Inmediato funcionamiento de las comisiones mixtas Iglesia-Estado

Ning¨²n diputado de la oposici¨®n se interes¨®, en la sesi¨®n informativa con el ministro de Justicia celebrada ayer, por la situaci¨®n de las relaciones entre la Iglesia y el Estado -competencia de este departamento- y el cumplimiento de los acuerdos con la Santa Sede firmados en 1979. Fue el socialista Antonio Sotillo quien se interes¨® por el tema y dio pie al director general para Asuntos Religiosos, Gustavo Su¨¢rez Pertierra, quien anunci¨® que las comisiones mixtas Estado-Iglesia, previstas en los acuerdos, se pondr¨¢n en funcionamiento inmediatamente.El titular del departamento hizo una referencia al cumplimiento de estos acuerdos y cedi¨® la palabra al director general citado. Manifest¨® que la consignaci¨®n presupuestaria en el ¨²ltimo ejercicio fue de 9.300 millones de pesetas y que para 1983 se est¨¢n realizando gestiones con Hacienda para implantar el nuevo sistema previsto en los acuerdos, con car¨¢cter mixto y tres a?os de duraci¨®n. Se trata de dedicar un porcentaje de uno de los impuestos personales -preferentemente el de la renta- a las atenciones de la Iglesia Cat¨®lica, complementando la cantidad resultante con una consignaci¨®n presupuestaria.

A los tres a?os de aplicaci¨®n de este sistema, la propia Iglesia tender¨ªa a su autofinanciaci¨®n por la v¨ªa del porcentaje -el llamado impropiamente impuesto religioso, porque no es un impuesto, sino la disposici¨®n de parte de un impuesto ya existente- y se iniciar¨ªan nuevos modelos de colaboraci¨®n. Tambi¨¦n se van a poner en marcha los restantes acuerdos, en materia de ense?anza, asistencia religiosa a las Fuerzas Armadas y otros pactos varios, bajo la etiqueta de jur¨ªdicos.

En cuanto a las confesiones no cat¨®licas, el director general de Asuntos Religiosos dio cuenta de la existencia de tres anteproyectos que, con el punto de referencia de los acuerdos con la Santa Sede, podr¨¢n convertirse en nuevos pactos con las confesiones adventista, israelita y evangelista, si se acredita el notorio arraigo de las mismas.