨ªtulos de ¨¦xito, pero que carecen de un p¨²blico heterog¨¦neo y fiel en base a una calidad de conjunto. Esta circunstancia explica el pesimismo de muchas peque?as y medianas editoriales espa?olas, que han vuelto de Francfort sin haber vendido un derecho de autor y sin traerse en firme una sola opci¨®n extranjera.
Crisis general
S¨ªntoma de la crisis general es el comentario de un conocido editor espa?ol: "Ahora te puedes permitir el lujo de regatear a la mism¨ªsima Presse Universitaire de France. Y si te piden mil francos de adelanto por un t¨ªtulo, se ir¨¢n contentos si les ofreces trescientos". En Francfort este a?o se cotizaba m¨¢s una buena idea editorial que un t¨ªtulo ventajoso. Por eso estaba de enhorabuena un editor berlin¨¦s, el Berliner Kunstbuchverlag, que se ha dedicado a editar cat¨¢logos explicativos de los museos del pa¨ªs para uso de los visitantes.La operaci¨®n m¨¢s espectacu lar de esta feria ha sido, posiblemente, la edici¨®n multinacional en facs¨ªmil de los cien c¨®dices m¨¢s importantes de la Biblioteca Vaticana. Para hacerse una idea del asunto basta tener en cuenta que el precio de venta al p¨²blico de un ejemplar del Codex Benedictus (el m¨¢s antiguo de los que ser¨¢n publicados y que data del a?o 1058) costar¨¢ en Espa?a 685.000 pesetas. La tirada de este c¨®dice, como la de los restantes, ser¨¢ limitada en todo el mundo a seiscientos, de los que cien est¨¢n destinados a Espa?a. La sucripci¨®n se cierra el d¨ªa de la pr¨®xima Nochevieja.
La iniciativa est¨¢ dirigida por el prefecto de la Biblioteca Vaticana, Alfonso Mar¨ªa Stickler, y es la potente, editorial alemana Belser la que se encargar¨¢ fundamentalmente de la financiaci¨®n.
Sorprendentemente, no es unade las grandes editoriales espa?olas la que por parte espa?ola interviene en el consorcio multinacional para la reproducci¨®n y venta de estos facs¨ªmiles, sino la modesta editorial Encuentros que dirige Jos¨¦ Miguel Oriol. Seg¨²n explica el director de Encuentros, la propuesta les vino de manos de la editorial italiana Jaca Book, con la que se encuentran ideol¨®gicamente hermanados.
Jaca Book es la editorial del movimiento italiano Comuni¨® e Liberazione, pol¨¦mica agrupaci¨®n religioso-pol¨ªtica -ligada a la Democracia Cristiana- en la que Juan Pablo II tiene puestas sus complacencias.
"Nosotros no estamos de meros vendedores en esta operaci¨®n", explica Jos¨¦ Miguel Oriol, sino que estainos interviniendo en la selecci¨®n de los c¨®dices". Hay que tener en cuenta que la Biblioteca Vaticana posee 70.000 manuscritos, de los que m¨¢s de 10.000 son aut¨®grafos y 8.000 incunables. Las reproducciones ser¨¢n realizadas en tama?o natural y los dorados reproducen exactamente el original, hasta la imitaci¨®n de la p¨¢tina y del cincelado.
Con esta operaci¨®n el Vaticano busca financiaci¨®n para su biblioteca.
"Pero, sobre todo", a?ade el director de Encuentros, "el Vaticano se ha tomado en serio la recomendaci¨®n de la UNESCO sobre la accesibilidad de los c¨®dices, de tal manera que ese patrimonio documental est¨¦ al alcance de todo el mundo". A primeros del a?o que viene, el comprador podr¨¢ tener en sus manos el Mapamundi, de Andreas Walsperger, de 1448; luego vendr¨¢n el Codex Benedictus; la Cosmograf¨ªa, de Claudio Ptolomeo; la Comedia, de Dante, con las ilustraciones de Sandro Boticelli, etc¨¦tera, hasta cien c¨®dices, que se ir¨¢n editando a lo largo de veinte a?os.
Agitaci¨®n en el recinto
Al tiempo que los editores se agitaban en los recintos de la feria en torno al t¨ªtulo salvador que pudiera dar un respiro al maltrecho negocio, el semanario alem¨¢n Die Zeit ten¨ªa la ocurrencia de presentar, en su edici¨®n del domingo, la lista de los cien libros no literarios m¨¢s fundamentales de la historia humana. La selecci¨®n la hab¨ªan realizado, tras arduos estudios, ocho cient¨ªficos y dos redactores del semanario.Ah¨ª est¨¢n los fil¨®sofos de siempre, desde Arist¨®teles a Wittgenstein, sin que falte Nietzsche cuya selecci¨®n result¨® pol¨¦mica; una buena representaci¨®n de la escuela de Francfort, con Habermas incluido; buen surtido marxista, del que no falta Trotski; los te¨®logos protestantes Barth y Lutero, junto a Tom¨¢s de Aquino y Teilhard de Chardin por parte cat¨®lica.
Honor espa?ol
Espa?a salva su honor con La rebeli¨®n de las masas, de Ortega y Gasset (quien de esta manera responde a sus cr¨ªticos que de ¨¦l dec¨ªan que "era 'primero' de Espa?a y 'quinto' de Alemania"), a no ser que contemos entre nuestros compatriotas a Benito de Espinoza, ilustre exiliado por pertenecer a la juder¨ªa.
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