La versi¨®n para 'ballet' de 'Carmen', de Saura y Gades se convierte en un acontecimiento de la escena de Par¨ªs

Antonio Gades sentenci¨®: "Bailan como Dios". Eran ya las dos de la madrugada de ayer en el hall del Teatro de Par¨ªs, donde hab¨ªa estallado la juerga flamenca que sigui¨® al estreno mundial del ballet Carmen, sentenciado por un millar de espectadores con bravos y aplausos que no quer¨ªan callarse. Inspirada en la obra de Merim¨¦e y en la m¨²sica de Bizet, la Carmen interpretada por Cristina Hoyos y por Gades, dirigida por este ¨²ltimo y por el cineasta Carlos Saura con la participaci¨®n del pintor Antonio Saura en las estructuras y espacios esc¨¦nicos, se ofrece como un acontecimiento en la plaza art¨ªstica parisiense.

"Nuestra versi¨®n de Carmen es una versi¨®n bailada. El baile aqu¨ª es el personaje absoluto. Y quien dice baile dice ritmo, m¨²sica, movimiento. Lo que hemos pretendido es encontrar en nuestras ra¨ªces, en nuestro temperamento, los elementos de esta Carmen, y para ello hemos utilizado la danza y el baile flamenco, sin desde?ar, a pesar de esto, la hermosa partitura de Bizet, que, por el contrario, nos sirvi¨® de contrapunto". Antonio Gades y Carlos Saura, por escrito, filosofan en estos t¨¦rminos sobre su trabajo.Gades, al final de la representaci¨®n, sobre la escena, con el tel¨®n abajo, satisfecho y jadeante, asediado por bocas abiertas y por a admiraci¨®n, explica Carmen a su manera: "Es un parto de dos gemelos (Saura y ¨¦l) y del trabajo. Merim¨¦e se la trajo de Espa?a y nosotros ahora, aprovechando la democracia, nos la hemos llevado de nuevo".

El contrapunto de la obra de Bizet

El flamenco, el contrapunto de Bizet, el lenguaje del ritmo, la austeridad cuasi ancestral de la escenificaci¨®n, alguien apunt¨® que "hacen de esta Carmen una muestra ejemplar de teatro total". Y Saura dijo s¨ª, y Gades se sali¨® por peteneras: "A m¨ª lo que me gusta es hacer lo que he hecho; el cu?o, que se lo pongan los dem¨¢s". Y los dos a la vez, como Marisol, estaban contentos porque "el p¨²blico ha sabido aplaudir muy bien la obra"."Arquetipo de tormentos, desvergonzada y p¨²dica, afrentada y digna, rastrera y noble, virgen y puta, sacerdotisa de las verdades desnudas", de acuerdo con lo que de ella dice Ren¨¦ Terrasson, director general de la ¨®pera del Rin, la Carmen, hecha ballet por Gades y Saura, parece, en efecto, que ratifica la universidad del personaje que encarna. El p¨²blico vivi¨® la obsesi¨®n de Carmen (deseo y muerte) con limpieza y acab¨®, borracho a su manera, gritando bravo.

Alexandra Debray (la madre de Regis Debray, el escritor y consejero del presidente de la Rep¨²blica, Fran?ois Mitterrand), ex concejala gaullista de la alcald¨ªa de Par¨ªs y actual presidenta del Festival de Danza de Par¨ªs, cincel¨® su frase con evidente satisfacci¨®n: "Es tan profundamente espa?ola esta versi¨®n de Carmen, que ha conseguido sortear lo folkl¨®rico". A su lado, alguien exclam¨®: "Es un ba?o de vitalidad".

Una intensidad tr¨¢gica

Otro espectador evocaba: "La intensidad tr¨¢gica, creciente, que te deja seco y te hace so?ar". Pero como reza en el programa, un poema que Rafael Alberti le dedic¨® a Gades en 1969: "Que tienes pena en tu baile, que los fliegos que levantan tus brazos son amarillos. Eso, yo me lo s¨¦, yo, te lo dir¨ªa mejor Federico".En el amplio hall del Teatro de Par¨ªs, el estreno de Carmen ha sido complementado con una exposici¨®n de los trajes con los que Antonia Merc¨¦ (Argentina), hace ya medio siglo, baid¨® en la ¨®pera C¨®mica de Par¨ªs.

Anoche, ca¨ªdo el tel¨®n despu¨¦s de la representaci¨®n, entre los espectadores, an¨®nima, con ojos in,finitos, Josefa Ib¨¢?ez, la madre del cantante Paco Ib¨¢?ez, rememor¨® aquellos fienipos suyos de costurera, cuando ella precisamente cosi¨® estas piezas de museo, que hoy no se sabe si son recuerdos de ayer o de siempre.