Mot¨ªn de presos de ETAm en la prisi¨®n de Carabanchel en protesta por los traslados a El Puerto de Santa Mar¨ªa
52 presos acusados de pertenecer a ETA-Militar protagonizaron ayer durante varias horas un mot¨ªn en la tercera galer¨ªa de la prisi¨®n de Carabanchel en protesta por el traslado que de 22 de ellos iba a producirse a primera hora de la ma?ana hacia el penal de El Puerto de Santa Mar¨ªa. Efectivos de la Polic¨ªa Nacional con material antidisturbios redujeron a los presos etarras, que se hab¨ªan encerrado, en dicha galer¨ªa tras sorprender a los funcionarios, hacerse con las llaves de la misma y colocar una barricada frente a la puerta pirincipal, despu¨¦s de que por espacio de varias horas opusieran resistencia lanzando al patio toda clase de objetos. La situaci¨®n qued¨® controlada hacia las doce del mediod¨ªa, sin que se produjeran heridos.
Los hechos se produjeron a partir de las siete de la ma?ana en la tercera galer¨ªa de la prisi¨®n de Carabanchel en la que estaban ayer internados 385 presos, 90 de ellos pol¨ªticos (entre miembros de ETA, miembros del GRAPO, libertarios e independentistas) y el resto comunes ¨²nicamente participaron en el mot¨ªn los presos de ETA Militar, 52 seg¨²n la cifra proporcionada por el director del penal, Eusebio Hern¨¢ndez. Seg¨²n su propia versi¨®n, que luego corroborar¨ªa en todos sus t¨¦rminos Carlos Garc¨ªa, representante del Sindicato Democr¨¢tico de Funcionarios de Prisiones, a 22 presos de ETA-Militar se les hab¨ªa comunicado en la noche del mi¨¦rcoles que a partir de las 6.00 horas de ayer ser¨ªan trasladados al penal de El Puerto de Santa Mar¨ªa."El traslado", seg¨²n manifest¨® Eusebio Hern¨¢ndez, "estaba motivado por el progresivo desalojo de todos los internos de la galer¨ªa a fin de realizar obras de renovaci¨®n en la ¨²ltima planta, donde est¨¢n ingresados los presos pol¨ªticos. Recientemente hab¨ªamos trasladado otros 50 presos pol¨ªticos, en su mayor parte de ETA pol¨ªticomilitar y aut¨®nomos a Alcal¨¢ de Henares".
El mot¨ªn se inici¨® poco despu¨¦s de que comenzara la operaci¨®n de traslado de los 22 presos de ETA por parte de la Guardia Civil, que esperaba fuera de las zonas de las galer¨ªas, a donde aquellos eran conducidos en peque?os grupos por funcionarios desde la tercera galer¨ªa. "Parece", manifest¨® el director de la prisi¨®n, "que cuando se produc¨ªa la conducci¨®n de un segundo grupo de entre 5 ¨® 6 presos desde la tercera planta de la galer¨ªa, ¨¦stos se enfrentaron a los funcionarios, que iban desarmados y no opusieron resistencia, y con violencia y amenazas de que les iban a tirar por la barandilla al patio, les condujeron hasta la oficina que aquellos tienen en la primera planta. All¨ª se apoderaron de las llaves de toda la galer¨ªa y tras expulsar a los funcionarios de la misma cerraron todas las puertas de acceso".
De acuerdo con el mismo testimonio, delante del gran port¨®n principal de barrotes de hierro y gruesos cristales, que comunica con el patio central circular donde se encuentran los controles y las entradas a las galerias 5 y 7, los presos levantaron, pasadas las ocho de la ma?ana, una gran barricada con somieres, cajas, colchones, tablones, cubos de basura y material diverso. Otra barricada se coloc¨® ante la puerta de la oficina de funcionarios, contigua a la principal, y de acceso desde la sala circular. Los presos atrancaron tambi¨¦n las dos puertas de la cancela que comunica con la segunda y tercera planta de la galer¨ªa. Esta quedaba pues aislada del resto de la prisi¨®n. "Los amotinados", precisa Eusebio Hern¨¢ndez, "abrieron todas las celdas de los restantes presos de ETA y a otros pol¨ªticos y comunes, pero estos no se sumaron a la ?acci¨®n atendiendo a las recomendaciones que el equipo de direcci¨®n les ¨ªbamos dando. Como los presos no depon¨ªan su actitud, llamamos a la polic¨ªa nacional que se person¨® con una compa?¨ªa y media de efectivos".
Entra la Polic¨ªa Nacional
Eran las nueve y media de la ma?ana. Siempre seg¨²n el testimonio del director de la c¨¢rcel y de miembro del Sindicato Democr¨¢tico de Funcionarios de Prisiones, que fue testigo de los hechos se utilizaron alicates radial y sopletes para forzar el port¨®n principal y la puerta de acceso a la oficina. Chispas del soplete, y no los presos como se crey¨® al principio, prendieron fuego a la barricada de material infamable produci¨¦ndose en pocos minutos una aut¨¦ntica hoguera que chamusc¨® el port¨®n e hizo reventar cristales. El fuego fue sofocado por los bomberos. Finalmente el director, el inspector y varios funcionarios, accedieron a la galer¨ªa por la puerta de la oficina. "Ante nuestros ruegos de que depusieran su actitud, los presos amotinados, que se hab¨ªan hecho fuertes en la tercera planta, lanza ron al patio central, donde nos en contr¨¢bamos toda clase de objetos como sillas, camas, somieres, lavabos y hierros, que siguieron arrojando cuando entr¨® la Polic¨ªa Nacional".
La refriega -tal es la palabr utilizada por el director del pe nal- dur¨® un par de horas. Durante este tiempo, seg¨²n manifes taron a este peri¨®dico presos comunes en la visita que varios informadores realizaron, a partir de la tres de la tarde, a la galer¨ªa efectada, la Polic¨ªa Nacional us¨® abundante cantidad de pelotas de goma y botes de humo lacrim¨®geno con tra los presos situados en la tercera planta. "La verdad es que se arm¨® un foll¨®n de ruido de pelotazos y cosas que ca¨ªan al patio des de la tercera planta", comentaba un preso com¨²n preventivo que lleva 30 meses internado en la pri si¨®n. "Nosotros ", declaraba jugando con una de las pelotas de goma lanzadas por la polic¨ªa, "es tuvimos chapaos (encerrados) en nuestras celdas hasta que acab¨® el lio. La cosa, francamente, no iba con nosotros. Hay que tener en cuenta que muchos de nosotros podemos salir ahora en libertad provisional con la reformas que ha habido de las leyes judiciales y procesales".
De acuerdo con los testimonios recogidos, los efectivos de la, Policia Nacional, que iban tomando posiciones en las plantas a inedida que abr¨ªan las puertas de acceso con sopletes y alicates, fueron arrinconando a los presos de ETA, haciendo uso del material antidisturbuios. "Los amotinados vieron finalmente- que nada m¨¢s pod¨ªan hacer y fueron cediendo para acabar refugi¨¢ndose en sus celdas", afirm¨® Eusebio Hern¨¢ndez. Eran entre las 11.30 y las 11.45 cuando los efectivos policiales, acompa?a?dos por el director del centro y funcionarios, bajaron al patio a los 52 presos de ETA a los que cachearon. "Como estaba previsto", manifest¨® Eusebio Hern¨¢ndez, "a las doce y media del mediod¨ªa se produjo el traslado previsto de los 22 presos a El Puerto de Santa Mar¨ªa en tanto que 27 presos m¨¢s de ETA pasaron a celdas de castigo". La cifra de 49 reclusos no coincid¨ªa no obstante con la de 52 que proporcion¨® el director de la prisi¨®n.
A las 15.00 horas, y ante la, insistencia de los informadores, Eusebio Hern¨¢ndez acept¨® que estos entraran en la prisi¨®n y se acercaran hasta la puerta de la galer¨ªa donde se hab¨ªa producido el mot¨ªn. Sin erribargo s¨®lo se permiti¨® a los informadores que se acercaran a una ¨¢mplia mirilla del port¨®n para observar el interior de la galer¨ªa. Los presos comunes se negaban a entrar en sus celdas para facilitar la visita de los inf¨®rinadores, como quer¨ªa el director, por lo que Eusebio Hern¨¢ndez declin¨® su promesa inicial.
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