El c¨®nsul de EE UU en Sevilla niega que pidiera la retirada de una exposici¨®n

"Jam¨¢s he pedido ni he autorizado a nadie para que pida en mi nombr¨¦ que retiren esta exposici¨®n. Lo ¨²nico que quer¨ªa era saber por qu¨¦ la hab¨ªan puesto", declar¨® el domingo el c¨®nsul de Estados Unidos en Sevilla, John E. Clark, durante la recepci¨®n que ofreci¨® el embajador de su pa¨ªs, Terence Todmann, en el centro Manuel de Falla, donde estos d¨ªas se exhibe la muestra Ir¨¦ a Santiago, de Juan Vida.Tras la pol¨¦mica desatada por el intento de los diplom¨¢ticos norteamericanos para que los cuadros no estuviesen colgados durante la recepci¨®n del embajador, ¨¦sta transcurri¨® en un ambiente distendido y cordial, con el ¨²nico incidente rese?able de la protesta pac¨ªfica a la entrada del centro por un grupo de personas que no pudieron pasar a ver la exposici¨®n por tratarse de un acto privado. Todmann invit¨® a ¨²ltima hora al autor de los cuadros que hab¨ªan originado la pol¨¦mica, y ambos posaron juntos ante algunas de las obras que hab¨ªan sido calificadas por el personal del consulado sevillano como "muy er¨®ticas, inmorales e inadecuadas a la ¨¦tica del acto".

Preguntado, por el intento de comprar los lienzos para poder retirarlos, Clark respondi¨®: "No es cierto que nadie haya intentado comprar estos cuadros, y lo de ofrecer 5.000 d¨®lares por cada uno era un chiste". "Si ese intento se confirma, ser¨ªa, desde luego, un esc¨¢ndalo mundial", dijo, por su parte, el profesor Charles Collier, presidente del Instituto Internacional de Arte Colonial Ib¨¦rico de la Universidad de Santa Fe (Nuevo M¨¦xico).

En el acto estuvieron tambi¨¦n presentes todos los personajes granadinos cuyos nombres hab¨ªan salido a relucir como protagonistas de las gestiones realizadas para que se descolgara la exposici¨®n, algunos de los cuales admitieron ante este corresponsal su participaci¨®n en los hechos, si bien se declararon como "simples intermediarios". El propio gobernador, Jos¨¦ Guirao, reconoci¨® haber encargado a su secretario, Ernesto Noguerol, que telefoneara al ayuntamiento. Cuando ¨¦ste lo hizo, la delegada de Cultura, la socialista Maril¨® Garc¨ªa Cotarelo, le contest¨®: "De acuerdo; yo descuelgo los cuadros si ellos descuelgan sus bases militares".