Pierre Vilar abrir¨¢ en Barcelona el ciclo de reflexiones sobre la cultura catalana
Max Cahner invita a Catalu?a a un debate sobre la crisis de creaci¨®n
El historiador franc¨¦s Pierre Vilar abrir¨¢ el pr¨®ximo martes las jornadas dedicadas a la reflexi¨®n cr¨ªtica sobre la cultura catalana, organizadas por la Conselleria de Cultura de la Generalitat. En el ciclo, compuesto de nueve conferencias, intervendr¨¢n tambi¨¦n Joan Triad¨², Josep Ferrater Mora, Josep Maria Castellet, Joaquim Molas, Xavier Rubert de Vent¨®s, Miquel Tarradell, Josep Termes y Joan Fuster. Con la misma preocupaci¨®n como fondo, Max Cabner cen¨® anteayer con una veintena de escritores catalanes j¨®venes.
"No hay una crisis de la cultura catalana en t¨¦rminos cuantitativos", afirm¨® ayer el conseller de Cultura de la Generalitat, Max Cahner, ante un grupo de periodistas, con motivo de la presentaci¨®n del ciclo de conferencias dedicado a reflexionar cr¨ªticamente sobre la cultura catalana, organizado por su departamento. Cahner precis¨® que la crisis exist¨ªa "en t¨¦rminos cualitativos. Hemos heredado ciertos h¨¢bitos culturales de la ¨¦poca de la resistencia y ya va siendo hora de darse cuenta de que los tiempos han cambiado".Cahner insisti¨® reiteradamente en que la situaci¨®n cultural de Catalu?a no es, comparativamente hablando, grave, pero que es necesario hallar salidas a la falta de creaci¨®n. "Nuestro deseo al organizar estas jornadas es que sirvan de revulsivo, que provoquen un debate entre todos los interesados. Para eso hemos seleccionado nueve hombres que han tenido cosas que decir en la marcha de la cultura en Catalu?a durante los ¨²ltimos a?os. Si no hay debate posterior, ser¨¢ porque nuestra sociedad no est¨¢ interesada en el problema". Para el conseller, "el gran debate es la crisis, una crisis que no es ¨²nicamente nuestra, que afecta a todo el mundo, pero que a nosotros nos interesa plantear especialmente aqu¨ª". Neg¨® que el debate estuviera en relaci¨®n con la pol¨¦mica desatada por la publicaci¨®n en EL PAIS del art¨ªculo de Felix de Az¨²a sobre el Titanic, "porque yo nunca he conocido ese Titanic boyante. Para Az¨²a, el Titanic era la ¨¦poca en que ¨¦l era considerado alguien en Barcelona, pero aqu¨ª s¨®lo flotaba lo que el antiguo r¨¦gimen permit¨ªa que flotase y, en cambio, hab¨ªa barcos de verdad hundidos a la fuerza". Con todo, consider¨® positiva su publicaci¨®n en la medida en que hab¨ªa propiciado un debate comprometido "y espero que estas jornadas propicien un debate mayor".
En el ciclo intervendr¨¢n los estudiosos citados, a quienes les fue encargado el estudio hace varios meses por el propio Cahner. La entrada en la sala de actos del Colegio de Abogados de Barcelona ser¨¢ gratuita, si bien s¨®lo habr¨¢ discusi¨®n cuando el conferenciante se avenga a ello. Todos los textos de las conferencias han sido impresos y ser¨¢n entregados al t¨¦rmino de las mismas.
Con el tema de la crisis cultural al fondo, el conseller mantuvo una reuni¨®n anteayer por la noche con una veintena de escritores catalanes de la llamada Generaci¨®n de los setenta (escritores que empezaron a publicar a principios de esa d¨¦cada). Cahner abri¨® la reuni¨®n diciendo que, por razones simplemente biol¨®gicas, el futuro estaba en sus manos y que ¨¦l quer¨ªa participarles su preocupaci¨®n por una cierta dispersi¨®n de la cultura catalana. Seg¨²n las palabras del conseller, la generaci¨®n a la que ¨¦l pertenece tuvo que crear, a finales de los cincuenta y primeros de los sesenta, los instrumentos necesarios para iniciar la expansi¨®n de la cultura catalana: revistas, editoriales, enciclopedias.... Ello fue posible debido a una pol¨ªtica cultural unitaria y de resistencia, que en estos momento! ha dejado de tener todo sentido. Sin embargo, y siempre seg¨²n el conseller, el proyecto cultural de los a?os sesenta no ha sido sustituido por ning¨²n otro y en la actualidad empiezan a detectarse dudas en puntos que parec¨ªan superados: biling¨¹ismo, unidad de la lengua, etc¨¦tera.
A lo largo de la cena, y despu¨¦s en una breve sobremesa, se trataron cuestiones diversas que parec¨ªan preocupar a los escritores, entre los que se encontraban LLu¨ªs Racionero, Carme Riera, Alex Broch, Jaume Mart¨ª Olivella, Oriol Pi de Cabanyes, Gillem-Jordi Graells, Joan Rend¨¦, Maria Ant¨°nia Oliver, Joana Escobedo, Josep Albanell y laume Fuster. Los asuntos que atra¨ªan su atenci¨®n eran la existencia de ciertos grupos de presi¨®n, vinculados a la universidad, que pr¨¢cticamente monpolizaban ciertos medios de difusi¨®n y que, a menudo, se manifiestan claramente hostiles a los autores all¨ª presentes. Max Cahner apunt¨® la idea de celebrar un congreso sobre la generaci¨®n citada, en el que estuvieran representadas diferentes disciplinas art¨ªsticas, con la finalidad de debatir en profundidad algunas cuestiones all¨ª suscitadas. La propuesta fue discutida, pero se aplaz¨® la decisi¨®n.
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