La reconversi¨®n industrial exigir¨¢ reducciones de plantilla y un mayor compromiso de las empresas

El Consejo de Ministros analiz¨® ayer casi monogr¨¢ficamente el llamado Libro Blanco para la reconversi¨®n y reindustrializaci¨®n del pa¨ªs que ha elaborado un equipo de expertos del Ministerio de Industria y Energ¨ªa. El citado libro, facilitado a este peri¨®dico por fuentes no oficiales, establece las l¨ªneas b¨¢sicas del programa que dicho ministerio llevar¨¢ a cabo en materia de reindustrializaci¨®n con el pretendido fin de poner cotas a la crisis industrial que atraviesa Espa?a.

El documento contiene una fuerte cr¨ªtica de los planes de reconversi¨®n realizados anteriormente, de su desarrollo y coste; anticipa que la instrumentaci¨®n del programa supondr¨¢ fuertes reducciones de las plantillas, un ajuste a la baja de la capacidad productiva de los sectores y un mayor compromiso econ¨®mico, gerencial y financiero para las empresas implicadas; y concede a la empresa p¨²blica un doble papel preponderante en el proceso del reindustrializaci¨®n.Del documento, que se expone en algo m¨¢s de 250 p¨¢ginas, aunque con los anexos llega a las 452, se deduce que ser¨¢ necesaria, con anterioridad a la entrada en vigor del programa, la elaboraci¨®n de una ley de reconversi¨®n, que redefina la pol¨ªtica de reestructuraci¨®n interna de los sectores de reconversi¨®n integr¨¢ndola en un esquema mucho mas amplio que contemple una pol¨ªtica de promoci¨®n industrial ambiciosa. Al mismo tiempo, el texto definitivo del libro, una vez que ayer fuera estudiado por el Gabinete, incorporar¨¢ aportaciones de los distintos ministerios que pueden, incluso, variar el contenido final y la instrumentaci¨®n del proceso definitivo de reconversi¨®n que aparecer¨¢ en la ley.

En cualquier caso, la nueva instrumentaci¨®n de reconversi¨®n contemplado en el libro prev¨¦, en lo que califica como criterios r¨ªgidos, que, en el proceso de determinaci¨®n de sectores en crisis, podr¨¢n acogerse a los beneficios sociales, econ¨®micos y financieros que establecer¨¢ la ley las empresas pertenecientes a "sectores de inter¨¦s estrat¨¦gico e importancia econ¨®mica a nivel nacional", "aquellas que presenten una estructura empresarial manifiestamente inadecuada" o aquellas "que para su supervivencia requieran un cambio tecnol¨®gico profundo".

Independientemente, los responsables del ministerio podr¨¢n decidir, en algunos casos individuales, aquellas empresas que, sin estar englobadas en estos tres cap¨ªtulos, puedan acceder a la reconversi¨®n por consideraciones de balanza de pagos, comercio exterior, generaci¨®n de empleo, etc¨¦tera.

Posteriormente, ser¨¢ el Gobierno, a trav¨¦s de la Comisi¨®n Delegada del Gobierno para Asuntos Econ¨®micos y tras informe previo realizado por el Ministerio de Industria, quien conceda, sin embargo, el calificativo de empresa en reconversi¨®n. Una vez obtenida la calificaci¨®n, ser¨¢ un llamado ?rgano Rector Provisional (ORP) quien convoque a las partes sociales implicadas (centrales, empresa y ¨®rganos adecuados de las administraciones central y auton¨®mas) para ponerlos de acuerdo en la elaboraci¨®n de un plan concreto. Pero en caso de desacuerdo en un plazo fijado, ser¨¢ el propio ORP el que proceder¨¢ a elaborarlo y presentarlo para su aceptaci¨®n a la Comisi¨®n Delegada del Gobierno.

La direcci¨®n y gesti¨®n del plan quedar¨¢ en manos de un nuevo ¨®rgano rector del plan y de otro ¨®rgano de gesti¨®n espec¨ªfico, que podr¨¢ ser una denominada sociedad en reconversi¨®n, y que estar¨¢ bajo supervisi¨®n de otra comisi¨®n de seguimiento en la que participar¨¢n las centrales sindicales.

Sacrificios para todos

Las empresas acogidas al plan de reconversi¨®n se ver¨¢n forzadas a aceptar el plan que se elabore bajo el amparo o aprobaci¨®n del ORP, que podr¨¢ exigir cambios gerenciales y previsiblemente accionariales durante y despu¨¦s del proceso de reconversi¨®n, seg¨²n se deduce en el Libro Blanco.En cuanto a la financiaci¨®n espec¨ªfica de los planes de reconversi¨®n, el libro reconoce la dificultad de obtener recursos para unas empresas encuadradas en lo que se llamar¨ªa prestatarios de poca calidad. En este sentido, se se?ala que ante una previsible pol¨ªtica de las instituciones financieras de guiarse seg¨²n criterios de optiniaci¨®n individual, "es necesario buscar un mecanismo que facilite la contribuci¨®n conjunta del sistema financiero, tanto p¨²blico como privado". Para este prop¨®sito, el Libro Blanco ofrece distintas alternativas, entre ellas la creaci¨®n de "un nuevo coeficiente de inversi¨®n, en el que fuese computable exclusivamente la financiaci¨®n otorgada a las SFRI" (sociedades financieras para la reconversi¨®n industrial), la sustituci¨®n de alguno de los coeficientes ya existentes o la concertaci¨®n con las entidades financieras de cr¨¦ditos sindicados destinados a estas empresas.

El Libro Blanco admite la posibilidad de sentar a representantes bancarios en las empresas encargadas de la administraci¨®n de los recursos financieros disponibles, "aunque respetando el pnincipio de la mayor¨ªa p¨²blica en, sus ¨®rganos decisorios, y tarnbi¨¦n la de establecer una serie de incentivos importantes que contribuyan a canalizar el ahorro privado hacia las empresas en reconversi¨®n.

Respectoa las medidas sociolaborales, el libro, que reconoce la necesidad de reducir plantillas y adecuar la capacidad productiva de las empresas y los sectores a la nueva situaci¨®n creada por la crisis mundial, se?ala dos tipos de actuaciones. Por un lado, las englobadas dentro del actual orden jur¨ªdico y otras que implicar¨¢n modificaciones para potenciar una mayor protecci¨®n a los trabajadores excedentarios.

Por ¨²ltimo, el documento que ser¨¢ presentado, hoy por el ministro de Industria y Energ¨ªa habla de las medidas de promoci¨®n industrial (un concepto filos¨®fico no muy lejano de aquellas interpretaciones previas de reindustrializaci¨®n del pa¨ªs), b¨¢sicamente por la creaci¨®n de nuevas empresas y de la instrumentalizaci¨®n de mejoras tecnol¨®gicas.

Asimismo, el libro dedica un cap¨ªtulo a la empresa p¨²blica y al doble papel que debe desempe?ar como instrumento para la recolocaci¨®n de los excedentes de mano de obra y como reconversi¨®n propiamente dicha, ya que la mayor parte de las empresas que necesitan reconversi¨®n est¨¢n en estos momentos en el sector p¨²blico.