La informaci¨®n de anticonceptivos se incluir¨¢ como materia educativa en el bachillerato y formaci¨®n profesional

El Gobierno ultim¨® ayer, en la reuni¨®n del Consejo de Ministros, las medidas que se pondr¨¢n en marcha para complementar la despenalizaci¨®n del aborto, algunas de las cuales entrar¨¢n en vigor en un tiempo muy breve -las referidas a la prevenci¨®n de la subnomalidad y planificaci¨®n familiar- y las restantes lo har¨¢n cuando las Cortes aprueben el proyecto de ley de interrupti¨®n voluntaria del embarazo. De este conjunto de medidas destaca la intenci¨®n inmediata del Gobierno de que la informaci¨®n sobre el uso de los m¨¦todos anticonceptivos sea impartida en los cursos de formaci¨®n profesional y en el correspondiente BUP (bachillerato unificado polivalente), incluida en el programa educativo, y cuya docencia deber¨¢ ser impartida por los ense?antes en colaboraci¨®n con el correspondiente personal especializado de los centros de orientaci¨®n familiar.

Asimismo, el plan del Gobierno incluye la intensificaci¨®n de los medios para solucionar los problpmas de infertilidad; la simplificaci¨®n de los tr¨¢mites para las parejas que deseen adoptar ni?os; la ampliaci¨®n de los m¨¦todos para prevenir la subnormalidad y la protecci¨®n de la mujer embarazada y de la madre soltera. Por contra, el Gobierno a¨²n no se ha planteado que los anticonceptivos corran a cargo de la Seguridad Social y ha aplazado hasta el reforma definitiva del C¨®digo Penal, que se emprender¨¢ el pr¨®ximo mes de junio, la despenalizaci¨®n de la vasectom¨ªa, en el caso de los hombres, y el ligarmento de trompas, en el caso de las mujeres, operaciones ambas que, aunque su uso est¨¢ extendido en nuestro pa¨ªs, contin¨²an teniendo la consideraci¨®n de delitos.Tampoco se Incluy¨® finalmente en el proyecto de ley de despenalizaci¨®n parcial del aborto que se remite a las Cortes (ver p¨¢gina 11), la inclusi¨®n de los casos de estupro e incesto como causas legales de interrupci¨®n voluntaria del embarazo, pese a que este tema fue ampliamente debatido en la reuni¨®n del Consejo de Ministros de ayer.

Los miembros del Gabinete de Felipe Gonz¨¢lez que s¨¦ mostraron partidarios de incluir tales supuestos en el proyecto de despenalizaci¨®n del aborto alegaban que, desgraciadamente, en nuestro pa¨ªs se producen mayor n¨²mero de casos de embarazo por incesto o estupro que por violaci¨®n, con lo que un buen n¨²mero de mujeres quedar¨¢n legalmente desprotegidas. Quienes se opusieron a ello vinieron a se?alar que el actual proyecto es "suficiente", que bastante pol¨¦mica ha levantado ya, y que ambos delitos pueden ir incluidos en el apartado de las violaciones. Tras el debate, prevaleci¨® esta ¨²ltima tesis.

Seg¨²n el dicccionario de la Real Academia, se entiende por estupro "el yacer carnalmente con doncella mayor de doce a?os y menor de 23, mediante abuso o enga?o", mientras el art¨ªculo 434 del C¨®digo Penal y siguientes lo tipifican a partir del "estupro de una doncella mayor de doce a?os y menor de veintitr¨¦s, cometido por autoridad p¨²blica, sacerdote, criado dom¨¦stico, tutor, maestro o encargado por cualquier t¨ªtulo de la educaci¨®n o guarda de la estuprada", con penas desde prisi¨®n menor o arresto mayor si el estupro se comete "por cualquier otra persona interviniendo enga?o". El incesto se refiere a los actos sexuales entre padres con hijos y hermanos entre s¨ª.

20.000 abortos de espa?olas en Londres en 1981

Uno de los textos que el Gobierno ha debatido para aprobar la despenalizaci¨®n de los tres mencionados casos de aborto considera que la exclusi¨®n de la interrupci¨®n del embarazo de la terape¨²tica m¨¦dica lleva consigo "una inaceptable situaci¨®n social con la b¨²squeda de su pr¨¢ctica ?legal y grandes riesgos para la vida de la mujer que los; sufre, o bien el traslado a pa¨ªses donde sea una pr¨¢ctica m¨¦dica aceptable, junto con la incoherencia que tiene la exclusi¨®n de un m¨¦todo que per mite evitar muertes maternas, graves riesgos o da?os permanentes para la madre, as¨ª como el nacimiento de ni?os con importante subriormafidad fisica y mental". El Gobierno posee la cifra oficial, obtenida de las estad¨ªsticas de la Oficina de Censos y Encuestas de Inglaterra, de que durante 1981 abortaron en las cl¨ªnicas londinenses una cifra aproximada de 20.000 espa?olas.

En cualquier caso, queda claro que la interrupci¨®n del embarazo pretende s¨®lo y exclusivamente permitir la prevenci¨®n de esos da?os en la madre y el ni?o, pero es la madre quien elige en conciencia si debe abortar o no.

El enfoque sanitario de este supuesto de despenalizaci¨®n del aborto contempla varios aspectos, en primer lugar, el hecho de que las anomal¨ªas cong¨¦nitas son la primera cuasa de la mortalidad infantil. En Espa?a mueren por esta causa 2.500 ni?os en su primer a?o de vida. Como afirmaba una fuente autorizada del Gobierno, "parece chocante que quienes tanto claman porque un ni?o nazca a pesar de las malformaciones cong¨¦nitas olviden que la mayor¨ªa de ellos mueren antes de cumplir su primer a?o de vida"; en segundo lugar, se ha analizado tambi¨¦n que por esta misma causa nacen cada a?o en nuestro pa¨ªs entre 15.000 y 20.000 ni?os subnormales, razones que han llevado al Gobierno a fijar su atenci¨®n en las pospilidades de prevenci¨®n real de las anomal¨ªas cong¨¦nitas, y a posibilitar la interrupci¨®n del embarazo cuando el feto se vea afectado por un defecto mortal (la anencefalia, por ejemplo), o por defectos de alta gravedad (mongolismo, o malformaciones en la espina dorsal) o de elevado riesgo, tales como la rubeola intrauterina, -un ni?o afectado de rubeola necesita una atenci¨®n medica de 500.000 d¨®lares en Estados Unidos, cerca de sesenta millones de pesetas.

Como medidas preventivas, el Ministerio de Sanidad se propone acometer de inmediato un plan apoyado en tres acciones: disminuci¨®n m¨¢xima del riesgo de las infecciones intrauterinas -fundamentalmente la ya mencionada rubeola-, mediante la intensificaci¨®n de los programas de vacunaci¨®n que puedan lograr la pr¨¢ctica desaparici¨®n de la enfermedad; vigilancia intensiva de la exposici¨®n a las radiaciones iatrog¨¦nicas -trastornos ps¨ªquicos-, as¨ª como a las drogas, especialmente las estimuladas socialmente, como el alcohol o el tabaco; y, finalmente, unos programas de educaci¨®n sexual y familiar que aseguren una correcta informaci¨®n, as¨ª como otra serie de acciones directas, esta vez sobre la mujer embarazada, que van desde la vigilancia sistematizada de su estado a la obligatoriedad de realizar an¨¢lisis serol¨®gicos -estudio de los sueros- o alfafetroprote¨ªnicos -prote¨ªna por la cual pueden detectarse malformaciones en la espina dorsal del feto-, entre otras medidas de igual car¨¢cter de alta especializaci¨®n cient¨ªfica, todas ellas destinadas a evitar la subnormalidad.

14 semanas para el diagn¨®stico

En este sentido, cabe destacar que el Ministerio de Sanidad ha establecido en catorce semanas el l¨ªmite suficiente que permite efectuar an¨¢lisis para detectar malformaciones cong¨¦nitas del feto con resultados de total seguridad.

La posibilidad de la interrupci¨®n del embarazo se complementa, seg¨²n las medidas previstas por el Gobierno, con la organizaci¨®n de centros de Orientaci¨®n Familiar Integral, totalmente gratu¨ªtos, donde se facilitar¨¢ informaci¨®n sobre el uso de los m¨¦todos anticonceptivos, y se dotar¨¢ de los medios necesarios para combatir los problemas de infertilidad, as¨ª como la simplificaci¨®n de los tr¨¢mites de adopci¨®n de ni?os.

Dentro de esta campana de informaci¨®n, iniciada como ya se ha indicado anteriormente desde el bachillerato, se incluir¨¢ tambi¨¦n la intenci¨®n del Gobierno de dejar muy claro a la opini¨®n p¨²blica que todos los informes m¨¦dicos realizados al respecto demuestran que las mujeres que hayan abortado una vez no tienen ning¨²n problema adicional para poder tener un hijo, es decir, que est¨¢n en la misma situaci¨®n de salud que las mujeres que nunca hayan abortado.

No obstante, el Ministerio de Sanidad y los centros de orientaci¨®n familiar advertir¨¢n que no existen estudios fiables al respecto sobre mujeres que hayan abortado dos o m¨¢s veces.

La puesta en marcha de los citados centros de Orientaci¨®n Familiar no supondr¨¢n un excesivo coste a los Presupuestos Generales del Estado, seg¨²n fuentes gubernamentales, puesto que las Corporaciones Locales socialistas han acondicionado ya un buen n¨²mero de locales destinados a dicho fin. El Ministerio, por tanto, se limitar¨¢ a indicar las funciones que deben desarrollarse en dichos centros, y dotar¨¢ a los mismos del personal t¨¦cnico adecuado, entre otros, m¨¦dicos especializados en tocoginecolog¨ªa.

Para llevar a cabo su labor, estos centros contar¨¢n con el apoyo de laboratorios de Microbiolog¨ªa, Serolog¨ªa, Citogen¨¦tica y Bioqu¨ªmica existentes en los diversos hospitales.