La Administraci¨®n est¨¢ finalmente decidida a terminar con la red del contrabando organizado de Pontevedra
"La Administraci¨®n est¨¢ dispuesta a terminar con el contrabando organizado en Pontevedra y reducirlo, en todo caso, a los niveles artesanales inevitables en cualquier zona fronteriza". En estos t¨¦rminos se expres¨® el gobernador civil de la provincia, Virginio Fuentes, respecto al alcance de la operaci¨®n de lucha contra el contrabando iniciada recientemente por las autoridades en esta parte de Galicia. "Nuestro objetivo es erradicar las organizaciones ilegales que gozan hoy de cierta implantaci¨®n y terminar con el volumen de fraude que ello comporta"."En cualquier frontera", a?ade el gobernador, "ha ocurrido y ocurrir¨¢ que existe un cierto contrabando, pero no puede tolerarse que llegue a adquirir, caracter¨ªsticas de mafia organizada, susceptible de derivar en organizaciones violentas con extorsiones y coacciones. Con esto hay que terminar, porque no es admisible en un pa¨ªs democr¨¢tico".
El nuevo gobernador civil de Pontevedra es un hombre joven; procede del equipo del Ayuntamiento de Valencia, donde particip¨® intensamente en la reorganizaci¨®n de la Polic¨ªa Municipal, y trata en la actualidad de coordinar las tareas de los organismos que intervienen en la lucha contra el contrabando.
No obstante, se muestra en todo momento respetuoso de la acci¨®n interna de la Guardia Civil para sanear sus propios servicios, tras el descubrimiento de presuntas implicaciones de guardias civiles en el contrabando, y elude cualquier pregunta sobre estos temas.
Semanalmente, se celebran reuniones donde participan autoridades de Marina, servicio aduanero, Fuerzas de Seguridad del Estado y otras, en el Gobierno Civil, a fin de examinar la marcha del plan. Todo parece indicar que existe un sincero deseo de hacer algo serio contra las mafias, aunque personas afincadas aqu¨ª desde antiguo mueven la cabeza con escepticismo respecto a las noticias que van produci¨¦ndose en torno a los proyectos de la autoridad.
De la peque?a a la gran empresa
El contrabando es una actividad habitual en Galicia desde hace d¨¦cadas, especialmente con el vecino Portugal. Pero, como suele ocurrir en todos los negocios florecientes, de la peque?a empresa se lleg¨® a la de gran tama?o y entonces empezaron las inversiones fuertes de capital en este ramo, mucho m¨¢s rentables y exentas de controles que otras actividades legales.Despu¨¦s, las principales familias contrabandistas conectaron con organizaciones internacionales, que pusieron los medios -flete de grandes barcos, sofisticado sistema de comunicaciones- para el desarrollo del comercio clandestino. Eso permiti¨® comprar m¨¢s y al mismo tiempo ofreci¨® a los implicados una seguridad imposible para el peque?o contrabando individual.
En la fase actual, parece que las grandes bandas han tratado de asegurar mejor sus redes, conectado con personas independientes o no vinculadas hasta ahora al negocio, y procurando implicarlas en ¨¦l. El peque?o traficante, o el trabajador en paro que entra en la actividad contrabandista, se siente ahora en peligro: est¨¢ cogido entre dos fuegos, la mafia y las autoridades; se encuentra en una situaci¨®n en la que puede ganar 200.000 pesetas al mes simplemente con descargar mercanc¨ªa o tripular lanchas una docena de noches, cantidad que dif¨ªcilmente obtendr¨ªa por m¨¦todos legales. Incluso en estos momentos se habla de retribuciones m¨¢s altas para compensar la peligrosidad".
Al mismo tiempo existe un factor social e ideol¨®gico que se utiliza como justificaci¨®n de tal estado de cosas: el contrabando "es ilegal, pero no es il¨ªcito", es decir, no se hace da?o a nadie pasando de contrabando una mercanc¨ªa como el tabaco, que se vende normalmente en Espa?a.
La ¨²nica diferencia es que no se pagan impuestos, lo cual es equiparable a los numerosos ciudadanos que eluden multas de tr¨¢fico u ocultan parte de sus ingresos al fisco. Todo ello se ha visto favorecido por la crisis de la pesca, que ha enviado al paro a gran cantidad de marineros, unido a la cobertura prestada por la tradicional dedicaci¨®n de muchas familias al peque?o contrabando.
La red caciquil
Hasta aqu¨ª, casi todas las fuentes consultadas coinciden en una descripci¨®n similar de la situaci¨®n. Pero las gentes vinculadas a la izquierda van m¨¢s all¨¢: el contrabando ha crecido tanto gracias al poder local.Los ayuntamientos -seg¨²n esta versi¨®n- han estado tradicionalmente en manos de gentes sin definici¨®n ideol¨®gica clara, que conectan claramente con la estructura del caciquismo. Familias influyentes dominan zonas concretas a base de "conceder de favor lo que es de justicia", en palabras de un dirigente del PSOE gallego.
Durante el dominio pol¨ªtico de UCD, primero, y de AP, despu¨¦s, aproximadamente los mismos sectores hicieron parecidas cosas, cambiando de marca pol¨ªtica en funci¨®n de las circunstancias. Si los socialistas no hubieran ganado las elecciones generales de 1982, es posible que las cosas hubieran continuado igual.
Pero ante la renovaci¨®n de ayuntamientos en las elecciones del 8 de mayo pasado, el PSOE avanz¨® en otros sectores de Galicia y, sin embargo, retrocedi¨® en los pueblos de la r¨ªa de Arosa, la m¨¢s afectada por el contrabando, perdiendo alcald¨ªas tan significativas como las de Villanueva y Villagarc¨ªa.
Luis Ferreiro, miembro de la ejecutiva del PSOE gallego, habla de "connivencias innegables entre el contrabando y los caciques" y afirma que el objetivo a perseguir por los que act¨²an fuera de la ley es que "aqu¨ª se consolide una nueva Sicilia en que las mafias funcionen imponiendo la ley del silencio, las coacciones o las amenazas de muerte".
El peligro de una fuerte represi¨®n
Pero la mera represion no representa una soluci¨®n definitiva, y en, ello coinciden muchas personas. La inquietud ha cundido entre las familias que viven del contrabando, en los escalones intermedios o bajos de su estructura de distribuci¨®n. Cuando se intente el golpe policial decisivo podr¨ªa llegar a producirse un estallido social, pero dejar que la mafia se desarrolle conlleva un peligro mucho m¨¢s grave que el del comercio del tabaco: 250 gramos de hero¨ªna, por ejemplo, pueden suponer 250.000 pesetas, y ocupan mucho menos espacio que las cajas de inocente tabaco rubio.Es factible, incluso, pasar droga en cajas de tabaco, porque en la zozobra del transporte nocturno puede que los distribuidores no tengan tiempo ni de comprobar lo que llevan. Ello por no hablar de aspectos tanto o m¨¢s peligrosos como el tr¨¢fico de armas o de divisas.
En suma, las autoridades se ven enfrentadas no ya a la p¨¦rdida de dinero para el fisco que supone el contrabando de tabaco -30.000 millones de pesetas al a?o, seg¨²n cifras de los servicios de aduanas- sino al mantenimiento de una activa red- de acceso al interior del pa¨ªs no controlada por el Estado. Pero si los responsables pol¨ªticos dan el paso adelante de cercenar a la mafia, es posible que no tengan recursos inmediatos para frenar la depresi¨®n econ¨®mica de las r¨ªas.
A su vez, ni ellos mismos saben a ciencia cierta quienes son los grandes due?os del negocio mafioso y las inversiones que est¨¢n realmente empe?adas en esta actividad. S¨®lo hay sospechas, fuertes indicios, y de ah¨ª la investigaci¨®n abierta por diversas v¨ªas para obtener datos y pruebas antes de proceder a la escalada policial contra el comercio ilegal.
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