El pr¨ªncipe Felipe, por primera vez en su vida, representar¨¢ hoy en Cartagena de Indias a la Jefatura del Estado

Don Felipe de Borb¨®n, pr¨ªncipe de Asturias, viaj¨® ayer, por primera vez en su vida, a Latinoam¨¦rica, llevando, tambi¨¦n por primera vez en su vida, la representaci¨®n de la Jefatura del Estado. El Pr¨ªncipe asistir¨¢ hoy a los actos conmemorativos del 450? aniversario de la fundaci¨®n de Cartagena de Indias (Colombia), actos en los que tambi¨¦n estar¨¢n presentes el presidente del Gobierno espa?ol, Felipe Gonz¨¢lez, y varios cancilleres latinoamericanos.

Los fot¨®grafos de Prensa constataron que, a sus poco m¨¢s de 15 a?os, el Pr¨ªncipe es ya algo m¨¢s alto que el vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, quien, con un impecable traje oscuro, acudi¨® a recibir a don Felipe al pie del helic¨®ptero en el que se traslad¨® desde la Zarzuela a Barajas. Tambi¨¦n el Pr¨ªncipe hab¨ªa abandonado sus tradicionales chaquetas blazier y estrenaba traje azul.Extremadamente serio y sin dar la m¨¢s m¨ªnima muestra de nerviosismo, don Felipe escuch¨®, firme sobre el podio, el himno nacional despu¨¦s de saludar, uno por uno, a la fila de personalidades que acudieron a recibirle: Gregorio Peces-Barba, presidente del Congreso de los Diputados; Arturo Liz¨®n, en representaci¨®n del presidente del Senado; los ministros de la Presidencia y de: Transportes, Javier Moscoso y Enrique Bar¨®n, respectivamente; el gobernador civil de Madrid, Jos¨¦ Mar¨ªa Rodr¨ªguez Colorado; el presidente de la Diputaci¨®n, C¨¦sar Cimadevilla, y el primer teniente de alcalde de Madrid, Juan Barranco, junto a los que, un tanto inexplicablemente, se alineaba el jefe de la secretar¨ªa de Alfonso Guerra. Fue el propio Guerra quien resolvi¨® un momento de vacilaci¨®n del Pr¨ªncipe, quien trat¨® de bajar del podio anticipadamente.

Siempre con la misma calma, don Felipe, acompa?ado por el capit¨¢n general de la I Regi¨®n A¨¦rea, teniente general Mart¨ªnez Vara del Rey, paso revista a las tropas de la XI Escuadrilla A¨¦rea, que le rindi¨® honores. Era igualmente la primera vez que el Pr¨ªncipe recib¨ªa tales honores en solitario, y, en palabras de un miembro de su s¨¦quito, "se comport¨® exactamente como se esperaba de ¨¦l".

La Reina despidi¨® a su hijo

La ceremonia dur¨® apenas siete minutos. Inmediatamente despu¨¦s de haber pasado revista, don Felipe se dirigi¨® al avi¨®n, un Mystere Falcon 50, de tres motores, reci¨¦n adquirido por la Subsecretar¨ªa de Aviaci¨®n Civil. S¨®lo en ese momento, un Mercedes oscuro avanz¨® por la pista, llegando hasta el avi¨®n: la Reina quiso despedir a su hijo en el ¨²ltimo momento, aunque sin interferir en el protocolo y en la ceremonia, que ayer, por ser la primera vez en que don Felipe era su protagonista, perd¨ªa su habitual rutina y adquir¨ªa un significado institucional especial. La Reina se limitar¨ªa a besar al Pr¨ªncipe y saludar durante unos momentos a Guerra, dirigi¨¦ndose inmediatamente, en su autom¨®vil, hasta el helic¨®ptero de la Casa Real que hab¨ªa trasladado a su hijo, en el que do?a Sof¨ªa emprendi¨® vuelo de regreso a la Zarzuela.Sin m¨¢s pre¨¢mbulos, el Pr¨ªncipe subi¨® al avi¨®n, en el que viaj¨® ayer a Santo Domingo acompa?ado del jefe y del secretario de la Casa Real, marqu¨¦s de Mond¨¦jar y general Sabino Fern¨¢ndez Campo, respectivamente. El Mystere hizo ayer escala para repostar en Azores, para proseguir viaje v¨ªa Santo Domingo.

Hoy el Pr¨ªncipe asistir¨¢ a la conmemoraci¨®n de la fundaci¨®n de Cartagena de Indias, en lo que puede considerarse un nuevo paso en la ofensiva diplom¨¢tica latinoamericana emprendida por Espa?a y que ha llevado a distintos pa¨ªses latinoamericanos, en los ¨²ltimos d¨ªas, al Rey -quien volver¨¢ a Venezuela el pr¨®ximo mes de julio con motivo de la celebraci¨®n del aniversario de Sim¨®n Bol¨ªvar- y al presidente Gonz¨¢lez. El regreso de don Felipe a Madrid est¨¢ previsto para el pr¨®ximo s¨¢bado.

Cada vez m¨¢s presencia p¨²blica

La breve ceremonia de ayer es sin duda la m¨¢s importante de las que ha presidido hasta ahora el heredero de la Corona. Desde que, en octubre de 1981, con 13 a?os, el pr¨ªncipe Felipe pronunci¨® su primer discurso, con motivo de la entrega de los Premios Pr¨ªncipe de Asturias, en Oviedo, su presencia p¨²blica se ha ido incrementando sensible y paulatinamente. Aunque ya antes de esa fecha hab¨ªa sido acompa?ante casi asiduo de su padre en maniobras militares y otros actos castrenses, ha sido a partir de aquel primer discurso cuando la imagen de Felipe de Borb¨®n, no siempre acompa?ado por sus padres, se ha ido multiplicando en las p¨¢ginas de los peri¨®dicos espa?oles: inauguraciones, presidencias de honor y proclamaciones de personaje del a?o se han venido sucediendo desde entonces.El pasado mes de octubre, TVE emit¨ªa una pel¨ªcula sobre la vida cotidiana del heredero. Meses despu¨¦s, en enero, algunos medios period¨ªsticos dedicaron p¨¢ginas extraordinarias al Pr¨ªncipe al cumplir ¨¦ste 15 a?os. Las declaraciones que entonces hizo, las primeras, con cierto contenido pol¨ªtico, retratan una parte de su personalidad: "No bastar¨¢ con que yo me considere a m¨ª mismo bueno, sino que har¨¢ falta que lo diga todo el pueblo. No comprendo que se pueda ser Rey de una parte s¨®lo del pueblo". Despu¨¦s a?ad¨ªa: "Para m¨ª, la palabra democracia se parece mucho a la palabra libertad, es decir, que cada uno se sienta libre y pueda expresar lo que sienta".

Pese a todo, los contactos del Pr¨ªncipe con la Prensa han sido escasos y sometidos a los r¨ªgidos controles de la Casa Real. Esta rigidez se extrem¨® ayer en la ceremonia de Barajas, donde, a los obst¨¢culos habituales impuestos por cuestiones de seguridad o por el mero protocolo, se sum¨® la colaboraci¨®n espont¨¢nea del funcionario del aeropuerto encargado de las relaciones p¨²blicas, F¨¦lix Mata, conocido por sus escasas facilidades a la labor informativa.