Gratos recuerdos
Esta edici¨®n del Open Brit¨¢nico disputada en el Royal Birkdale me trae gratos recuerdos. Fue aqu¨ª, en el a?o 1976, donde el segundo puesto me vali¨® much¨ªsi mo moralmente, y, sobre todo me dio a conocer internacionalmente. Para m¨ª, este torneo es el m¨¢s importante de los cuatro que componen el Grand Slam. Es el m¨¢s importante porque es el de m¨¢s prestigio, el de m¨¢s solera y el que atrae m¨¢s p¨²blico. S¨®lo hace falta verlo, ya no en los d¨ªas del torneo, sino en las rondas previas de entrenamiento.Cuando asisto a un torneo de esta calidad, en el que el p¨²blico mima constantemente a los jugadores, lo ¨²nico que pienso es en introducir el golf en Espa?a. Estoy harto de decir que construyan m¨¢s campos p¨²blicos, pero no he encontrado todav¨ªa ninguna respuesta positiva. Y no es que pierda el inter¨¦s, pero s¨ª me voy resignando, porque es una verg¨²enza que en los ¨²ltimos siete a?os no se haya construido ning¨²n campo p¨²blico en Espa?a.
No me encuentro muy bien. Este campo es muy dif¨ªcil, pero la gente que me conoce y esos aficionados que cada d¨ªa se interesan m¨¢s por el golf, deben estar convencidos de que yo nunca decepciono. Podr¨¦ tener malos resultados, pero nunca decepcionar¨¦. Y no lo hago porque soy un jugador espectacular. Le doy al p¨²blico muchas cosas. Soy como uno de esos jugadores de f¨²tbol -y esto no es un partido de f¨²tbol- que puede que no metan muchos goles, pero cuando los marcan los hacen bonitos. Parto como favorito, pero all¨ª, en el campo, nunca se sabe. Soy el primero en desear el triunfo, por m¨ª y por todos los espa?oles.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.