Pol¨¦mico embajador de Chile en la sede suiza de la ONU

El nuevo representante permanente de Chile ante los organismos internacionales con sede en Ginebra, el embajador Washington Carrasco Fern¨¢ndez, acusado de ser uno de los responsables m¨¢s eminentes y directos de la represi¨®n tras el golpe militar del general Pinochet, en 1973, ha colocado a las autoridades suizas y a las propias Naciones Unidas en una situaci¨®n m¨¢s que embarazosa. El anuncio de su presencia ha despertado ya numerosas pruebas de reprobaci¨®n y rechazo y no poca expectaci¨®n en el mundillo diplom¨¢tico.Aunque ni jur¨ªdica ni administrativamente Berna puede impedir la acreditaci¨®n, el ministro de Asuntos Exteriores y presidente de la confederaci¨®n, Pierre Baurt, ha hecho part¨ªcipe ya a la ONU de la inquietud suscitada en la opini¨®n p¨²blica por este nombramiento. El servicio de protocolo de la ONU, por su parte, se limita a advertir que las Naciones Unidas no est¨¢n facultadas para rechazar a ning¨²n embajador, que la designaci¨®n es incumbencia exclusiva de los Estados miembros, independientemente de su r¨¦gimen pol¨ªtico, y que, en definitiva, la ONU no est¨¢ sometida a las tradicionales reglas del placet. Esta astucia ha sido puesta en evidencia por el Comit¨¦ Salvador Allende, quien asegura que el embajador Carrasco Fern¨¢ndez, ministro de Defensa hasta el pasado 1 de febrero, es un serio rival del general Pinochet.