El Mercado de Triana, contra las ruinas del castillo de San Jorge
El Ayuntamiento de Sevilla ha procedido a la apertura de los pliegos de condiciones para la subasta de las obras de reforma del mercado de Triana, uno de los m¨¢s populares de la capital andaluza, aleda?o al puente del mismo nombre. Las obras, que se enmarcan en un ambicioso plan municipal de mejora de los mercados sevillanos, llegan acompa?adas de la pol¨¦mica. La raz¨®n es el hecho, al parecer comprobado, de que debajo del mercado se halla el castillo de San Jorge, una residencia veraniega de los inquisidores que, entre auto de fe y proceso a la heterodoxia, se refugiaban a la orilla del r¨ªo. ?Castillo y mercado son incompatibles? Eso es lo que se debate en la actual pol¨¦mica.
La voz de alarma lleg¨® a las autoridades encargadas de velar por el patrimonio hist¨®rico-art¨ªstico a trav¨¦s de Mar¨ªa Victoria Gonz¨¢lez, una investigadora sobre los judaizantes portugueses condenados por la Inquisici¨®n durante el siglo XVII, que encontr¨®, al hilo de sus b¨²squedas particulares, una preciosa documentaci¨®n sobre el castillo de San Jorge. Se trata de unas memorias de toda la construcci¨®n, elaboradas por los maestros de obras de la Sevilla de entonces.Este tipo de memorias eran frecuentes en una ciudad asolada por las inundaciones, que obligaban a restauraciones y obras de protecci¨®n constantes en sus monumentos m¨¢s destacados. La de 1626 fue una riada tan grave, lleg¨® a erosionar tanto este antiguo castillo almohade, que sus inquisitoriales moradores trasladaron sus aposentos al casco antiguo de Sevilla, a la casa de los Tavera. A?os despu¨¦s cambiaron de opini¨®n y promovieron la m¨¢s importante de las reformas de la fortaleza, la de 1640, que tuvo un coste de 12.000 reales de, los de entonces. De cara a esta reforma se hizo la memoria a vista de ojo en la que los maestros de obras dejaron una descripci¨®n completa y minuciosa de todas las dependencias del castillo para que Mar¨ªa Victoria Gonz¨¢lez la encontrase tres siglos y medio m¨¢s tarde.
Hecho el hallazgo y conocido el prop¨®sito municipal de acometer las obras de rehabilitaci¨®n del mercado trianero, un numeroso grupo de investigadores y expertos, entre ellos los profesores Dom¨ªnguez Ort¨ªz, Comellas y Manzano, dirigieron escritos al Ministerio de Cultura, Junta de Andaluc¨ªa y ayuntamiento, en los que mostraban su profunda preocupaci¨®n porque tales obras pudiesen iniciarse sin haber hecho la exploraci¨®n arqueol¨®gica que la circunstancia demandaba. Pero la inquietud se convirti¨® en denuncia estent¨®rea a cargo de la asociaci¨®n Pablo de Olavide -creada en defensa del patrimonio cultural andaluz-, que acusaba a la Comisi¨®n Provincial de Patrimonio Hist¨®rico-Art¨ªstico de haber emitido un dictamen err¨®neo en el que se aseguraba que bajo el actual mercado no existen restos importantes del castillo de San Jorge.
Para Fernando Fern¨¢ndez, director del Museo Arqueol¨®gico de Sevilla, ¨¦sta es una pol¨¦mica viciada de antemano, porque "¨¦sta es una de las pocas cosas que se est¨¢n haciendo bien en este terreno de la conservaci¨®n del patrimonio arqueol¨®gico". Como director de las catas arqueol¨®gicas que se han hecho bajo el mercado, Fern¨¢ndez -que no oculta su malestar por las manifestaciones de los agrupados en Pablo de Olavide certifica que el castillo est¨¢, efectivamente, debajo de las carnes, pescados y frutas que abastecen a los trianeros, aunque su planta es m¨¢s peque?a que el mercado, y que su descubrimiento ha sido posible precisamente gracias a los trabajos ordenados por la Comisi¨®n del Patrimonio, durante dos meses, antes de conceder la pertinente licencia de obras.
Por su parte, el concejal de abastecimientos del ayuntamiento sevillano, Jos¨¦ Villa, a punto ya de despedirse del cargo, destac¨® que la rehabilitaci¨®n del mercado se encarg¨® al arquitecto Antonio Carvajal, que hab¨ªa ganado el concurso de ideas convocado al efecto, y que desde finales de 1982 ¨¦l personalmente estaba en contacto casi a diario con la Comisi¨®n del Patrimonio Hist¨®rico-Art¨ªstico
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