Clima de angustia en C¨®rcega

(...) El Frente de Liberaci¨®n de C¨®rcega tiene un sistema mafloso de intimidaci¨®n y de chantaje que se extiende a trav¨¦s de toda la isla. El objetivo es doble: expulsar de la isla a todos los extranjeros y, al mismo tiempo, recaudar la mayor cantidad de dinero posible para la guerra. (...) Las fronteras entre la lucha clandestina y el hampa son bastante fluidas.Para obstaculizar la actividad de esos individuos incontrolados, el frente public¨® a fines de a?o una orden: a los corsos con importantes negocios se les pide una participaci¨®n financiera para nuestro movimiento. Los franceses que se benefician de la colonizaci¨®n deben pagar un impuesto revolucionario. Los corsos separatistas han hecho p¨²blica una situaci¨®n que existe desde hace muchos a?os. Han dado el paso que ETA ha cumplido despu¨¦s de la muerte de Franco: asumir la representaci¨®n de los 230.000 habitantes de la isla, de los que 30.000 son extranjeros, sin tener en cuenta en lo m¨¢s m¨ªnimo el resultado de las elecciones. (...)

?Cu¨¢l es la actitud de la poblaci¨®n frente a estos acontecimientos? La separaci¨®n de C¨®rcega de Francia no la considera nadie como posible. Los autonomistas, que piden una mayor independencia en el marco de la Rep¨²blica, han logrado s¨®lo siete de los 63 esca?os de la Asamblea Regional.

6 de enero