Leopoldo Calvo Sotelo se despidi¨® de sus ministros con una cena privada en el palacio de la Moncloa

Con una cena privada, ofrecida en el sal¨®n de las columnas del palacio de la Moncloa, el presidente del Gobierno, Leopoldo Calvo Sotelo, se despidi¨® de los ministros que le acompa?aron en sus Gobiernos desde que tornara posesi¨®n a finales de febrero pasado. El ¨¢gape, precedido por un vino espa?ol, fue informal, sin discursos, ofrecimientos o regalos. Asistieron las esposas de los ministros. El tema principal de la conversaci¨®n fue el futuro de los ministros, s¨®lo cinco de los cuales -los a¨²n en funciones P¨ªo Cabanillas y Luis Ortiz y Rodolfo Mart¨ªn Villa, Jaime Lamo de Espinosa y Jes¨²s Sancho Rof- consiguieron acta de diputado en las elecciones del pasado 28 de octubre. Calvo Sotelo grab¨® ayer un mensaje de despedida que ser¨¢ emitido hoy por RTVE.

El Gobierno se despidi¨® con un nuevo gesto inelegante: No permiti¨® la entrada de ning¨²n fot¨®grafo a la reuni¨®n, por decisi¨®n personal del presidente Calvo Sotelo, y as¨ª priv¨® a la historia de esta ¨²ltima cena impresa, quiz¨¢ para que no se sepa d¨®nde se sent¨® el judas si es que lo hubo. El a¨²n titular del Consejo de Ministros presidente que es un hombre que ha reconocido varias veces en privado que su fracaso se debe principalmente a que desde los primeros meses perdi¨® la batalla de la informaci¨®n, se despidi¨® as¨ª con toda coherencia.El consuelo de un ministro cesado, aunque sea por razones electorales, a veces se encuentra en unas merecidas vacaciones. Anoche, hasta el presidente suspir¨® por el viaje de dos meses que ya le ha prometido a su mujer, Pilar Ib¨¢nez, para despu¨¦s de la toma de posesi¨®n del Gabinete de Felipe Gonz¨¢lez y tras resolver los asuntos m¨¢s urgentes como ex. Para ello Leopoldo Calvo Sotelo ha debido de alquilar un despacho en la calle de Alcal¨¢, donde su secretaria, Lucila, pueda atender las llamadas y contestar las cartas sin necesidad de acudir al domicilio de los Calvo Sotelo en Somosaguas.

El presidente a¨²n en funciones no sabe a¨²n donde ir¨¢ de vacaciones. S¨ª tiene claro que empezar¨¢ o terminar¨¢ en su residencia de Ribadeo y que hasta la vuelta no desvelar¨¢ su futuro destino, porque necesita estudiar bien las varias posibilidades que tiene, alguna ofrecida desde meses antes del presentido descalabro electoral del partido centrista.

Entre las c¨¢tedras universitarias, los bufetes de abogado (buenas intenciones de un exministro que no siempre se cumplen) y los puestos en la Administraci¨®n del Estado se situar¨¢ el retiro de los ministros despu¨¦s de la descomprensi¨®n vacacional. Hasta los m¨¢s veteranos, profesionales del coche oficial algunos de ellos, han aceptado de buen grado el pase a la vida civil.

Juan Antonio Garc¨ªa Diez (vicepresidente econ¨®mico) ayer ten¨ªa claras dos cosas: ni se reintegrar¨¢ a Renfe, donde es funcionario, ni al Banco Exterior de Espa?a. Puede volver a trabajar como t¨¦cnico comercial del Estado e incluso integrarse en el Consejo Superior de Comercio, aunque, como pudo saber EL PAIS, lleva varios d¨ªas estudiando la oferta de uno de los siete grandes bancos del pa¨ªs.

Jos¨¦ Pedro P¨¦rez-Llorca (Exteriores), ministro tres veces a sus 42 a?os, uno de los seis padres de la Constituci¨®n, abrir¨¢ un bufete de abogado en Madrid, sin precisar cu¨¢ndo, d¨®nde ni con quien, aunque sobre temas econ¨®micos y fiscales. Le gustar¨ªa con Jaime Garc¨ªa A?overos (Hacienda), el ministro m¨¢s veterano, con cincuenta a?os. Pero A?overos tiene firmemente decidido volver a Sevilla, donde vive desde 1961 en que gan¨® la c¨¢tedra de Hacienda P¨²blica, la ciudad a la que se siente m¨¢s identificado, aunque naci¨® en Teruel. Desde hace veinte a?os mantiene casa en la ciudad de la Giralda y su familia ha vivido all¨ª pr¨¢cticamente todos estos a?os. A?overos tuvo que conformarse con los fines de semana que le dejaron libre las ocupaciones del cargo y del Parlamento.

P¨ªo Cabanillas (Justicia), 59 a?os, se dedicar¨¢ desde ma?ana al Congreso de los Diputados, como Luis Ortiz (Obras P¨²blicas), en plan full time. Lo exiguo del Grupo Parlamentario de UCD -doce diputados, y eso si no hay fugas hacia Alianza Popular- tocar¨¢ ahora a m¨¢s de dos comisiones cada uno. De martes a viernes no podr¨¢n hacer otra cosa. Pero P¨ªo prefiri¨® no contarlo personalmente. Se escondi¨® h¨¢bilmente ayer. No estuvo en ninguno de sus tel¨¦fonos habituales ni contact¨® con su secretar¨ªa en toda la jornada, cosa que resulta extra?a en un ministro, aunque sea en funciones.

Alberto Oliart (Defensa), 54 a?os, prefiri¨® no hablar con nadie. Tiene su motivo. "No tiene decidido nada. Desde la muerte de su hijo (en un accidente de tr¨¢fico hace dos semanas) est¨¢ fuertemente afectado", manifest¨® su secretario personal en el Cuartel General del Aire, donde tiene su despacho. "No ha concedido ninguna entrevista y no lo har¨¢".

El ministro con mejor imagen

Juan Jos¨¦ Ros¨®n (Interior), cincuenta a?os, el hombre con mejor imagen, es quien m¨¢s claro tiene su porvenir. Se aparta por completo de la pol¨ªtica, quiz¨¢ para poder volver m¨¢s adelante en mejores condiciones. Tras unas breves vacaciones en Alicante, retornar¨¢ a la presidencia de la empresa Sintel -que act¨²a como filial de Telef¨®nica-, empresa que fundara y que ya dirigiera antes de ser gobernador civil de Madrid en 1976.Luis Ortiz, cincuenta a?os, intentar¨¢ compaginar su trabajo en el Congreso y su presidencia de UCD de Zamora con su vuelta al bufete especializado en temas de asesor¨ªa fiscal, que comparte con Miguel Domenech, con quien adem¨¢s est¨¢ emparentado pol¨ªticamente. "Ya es bastante, creo yo", dijo ayer Ortiz. "A ver si puedo con todo". Federico Mayor Zaragoza (Educaci¨®n), 48 a?os, volver¨¢ su c¨¢tedra de Bioqu¨ªmica de la Universidad Aut¨®noma de Madrid y a su investigaci¨®n en el Instituto de Biolog¨ªa Molecular. Tambi¨¦n participar¨¢, desde la capital de Espa?a, en tareas de la Unesco, de la que fue director general adjunto y hoy es consejero internacional.

Santiago Rodr¨ªguez Miranda (Trabajo y Seguridad Social), 42 a?os, abogado del Estado, es uno de los hasta ahora indecisos. Seg¨²n Efe puede incluso pedir su ingreso en el PSOE "caso de confirmarse una pol¨ªtica socialdem¨®crata por parte del nuevo equipo". Estudia abrir un bufete, aunque lo dice con poca convicci¨®n.

Ignacio Bay¨®n (Industria), 37 a?os, segundo ministro m¨¢s joven despu¨¦s de Mat¨ªas Rodr¨ªguez Inciarte (Presidencia) con 34 a?os, tambi¨¦n indeciso, pedir¨¢ su reingreso en Renfe, de donde es funcionario (letrado) y fue presidente, como primer paso. Tambi¨¦n pedir¨¢ volver como letrado de las Cortes.

Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa Ferrero (Agricultura), 48 a?os, pasa tambi¨¦n a una empresa privada relacionada precisamente con la agricultura. Luis G¨¢mir (Transportes), tres veces ministro a sus cuarenta a?os, vuelve a su c¨¢tedra de Pol¨ªtica Econ¨®mica de la Universidad Complutense de Madrid y tiene en proyecto crear una fundaci¨®n de estudios pol¨ªticos y econ¨®micos con capital de particulares, ocupaciones que puede simultanear con su dedicaci¨®n a la empresa privada.

Manuel N¨²?ez (Sanidad y Consumo), 49 a?os, se incorporar¨¢ a la Administraci¨®n como T¨¦cnico de Administraci¨®n Central (TAC) en el Ministerio de Educaci¨®n. Soledad Becerril (Cultura), 38 a?os, la ¨²nica ministra en los gobiernos de la transici¨®n que ahora culminan, no har¨¢ nada al menos hasta enero en que vea que es lo que ocurre con UCD, seg¨²n sus propias palabras, y se retirar¨¢ a Sevilla con su familia.

Luis Cosculluela (Administaci¨®n Territorial), 43 a?os, regresar¨¢ a su c¨¢tedra de Derecho Administrativo en la Universidad de C¨®rdoba, ganada en oposici¨®n hace ahora un a?o.