Dificultades para esclarecer las causas de la explosi¨®n que caus¨® cuatro muertos

Una manipulaci¨®n indebida o alg¨²n fallo de la m¨¢quina encartuchadora son las hip¨®tesis que se barajaban ayer con m¨¢s insistencia como posibles causas de la explosi¨®n de Goma 2 que provoc¨®, el d¨ªa anterior, Ia muerte de cuatro personas en uno de los talleres de la f¨¢brica de Explosivos Ri¨® Tinto situada en La Manjoya, a cinco kil¨®metros de Oviedo. El director de la empresa ha asegurado que la factor¨ªa cumple las normas de seguridad

Federico Olascoaga, director de la f¨¢brica, manifest¨® ayer a este peri¨®dico su desconfianza en poder llegar alg¨²n d¨ªa a descubrir el aut¨¦ntico origen de la explosi¨®n, por el mismo motivo que siguen a¨²n sin aclararse las causas de otros accidentes mortales ocurridos en esta misma factor¨ªa.La explosi¨®n produjo un profundo cr¨¢ter en el suelo del monte de la Zorera, donde se encuentran los talleres de encartuchado de Goma 2; revent¨® violentamente el muro de hormig¨®n protector, que alcanz¨® a Laudefino Alvarez, el ¨²nico fallecido que no trabajaba en el citado taller, y despidi¨® por los aires la techumbre de cer¨¢mica, que llevaba tierra encima (con este sistema de protecci¨®n se trata de evitar la explosi¨®n por simpat¨ªa de otros talleres y polvorines). Los cuerpos de los tres encartuchadores -un hombre y dos mujeres- quedaron absolutamente destrozados e irreconocibles. Algunos peque?os trozos de los cad¨¢veres fueron encontrados diseminados por el monte.

El taller de encartuchado, de unas dimensiones reducidas (cinco por doce metros), ten¨ªa en su interior en el momento del tr¨¢gico accidente 150 kilogramos de Goma 2, seg¨²n el director de la f¨¢brica. Los tres trabajadores realizaban las labores normales de encartuchado, consistentes en introducir la pasta gelatinosa de Goma 2 en una m¨¢quina, cuyas h¨¦lices fuerzan la masa hasta sacarla por unos orificios que desembocan en los cartuchos, que luego son transportados en carretillos por un pasillo hasta los polvorines de almacenamiento.

Esta explosi¨®n provoc¨® nuevas protestas de un vecino de La Manjoy¨¢, que viene denunciando desde hace tiempo la proximidad de los polvorines a los n¨²cleos de poblaci¨®n. El director de la factor¨ªa asegur¨® que todas las instalaciones cumplen las normas de seguridad exigidas y que el almacenado total es de unas cien toneladas de Goma.

La factor¨ªa de La Manjoya, que produce unas 4.500 toneladas anuales de material explosivo para su uso en grandes voladuras, atraviesa un proceso de progresiva reducci¨®n de plantilla, que pas¨® de 812 trabajadores en 1959 a poco m¨¢s de cien en la actualidad. Los empleados, que temen ser trasladados a Burgos, comentaban ayer preocupados la posibilidad de que este nuevo accidente mortal contribuya a limitar a¨²n m¨¢s la actividad de la f¨¢brica.

Fuertes muros

Los talleres de Explosivos, construidos con fuertes muros de hormig¨®n, est¨¢n separados por una distancia de unos veinte metros, para evitar que la explosi¨®n de uno de ellos pueda afectar a los dem¨¢s. El director de la f¨¢brica de La Manjoya, que se manifestaba con evidente inseguridad al explicar las posibles causas de la tragedia de anteayer, similar en sus consecuencias a las ocurridas en ocasiones, anteriores, pon¨ªa como ejemplo del perfecto estado de seguridad de las insta laciones, el hecho de que sola mente resultara afectado el taller donde alguna anom¨¢l¨ªa, cuya na turaleza perman- ecer¨¢ una vez m¨¢s sin descubrir, provoc¨® la explosi¨®n.El Papa Juan Pablo II rez¨® anteayer por los fallecidos en el accidente de La Manjoya, y los Reyes de Espa?a enviaron un telegrama de condolencia a los familiares de los fallecidos, a trav¨¦s del Gobiemo Civil de Oviedo.