El Zaragoza domin¨® al Osasuna sobre la nieve

A Se?or los seguidores zaragozistas en El Sadar le perdonaron anoche el penalt¨ª que fall¨® contra el Osasuna. Y es que Se?or realiz¨®, valga la redundancia, un se?or partido. Jug¨® cuanto quiso y di¨® todo un recital de c¨®mo se juega al f¨²tbol con y sin bal¨®n. El peque?o jugador zaragocista cortaba el juego, distribu¨ªa balones en excelentes condiciones y encima se permit¨ªa el lujo de tirar desde cualquier ¨¢ngulo. Por eso, no es de extra?ar que cuando tir¨® mal el penalti, que precisamente le hab¨ªan realizado a ¨¦l, los seguidores aragoneses le perdonasen este error y acto seguido coreasen su nombre.Se?or fue el motor del Real Zaragoza ante un Osasuna carente de ideas y de esquema de juego que, sin duda, realiz¨® anoche el peor partido de esta temporada en su campo. Consecuentemente con ello enfila ya claramente el camino de la Segunda Divisi¨®n con ocho negativos en su haber. Por contra, el Zaragoza fue el mejor conjunto de cuantos han pasado esta Liga por El Sadar. Un Zaragoza que jug¨® con el equipo pamplonica como el gato con el rat¨®n.

Desde que comenz¨® el partido ya se puso en evidencia la inoperancia del Osasuna. El Real Zaragoza, por mediaci¨®n de Se?or, muy bien arropado por Barbas, se impon¨ªa claramente en el centro de? campo desde donde lanzaban r¨¢pidos contragolpes. Con todo, el conjunto aragon¨¦s no conseguir¨ªa marcar en este primer per¨ªodo, en el que Amarilla desaprovech¨® dos claras ocasiones de gol.

En la reanudaci¨®n se adelant¨® pronto el Zaragoza, pero enseguida Echeverr¨ªa, aprovechando el ¨²nico despiste de la zaga visitante, marc¨® el tanto del empate. No pod¨ªa quedar as¨ª el marcador y Se?or lograr¨ªa el tanto que habr¨ªa de ser a la postre el de la victoria para su equipo. Con este gol se hac¨ªa justicia, habida cuenta de los m¨¦ritos de uno y otro conjunto. Y, a partir de ese momento, s¨®lo existi¨® ya un equipo sobre el terreno de juego: el Zaragoza era due?o de todo el campo. Las oportunidades de marcar para el equipo visitante se sucedieron, pero el cancerbero osasunista se mostr¨® muy seguro.