R¨ªgidos controles de mercanc¨ªas en el paso de la verja de Gibraltar

La rigidez con que se aplica el control de paso de mercanc¨ªas en el puesto de polic¨ªa y control de La L¨ªnea-Gibraltar, en uno y otro sentido, disgusta a propios y extra?os. Las quejas aumentan cuando la Guardia Civil requiere nuevamente la documentaci¨®n, unos pasos despu¨¦s de que lo haya hecho la Polic¨ªa Nacional. La minuciosidad del control aduanero en una aduana que no es tal, de una frontera que tampoco lo es -seg¨²n se estipula en el tratado de Utrech- entra dentro de lo anecd¨®tico y se podr¨ªa escribir toda una antolog¨ªa humor¨ªstica al recopilar casos concretos.El celo llega a limites extremos cuando el titular de la administraci¨®n-inspecci¨®n, Carlos Pozas, debe ausentarse. La prohibici¨®n del paso de mercanc¨ªas en ambos sentidos se aplica con un rigor absoluto y, sin embargo, no impide que una persona se mostrara muy ufana de haber conseguido pasar un enorme radiocasete el 28 de febrero, D¨ªa de Andaluc¨ªa. Este d¨ªa se superaron todas las cotas de pasos en uno y otro sentido, sell¨¢ndose m¨¢s de 26.000 pasaportes, por lo que el despiste del carabinero de turno es comprensible.

La Asociaci¨®n de la Peque?a y Mediana Empresa Linense, en la que la pr¨¢ctica totalidad de los empresarios y comerciantes de la ciudad est¨¢n representados, ha solicitado del Ministerio de Asuntos Exteriores una acIaraci¨®n sobre la normativa vigente en el paso de mercanc¨ªas, ya que, al parecer, es este ministerio, y no la Direcci¨®n General de Aduanas, el que controla el tema por sus especiales caracter¨ªsticas.

Mientras tanto, a una gibraltare?a que vuelve de hacer su compra en La L¨ªnea un d¨ªa le permite la Guardia Civil pasar con dos docenas de huevos hacia Gibraltar, y otro d¨ªa le dice que s¨®lo puede pasar una.

Para ilustrar la situaci¨®n pueden citarse casos muy concretos. El tirador gibraltare?o Avellano no pudo regresar a su casa con el modesto trofeo obtenido en una competici¨®n de Soto Grande (San Roque), a la que hab¨ªa sido invitado. Otro tanto sucedi¨® a un equipo de f¨²tbol gibraltare?o, que debi¨® dejar tambi¨¦n depositado en el puesto de la Guardia Civil de la frontera el trofeo obtenido en el estadio El Mirador, de Algeciras, en una competici¨®n juvenil.

El Club Linense de Caza y Pesca organiz¨® un torneo a dos mangas en el que estaba prevista la participaci¨®n de pescadores espa?oles y gibraltare?os. La primera se celebr¨® en Gibraltar con muchas dificultades, pues se pon¨ªan impedimentos a que los linenses pasaran con sus ca?as, y la segunda manga, esta en el lado espa?ol, hubo de suspenderse al no permitirse a los llanitos traer sus ¨²tiles de pesca.

Empleados del Banco de Vizcaya fueron obligados a dejar en el lado espa?ol unas memorias del banco y unos saludas dirigidos a empresarios gibraltare?os, "unos cuantos folletos, quince o veinte, que pod¨ªan ir por correo". El conocido cantaor Chiquetete, que actuaba en Gibraltar, no pudo pasar su guitarra, y para poder introducir su ropa de trabajo debi¨® pon¨¦rsela toda encima. Tampoco pudo venir un guitarrista gibraltare?o al festival ben¨¦fico de la Cruz Roja de San Roque por no poder pasar su guitarra.

La antolog¨ªa humor¨ªstico-burlesca llegar¨ªa a su cumbre con el caso que relataba un coleccionista de insectos: "Ven¨ªa yo desde Gibraltar, donde hab¨ªa comprado dos mariposas para mi colecci¨®n, que tra¨ªa en la mano con sus pl¨¢sticos para no estropearlas en el bolsillo. Tambi¨¦n hab¨ªa cogido un bonito escarabajo, que tra¨ªa vivo, muy interesante. No me dejaron pasar ni las mariposas ni el escarabajo", dec¨ªa. Un espectador del curioso caso le coment¨®: "Pon el escarabajo en el suelo y que pase peatonalmente".

"Lo cierto es que no existe aduana oficialmente y est¨¢ proh¨ªbido el paso de mercanc¨ªas en uno y otro sentido. Cualquier clase de mercanc¨ªas", dicen en los medios aduaneros.

Entre estas mercanc¨ªas est¨¢n incluidos los peri¨®dicos espa?oles. Pese a estar en posesi¨®n de todos los permisos por parte inglesa, y previstos los canales de distribuci¨®n y venta, la Prensa espa?ola no puede pasar la verja porque existe una orden expresa en contra. "Aunque se han solicitado los permisos de la Direcci¨®n General para que pueda llevarse hacia Gbraltar, la Prensa espa?ola; la contestaci¨®n ha sido tajantemente no", dec¨ªa a nuestro peri¨®dico Carlos Pozas, administrador de aduanas.

Tambi¨¦n la Radiotelevisi¨®n gibraltare?a ha tenido problemas al intentar pasar al lado espa?ol para realizar unos reportajes, de acuerdo con las autoridades del Campo de Gibraltar.