El Consejo Nacional del partido de Pinto Balsemao se muestra hostil hacia el Gobierno portugu¨¦s
El Consejo Nacional del Partido Social Dem¨®crata, presidido por el primer ministro, Pinto Balsemao, se re¨²ne hoy en Lisboa en un ambiente de crisis de Gobierno. Todos los sectores hostiles al liderazgo de Pinto Balsemao han iniciado contra el l¨ªder del PSD una violenta campa?a, responsabiliz¨¢ndole por el retroceso de Alianza Democr¨¢tica en las elecciones locales del 12 de diciembre y por la progresi¨®n del partido socialista y de la oposici¨®n de izquierda en su conjunto.
Por tercera vez en dos a?os, parecen estar en juego el liderazgo del PSD, la estabilidad del Gobierno y la existencia de la coalici¨®n de centro-derecha, en el poder en Lisboa desde finales de 1979.El segundo partido de la coalici¨®n gubernamental, el Centro Democr¨¢tico y Social (CDS), democristiano, aplaz¨® para el martes la reuni¨®n de su propio ¨®rgano dirigente, dejando as¨ª entender que espera conclusiones importantes de las deliberaciones de la direcci¨®n del PSD.
Los sectores situados a la izquierda dentro del PSD han reaccionado con energ¨ªa contra lo que consideran una utilizaci¨®n de los adversos resultados de las elecciones municipales por parte del CDS y de sus aliados de derecha en el interior del Partido Social Dem¨®crata para consolidar su hegemon¨ªa sobre el Gobierno y la mayor¨ªa parlamentaria.
Las voces de los llamados cr¨ªticos, que defienden la sustituci¨®n de Pinto Balsemao por una direcci¨®n fuerte en el PSD y en el Gobierno, se cruzan con las de aquellos que defienden cada vez m¨¢s abiertamente una ruptura de la actual coalici¨®n y una alianza con los socialistas, entre los que destaca el presidente del Gobierno auton¨®mico de Madeira, Alberto Joao Jardim.
A estas dos corrientes hay que a?adir a¨²n la que considera que Balsemao debe recuperar todo el poder sobre el PSD, en vista del congreso nacional de febrero, para asegurar su reelecci¨®n a la presidencia del partido, aun a costa de un abandono transitorio de la presidencia del Gobierno.
Durante los ¨²ltimos d¨ªas, la Prensa, tanto de izquierda como de derecha, parece haberse puesto de acuerdo para provocar la mayor confusi¨®n en el seno del PSD.
Sin detenerse sobre el examen de las consecuencias de una eventual crisis pol¨ªtica sobre la vida nacional, todos los peri¨®dicos lusos barajan nombres de supuestos sucesores de Pinto Balsemao: Mota Pinto, Mota Amaral, Eurico de Melo, Henrique Granadeiro, Cavaco Silva.
Con la excepci¨®n del primero, todos los candidatos sugeridos tienen el inconveniente de tener adversarios irreductibles en el PSD y en Alianza Democr¨¢tica, y esta circunstancia coloca una vez m¨¢s la decisi¨®n en las manos de Balsemao y de sus amigos.
La posibilidad de renuncia
En la reuni¨®n de la comisi¨®n pol¨ªtica del PSD, celebrada el lunes, Balsemao lleg¨® a admitir su renuncia inmediata y la anulaci¨®n de su viajes a Estados Unidos, pero todos los dirigentes socialdem¨®cratas reconocieron que semejante decisi¨®n equivaldr¨ªa, por parte del PSD, al reconocimiento de una derrota y Balsemao obtuvo un voto de confianza un¨¢nime. La posibilidad de una renuncia amenaza tambi¨¦n a la reuni¨®n de hoy y ma?ana, en la que todos los participantes tendr¨¢n clara conciencia de que sus palabras servir¨¢n de base a la pr¨®xima deliberaci¨®n del aliado-rival democristiano. Es posible que las conclusiones sean aplazadas por unos d¨ªas, obligando el CDS a ser el primero en tomar una posici¨®n definida, o hasta el congreso del PSD de febrero.Freitas do Amaral ya no est¨¢ en condiciones de imponer a su propio partido el mantenimiento del actual Gobierno, de Pinto Balsemao por m¨¢s tiempo, y se vuelve a hablar de su alejamiento temporal de toda actividad pol¨ªtica y gubernamental.
Precisamente el l¨ªder del partido democristiano presidi¨® el jueves, en calidad de ministro de Defensa y en presencia de los altos mandos militares, la peque?a ceremonia oficial que se?al¨® la entrada en vigor de la nueva ley de Defensa Nacional.
El Gobierno dispone ahora de un plazo de cinco d¨ªas para indicar al presidente Eanes los nombres de los generales que considera m¨¢s indicados para desempe?ar, en adelante, las funciones de jefe de Estado Mayor General y jefes de Estado Mayor de los tres ej¨¦rcitos.
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