Las mil derechas
De modo que Fraga coge, llega, agarra y firma el acuerdo de coalici¨®n entre AP, PDE y UL. Detr¨¢s de "este siglo de siglas", que dir¨ªa maestro D¨¢maso (a ver si el Ayuntamiento le borra de la tapia lo de "aborto asesino" a tan inmaculado var¨®n), lo que hay son unos se?ores, claro, como siempre: Abel Matutes, Herrero de Mi?¨®n, Oscar Alzaga Alvarez Alvarez, Guerra Zunzunegui, Chueca Goitia, Pedro Schwartz.Lo que se propone, o sea, esta coalici¨®n, es "preservar los derechos tradicionales del pueblo espa?ol", que es decir tanto como no decir nada, "fomentar el humanismo cristiano" -y dale con el humanismo cristiano, que es una contradicci¨®n como el "existencialismo cristiano" de Gabriel Marcel pues que precisamente el humanismo erige al hombre contra el misterio-, "defender los derechos fundamentales de las personas y el sistema democr¨¢tico". Est¨¢ claro van a defender la democracia contra los dem¨®cratas. La reina do?a Sof¨ªa; el ministro de Cultura, Solana, y Guido Brunner, embajador alem¨¢n, inauguran una gran expo sici¨®n de expresionistas alemanes en Madrid, la Colecci¨®n Buchheim. El se?or Buchheim, submarinista en la guerra mundial, escritor, coleccionista y m¨¢s cosas, ahora va de barba y muletas. Se ha venido con sus cuadros. El expresionismo de entreguerras es la m¨¢s grande manifestaci¨®n de las vanguardias europeas en su versi¨®n alemana. (Hitler los perseguir¨ªa, como a los arquitectos de la Bauhaus, Gropius y dem¨¢s, por hacer "un arte degenerado".) Entre los m¨¢s grandes expresionistas est¨¢ Emil Noide, cimarr¨®n ya entre Alemania y Dinamarca, de quien me parece que hablo en alg¨²n libro in¨¦dito Nolde tiene un cuadro que se llama Hombre de Estado y ciudadanos. Los ciudadanos aparecen in genuos y borrosos. El Hombre de Estado aparece diab¨®lico de mirada y diab¨®licamente humilde de expresi¨®n.
O sea, que lo que tiene que conquistar el hombre de Estado es la inocencia, que hoy llamamos credibilidad, y eso lo tiene Felipe Gonz¨¢lez m¨¢s cerca que nadie. En cambio, las mil derechas de la derecha, que ahora ensayan nueva Liga Hanse¨¢tica o Hansa Teut¨®nica a la espa?ola, se ve que no consiguen coaligarse y que la gran derecha y la mayor¨ªa natural de don Manuel son dos humildes molinos que ¨¦l, en su quijotismo sanchopancesco, ha tomado por gigantes. En tanto, la izquierda ilustrada vuelve donde sol¨ªa, o sea, Quevedo mejor que Cervantes, con el ¨²ltimo bando de Tierno sobre los carnavales, que vale por una pandecta o prem¨¢tica de nuestro padre y se?or don Francisco. Andr¨¦s Amor¨®s comenta un librillo m¨ªo en Abc, y lo que m¨¢s me gusta del comentario es que Amor¨®s, en esta glosa, cambia de estilo, salta de la erudici¨®n a la recreaci¨®n literaria. Este salto cualitativo es importante en ¨¦l, como el salto que ha pegado la prosa municipal de izquierdas, mientras las mil derechas no formulan sino vaguedades t¨®picas y como papales en su ¨²ltima conjunci¨®n o Manifiesto de Riofr¨ªo (la cafeter¨ªa Riofr¨ªo est¨¢ casi pareda?a de la Moncloa/AP). Paco Rabal me manda tulipanes, porque ahora lo moderno es la interflora entre los hombres muy hombres, como ¨¦l y yo. La democracia nos est¨¢ quitando hispidez a todos. Torres, agente de seguros de Oca?a, paral¨ªtico y condenado a muerte cuando el R¨¦gimen, me escribe una carta emocionante. Hay mucha democracia ped¨¢nea por la Espa?a / Espa?a, coleguillas. Don Pablo Iglesias "recibe" en su Fundaci¨®n a Hebe Pastor y otras madres "hu¨¦rfanas de hijo", que dir¨ªa el gran Rosales. Qu¨¦ marcha, tron.
Tiene uno reescrito que esta incapacidad de las derechas actuales para reagruparse en un todo coherente/dialogante no es nada bueno para la democracia, sino muy malo. Al neolerrouxismo, don Manuel, como al alzaguismo, al nacionalvaticanismo y al retroliberalismo no se les sujeta con firmas. Usted ya tiene ch¨®fer, pero no basta.
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